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Red Internacional
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CUMBRE EN ARENILLAS. Perú y Ecuador: unidos por la ¨seguridad¨

Este 30 y 31 de Octubre, se desarrolló en Ecuador, en el marco del VIII Gabinete Binacional, la denominada Cumbre de Arenillas. Este tipo de gabinetes vienen desarrollándose entre Perú y Ecuador desde que se firmaron los acuerdos de paz en el año 1998, con el objetivo de “fortalecer las relaciones bilaterales” y trabajar sobre las áreas fronterizas entre ambos países.

Viernes 31 de octubre de 2014

Fotografía:EFE

Los presidentes Rafael Correa y Ollanta Humala, destacaron los “avances” de sus gestiones en la “construcción de una relación de paz” para lograr la integración fronteriza. Si bien la agenda fue presentada alrededor de los temas más variados: ecología, infraestructura, salud, educación, turismo, etc., uno de los ejes centrales de discusión fue el tema de la “seguridad” y la cooperación conjunta de combate al narcotráfico, tráfico de combustibles,y el crimen organizado. De los tres convenios firmados, uno, se refiere específicamente al tema “seguridad y fronteras” estableciendo, por ejemplo, que una persona detenida en cualquiera de los dos países pueda ser deportada a su lugar de origen para cumplir sentencia.

En este sentido, la agenda de esta cumbre coincide con uno de los temas centrales previamente tratados por la XI Conferencia de Ministros de Defensa que se celebró en Perú en octubre pasado, donde la “preocupación de Washington” sobre las políticas contra el narcotráfico y el terrorismo, estuvieron presentes en la voz del propio Secretario de Estado de defensa norteamericano, Chuck Hagel.

A pesar de que las relaciones estrechas de EEUU en la región, vengan más directamente de la mano de los países de la denominada Alianza del Pacífico (México, Perú, Colombia), mientras que con gobiernos como el de Correa en Ecuador, están atravesadas por ciertas tensiones, este acuerdo binacional entre Ecuador y Perú está influenciado por la impronta de la “preocupación norteamericana” en la región.

EEUU quiere darle cierto aire humanitario a su agenda, hablando de la lucha contra la trata de personas, punto que también trató Arenillas, conjuntamente con el desarme de las minas antipersonales instaladas durante la guerra; pero la historia ya mostró varias veces que cuando EEUU habla de “política de seguridad”, lejos están de interesarse en atacar al verdadero crimen organizado, del que son parte activa el poder político, la justicia, las fuerzas militares y policiales, sino mantener el control político y económico sobre la región, y esto lo logra tanto a través de sus socios directos del “Pacífico”, como de “los puntos de encuentro” que establece con los denominados gobiernos “progresistas”.

Todavía están por conocerse los detalles más precisos respecto de los acuerdos firmados en esta jornada, pero todo parece indicar que se reforzarán las resoluciones de encuentros anteriores, como el de 2013, que puso especial énfasis en medidas como: intercambio de experiencias y formación militar, fortalecimiento de las instituciones policiales y combate a la delincuencia, patrullaje de fronteras, operaciones conjuntas contra la minería ilegal y el tráfico de combustible, etc.

Hablando de la paz… ¿y por casa cómo andamos?

El presidente Correa se refirió en varias ocasiones al valor que representa la construcción una relación de Paz, cuestión que no deja de resultar contradictoria con la situación política que está atravesando el país luego de la masiva movilización de más de 10mil trabajadores y otros sectores sociales contra la reforma al código laboral en Ecuador y demandas varias (contra la ley de educación, despidos forzados a trabajadores públicos, explotación del Yasuní, persecución a dirigentes sociales) , que terminó con una feroz represión y un saldo más de 120 detenidos, muchos de ellos estudiantes menores de edad. La represión y criminalización de la protesta social en Ecuador, al igual que la gran crisis política del gobierno de Humala en Perú por escándalos de corrupción y los estragos de su política neoliberal, contrastan fuertemente con los discursos de paz que acompañaron esta cumbre.