El día miércoles 11 por la tarde más de 100 personas, en su gran mayoría mujeres, se concentraron en la plaza central de Pilar, para realizar un encuentro convocado por la Asamblea de Mujeres de Pilar y la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto.
Jueves 12 de abril de 2018 11:38
Estuvieron presentes, en este encuentro las diferentes corrientes feministas del distrito. Desde Pan y Rosas y La Marrón Suteba Pilar participamos junto a mujeres trabajadoras de P&G, despedidas de Kromberg y jóvenes estudiantes de secundario y del terciario N°51.
En el encuentro, cada corriente pudo expresar, a través de micrófono abierto, su postura frente al tratamiento actual del debate por el derecho a decidir la interrupción voluntaria del embarazo que por estos días se está desarrollando en el Congreso.
Desde Pan y Rosas sabemos que el debate actual se conquistó en las calles, por las exigencias del movimiento de mujeres y mediante la organización en los lugares de estudio y de trabajo, y que la Aprobación del Proyecto de Ley de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto será conquistado por las mismas vías.
La necesidad de debatir sobre educación sexual junto a la comunidad educativa
Docentes de los diferentes niveles, participaron de la actividad como expresión de un sector del ámbito educativo que manifiestan su apoyo al vigente reclamo sobre la ley de aborto legal, seguro y gratuito y, en relación a esto, ven necesario que en las escuelas públicas se implemente efectivamente la Ley de Educación Sexual Integral ya que se trabaja con niños y adolescentes, quienes son los más vulnerados a la hora de hablar de derechos y, más aún, en educación sexual; ya que si bien está establecido dentro del currículo escolar, los que trabajamos día a día en las aulas sabemos que ni siquiera durante el gobierno kirchnerista ni ahora con el actual de Macri y Vidal esta ley no se aplica en los hechos y es responsabilidad de los gobiernos de garantizarla con el presupuesto adecuado para capacitar a los docentes, entre otras cuestiones.
Resulta muy contradictorio que, siendo pública la convocatoria de dicha Asamblea de Mujeres previas semanas antes, el sindicato Suteba se decida a llamar para ese mismo miércoles, a nivel provincial, a una jornada de asambleas a realizarse en todas las escuelas durante la jornada escolar y, luego, a una reunión de delegados “para construir un plan de lucha”. Dicha reunión fue convocada de forma burocrática unas horas antes de las posibles Asambleas de Mujeres, en el marco de un paro de ATE.
La Secretaria de Género del sindicato, si bien se dispuso a participar de la convocatoria, no apostó a que toda la docencia participe de las Asambleas de Mujeres, ya que muchos no estuvieron informados. Desde La Marrón intentamos dar la pelea democrática para que la convocatoria se haga extendida y convoque al conjunto de la docencia, ya que solo un pequeño sector de esta estuvo informado.
El sindicato junto a la Secretaría de Género deben ser herramientas que garanticen la participación de las y los docentes en estos espacios de debate donde se desarrollan estos temas tan importantes como lo es el derecho al aborto que hace también al tema en educación sexual el cual, como ya se mencionó, no se realiza efectivamente en las escuelas.
Se podría pensar que el hecho de que la Secretaria de Género no se jugó a que la mayoría de los docentes participen de la Asamblea de Mujeres, es expresión de que se considera por separado ambas cuestiones, por un lado, un plan de lucha frente al ajuste que en educación el gobierno de Vidal está llevando a cabo, y, por otro, el derecho a la educación sexual tan necesaria en las escuelas como también el derecho a la salud y a decidir sobre la interrupción de un embarazo no planificado.
Si tenemos en cuenta los niveles de deserción escolar, en la provincia, relacionados con los embarazos no deseados, en niñas de 5° y 6° año del nivel primario, y en adolescentes de secundaria- ya sean estos por abuso o iniciación sexual temprana-, y , que se trata de un gremio integrado en un más del 70% por mujeres, quienes también sufren violencia de género en sus hogares y se ven vulneradas, a su vez, en derechos como por ejemplo a un sueldo acorde a la inflación y a la canasta básica familiar; condenadas a trabajar en condiciones poco dignas en aulas hacinadas, sin materiales didácticos; con escuelas donde se llueve donde se corta la luz y el agua frecuentemente durante el año, escuelas que no cuentan con las condiciones de infraestructura necesarias, donde los alumnos que asisten tienen como única comida del día los comedores de las escuelas debido a que sus padres no tienen empleo o lo tienen en negro, de manera informal.
Estos derechos mencionados, si hablamos de derechos, como también lo es el derecho al aborto, es parte de un derecho elemental y de salud al igual que el derecho a una educación pública y de calidad, pensar por separado estas cuestiones da cuenta de que somos los docentes quienes lidiamos día a día con la precariedad de los barrios y los hogares de aquellos niños que educamos, y el impacto de la pobreza estructural en su enseñanza.
Estas cuestiones no son menores si tenemos en cuenta el discurso del Gobierno actual, y de los anteriores, donde culpabiliza al docente por la mala calidad educativa en las escuelas públicas mientras cada año (los diferentes bloques del PJ, Cambiemos y el masismo) vienen votando un presupuesto a la baja y, en cambio, se invierte en las privadas. Desde La Marrón exigimos que el sindicato se ponga a la cabeza de las demandas que hacen a la comunidad educativa, ya sea desde la Secretaria de Género u de otras y consideramos que el plan de lucha no puede estar desligado en cuanto a materia en educación sexual se trata.
Las y los docentes de La Marrón sabemos que es necesario que en las escuelas se discutan estos temas que hacen a la educación y que se involucren tanto los docentes como las familias.