Manuel Adorni tuvo su primer encuentro oficial con la prensa en la Casa Rosada. Sólo dijo generalidades con un tono alegre, pese a que reafirmó que el ajuste será duro y los precios no dejarán de subir. Los anuncios económicos quedarán en manos de Caputo, quizás este martes.
Lunes 11 de diciembre de 2023 09:37
Foto Pepe Mateos | Télam
Este lunes, pasadas las 8, el vocero presidencial Manuel Adorni dio su primera conferencia de prensa desde la Casa Rosada. Menos de un día después de la asunción de Javier Milei al frente del Gobierno, el funcionario anticipó “cada día”, alrededor de las 9 de la mañana, hablará con los medios comentando y anunciando aquello que el Gobierno quiere comunicar.
Curiosamente Adorni arrancó diciendo que para él son innegociables “el respeto por el periodismo, el respeto por cada uno de ustedes y el respeto por la libre opinión”. Curioso, porque el primer acto de Gobierno de Milei de este domingo, la jura de los miembros de su Gabinete, se basó en una restricción total a la libertad de información de la población, convirtiendo un acto público en al sede de Gobierno en un evento privatizado e “íntimo” de la casta que desde ayer asumió en el Poder Ejecutivo.
“Se van a encontrar con una vocería abierta, con diálogo y que va a estar compartiendo cada día con ustedes y con los argentinos lo que pasa en la Argentina, lo que el Presidente quiera comunicar, los anuncios que haya que hacer y cada cuestión que ocurra en nuestra querida República Argentina”, dijo Adorni con un exceso de palabrerío que no explica demasiado.
En línea con su jefe político, el vocero dijo que “está claro que se vienen tiempos de cambio” y “complejos” en una “Argentina desordenada, donde tal vez nos ha ganado por un tiempo la decadencia y se ha perdido, en parte, lo que fue esa Argentina pujante”.
Adorni dijo que, para la gestión de La Libertad Avanza, “el principio de la solución a los problemas de Argentina tienen un enfoque económico y, claramente, la batalla va a estar dada en términos de crecimiento de la economía pero resolviendo problemas muy estructurales que tiene el Estado en términos de política fiscal. El ‘no hay plata’ no es una frase hecha”. Y agregó, forzando una comparación entre el Estado y las cuentas de cualquier individuo, que “no hay plata y se va a respetar a rajatabla el equilibrio fiscal y la lógica que tenemos todos en nuestra economía personal, que es ‘no podemos gastar más de lo que tenemos’”.
Otro elemento que marca la poca afección a la libertad de prensa es que, de antemano, Adorni sólo permitió “cinco preguntas” de periodistas. Lo que de todos modos, ante la inexistencia de anuncios y la marcada improvisación de la comunicación oficial, hasta pareció mucho.
Sobre las primeras medidas económicas, el vocero manifestó: “Estamos todos muy preocupados por Argentina, entendemos la ansiedad y la desesperación de muchos por saber qué es lo que viene. Mañana los anuncios estarán realizados, en materia económica, por el ministro Luis Caputo. No les puedo brindar el horario porque todavía no está definido”.
Respecto a los aumentos de precios, que en los últimos días se vieron en diversos rubros y se anticipan más aún para el próximo período, Adorni insistió con el discurso de Milei sobre la “Argentina desordenada” y con “un problema de emisión monetaria” que “va a seguir impactando en precios durante mucho tiempo más”. En ese sentido, afirmó que “la política monetaria tiene rezagos que lleva tiempo corregir”.
Consultado por eventuales bajas o eliminación de impuestos, el funcionario no dijo nada. Sólo que “Argentina vive en un estado de emergencia” y que “las definiciones económicas van a estar a cargo del ministro Caputo”, quien decidirá si la reforma impositiva se incluirá o no “en este primer paquete de medidas”.
Adorni intentó acomodar una respuesta para salir del paso cuando le preguntaron sobre qué empresas públicas se privatizarían y qué les espera a las trabajadoras y los trabajadores de la administración pública nacional. “Estamos viviendo un 200 % de inflación anual y salarios reales que da muchas veces pena cuando se comparan con lo que pasa en el mundo”, dijo el vocero. Y agregó que “al empleado público hay que ponerlo en valor”, porque “la gran mayoría de la gente que trabaja en el Estado es válida, es necesaria y muchas veces ha sido dejada de lado”.
En una definición por demás abstracta, dijo que se va “a combatir lo que se denomina el ‘empleo militante’, que está por una cuestión política, que no aporta nada sino que quita”. Buscando un mensaje tranquilizador, insistió en que “ningún empleado público que trabaja, que es válido y que aporta valor debe estar preocupado por su puesto de trabajo”.
Finalmente, el vocero presidencial dijo que “Milei vino a cambiar la Argentina” y que “se va a terminar esta lógica de premiar al que no trabaja con los mismos premios que se le dan al que sí trabaja”. Y al pedirle algún “mensaje” a los mercados en las horas previas a la apertura de la semana, Adorni dijo: “Vamos a intentar terminar con la futurología, vamos a hablar sobre hechos ciertos, mañana analizaremos cómo reaccionó el mercado hoy”.
Una vez finalizada la conferencia de prensa, a Adorni lo abordaron varios periodistas y le sacaron una última frase. Fue sobre la decisión de realizar la jura de ministro en el Salón Blanco de la Casa Rosada sin transmisión en vivo y sin periodistas en el recinto. “Fue un acto netamente administrativo, los ministros tenían trabajo previo y posterior, al igual que el Presidente”, respondió Adorni, demostrando que el respeto al trabajo de la prensa y la libertad de información de la población de conjunto no están en la agenda del nuevo gobierno.
