Después de dos años de virtualidad, sin elecciones de Centro de Estudiantes, Consejo Directivo y Juntas de Carrera, las y los estudiantes votaron a sus representantes. Se fortalecen las agrupaciones del Rectorado (Franja Morada/Nuevo Espacio y la UES). El Frente de Izquierda Unidad estuvo a 85 votos de ganar en Filosofía, y se presentó en la mayoría de las facultades. Cuáles son los desafíos de la izquierda anticapitalista y socialista en este momento de la universidad.
Martes 12 de abril de 2022 17:23
Los resultados
El viernes pasado se realizaron los escrutinios definitivos en las trece facultades de la Universidad de Buenos Aires. A diferencia de como solían ser, las elecciones se dieron a solo una semana de iniciadas las clases, dejando menos margen para que los estudiantes, incluyendo las y los ingresantes, pudieran conocer a las agrupaciones y sus propuestas.
Esta decisión del Rectorado, con apoyo de sectores peronistas y radicales que co-gobiernan la UBA, tuvo dos objetivos: por un lado, que la elección se convierta en un “trámite” donde los debates nacionales y sobre qué universidad necesitamos queden por fuera. Por otro, la pronta elección del rector, donde podría habilitarse la re-reelección de Barbieri.
Los centros de estudiantes de Medicina, Económicas, Psicología, Arquitectura, Diseño y Urbanismo y Odontología, quedaron en manos de la Franja Morada/Nuevo Espacio/EDI/Refadu (UCR). También se incorporaron a la conducción en Derecho, en una alianza con la Nuevo Derecho (Partido Socialista). Es la corriente que avanzó en toda la UBA.
En Ingeniería, el Movimiento Lineal Independiente, eterno aliado del radicalismo, renovó su conducción. En Agronomía, la agrupación LAI, ligada a las autoridades, recuperó la conducción histórica de su centro, que se encontraba en manos del FANA (Partido Obrero-Movimiento Evita).
En Sociales, la UES (Alberto Fernández) retuvo el centro, en una facultad que disputa con La 15 (La Cámpora, Patria Grande, y otros). La Cámpora sostuvo Exactas, el único Centro que dirige sin alianzas, mientras que otras agrupaciones ligadas al kirchnerismo, como La Mella-Patria Grande, tuvieron un retroceso en la mayoría de las facultades.
La disputa más importante se dio en Filosofía y Letras, donde La Izquierda al Frente Unidad estuvo a solo 85 votos de ganar el centro frente a la alianza del Colectivo (La Cámpora, La Mella, Movimiento Evita). El Partido Obrero continúa en la conducción de Farmacia y Bioquímica, donde denuncian a Nuevo Espacio (UCR) de cometer fraude, y Ciencias Veterinarias.
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La red de agrupaciones que impulsamos desde la Juventud del PTS (En Clave Roja, Contraimagen, La Izquierda en Derecho) fue parte de listas unitarias del FIT, que obtuvo el segundo lugar en la Secretaría General del Centro de Estudiantes de Filosofía y Letras (CEFyL) y ganó representación por la minoría estudiantil en el Consejo Directivo, además de la mayoría en la Junta de Carrera de Historia y la minoría en las Juntas de Artes y de Filosofía.
En Sociales, retuvimos la Secretaría de Unidad Obrero-Estudiantil como parte del centro y logramos dos consejeres en la Junta de Carrera de Sociología. En Psicología, ganamos la Secretaría de Género y Diversidad del Centro del Estudiantes. En Derecho y Medicina, salimos tercera fuerza, aunque con una baja del porcentaje como explicamos debajo.
Tendencias: mirar la elección como una película y no como una foto
La elección mostró dos tendencias contradictorias. En primer lugar, la valoración preponderante a las conducciones de los Centros en función de quienes aseguraron una comunicación y acercamiento a la carrera durante la pandemia. Para esto, La Franja y el Peronismo contaron con recursos de las autoridades de las facultades, y aprovecharon para sostener a sus agrupaciones.
Por poner algunos ejemplos: en Económicas, la gestión enviaba mails institucionales a las y los alumnos explicando cómo y dónde votar, con la insignia de “Votá Lista 1, Nuevo Espacio”. En Sociales, explicaban el funcionamiento de la elección obligatoria con la boleta de la Alternativa Académica, la lista radical que dirige la carrera de Ciencia Política. Anécdotas sobran.
Esto se combinó con el esfuerzo de parte del radicalismo y peronismo de esconder su vinculación a las dos coaliciones políticas principales que gobiernan el país y la CABA. Que oculten su identidad política no es casual: buscaron despolitizar para evitar todo tipo de cuestionamiento.
Mientras votan presupuestos de ajuste y la inflación hace valer cada día menos nuestros salarios y el de nuestras familias, los grandes aparatos de las agrupaciones del régimen universitario nos quieren vender que podemos terminar la carrera porque los apuntes cuestan $100 más o $100 menos. ¿Y cargar la SUBE o comer algo a la salida del laburo? Después de dos años sin presencialidad, sin espacios sociales de encuentro y debate, las agrupaciones ligadas a los grandes partidos políticos hicieron lo posible para individualizar la discusión sobre las condiciones de cursada de cada estudiante.
Todos y todas volvimos contentos a las facultades, nos reencontramos entre nosotres y con les docentes. Pero también se vio preocupación y bronca con la situación económica y social. Solo en la primera semana de clases, miles firmaron los petitorios que impulsamos en apoyo a la presentación de proyectos por el boleto educativo gratuito, por jardines materno-paternales en las facultades y por la ampliación de la oferta horaria con salario para los y las docentes (son más de 8000 en la UBA que trabajan sin cobrar).
Junto con nuestres compañeres Nicolás del Caño, Myriam Bregman, Alejandro Vilca y Alejandrina Barry, diputados y diputadas del FIT-U, recorrimos distintas facultades, con cientos de estudiantes que se acercaron a brindar apoyo, charlar, sacarse fotos, y muchos y muchas a conocernos ya que son ingresantes.
Existe una franja de miles de jóvenes que ven en el Frente de Izquierda Unidad una referencia política. También, estamos orgullosos y orgullosas de haber recibido el apoyo de las mujeres del Barrio Mugica (Villa 31) que pelean por vivienda, así como también de vecinos y vecinas de la Asamblea Permanente de Guernica, de las y los trabajadores de LATAM, Madygraf y de la Salud,. Ellos y ellas participaron de actividades en las facultades, recorriendo las aulas para contar sus peleas y explicar, a partir de sus historias, la importancia de la unidad con la juventud.
Esto se forjó en la experiencia común que venimos haciendo en espacios de coordinación, movilizaciones y jornadas de debate y culturales, porque venimos bancando sus luchas y poniendo nuestros conocimientos como futuros profesionales al servicio de las causas populares. Que en nuestras facultades se escuchen sus voces es una muestra de la unidad que queremos construir.
En ocho facultades (Filosofía y Letras, Sociales, Psicología, Medicina, Derecho, Económicas, la FADU y Exactas) impulsamos agrupaciones junto a compañeres que no son de nuestro partido, pero con quienes militamos a la par porque comparten el programa político del FITU y la independencia de las variantes de los empresarios y las autoridades. Fuimos junto a ellos la corriente que se puso al hombro la elección, tanto en fuerza militante como impulsando debates a contracorriente de lo que imponían los aparatos bancados política y financieramente por los partidos tradicionales. Es el inicio de la vuelta a la presencialidad y los desafíos son enormes.
Por su parte, la UJS-PO, decidió que su fuerza militante se concentrara en las facultades de Veterinarias y Farmacia y Bioquímica. Eso generó que en Psicología, Derecho, Económicas y la FADU, la pelea electoral quedara en exclusivas manos de las agrupaciones de la Juventud del PTS. En una proporción muy importante, también se dio esa situación en Filosofía y Letras y en Sociales.
El NMAS replicó su política nacional, rompiendo así los únicos tres frentes unitarios de la izquierda de los que formaba parte hasta 2019 (Filosofía y Letras, Psicología y FADU). Eso los llevó a un resultado marginal en casi todas las facultades, rondando entre el 1% y el 2 %, inclusive perdiendo contra el voto en blanco en facultades como Derecho o FADU. La única excepción fue Filosofía y Letras, donde concentran su militancia. Allí sacaron el 9 %, pero a cambio cosecharon entre el estudiantado de izquierda un amplio repudio por haber basado su campaña en hablar contra la izquierda mientras evitaban la mención al Gobierno y su política. Apostaron a "pelear el centro", lo que se mostró insólito a la luz de los resultados. Expresión de eso fueron las "caras largas" de su militancia durante el escrutinio.
Algunas reflexiones sobre la izquierda y cómo seguir
Desde la Juventud del PTS agradecemos a todos y todas las compañeras que nos acompañaron con su voto y también a quienes fueron parte activa de ampliar nuestras propuestas a sus amigues de cursada, repartiendo volantes, contando por qué votarnos y difundiendo en las redes los materiales de las listas de la izquierda.
También damos cuenta de retrocesos electorales en algunas facultades, los cuales creemos que hay que ver en la dinámica de la situación. En ese sentido, el hecho de que en facultades como Psicología y la FADU las boletas de Consejo y centro hayan ido unificadas, mostrando el avance de las gestiones radicales en la organización estudiantil, jugó a favor de las variantes oficialistas ligadas al Rectorado y a Juntos por el Cambio. El resultado fue una elección más masiva por el total de votantes y a la vez dificultando que de nuestra parte pudiéramos llegar a todes.
Para ejemplificar: en 2019, en Psicología habían votado a Centro 9.797 personas y La Izquierda al Frente había obtenido 1.269 votos. Este año, en total votaron 17.199 votantes y 1.285 de esos votos fueron para la izquierda. En la FADU habían votado en 2019 12.416 personas, de las cuales 752 habían elegido a la izquierda. Este año participaron 23.432 y nos siguieron acompañando 766. Es decir, se redujo el porcentaje total y se sostiene la cantidad de personas que se inclinan por una lista de independencia política.
Por otro lado, el retroceso como corriente política de la UJS-PO influyó, ya que no solo hubo menos fuerza militante para las peleas que dimos en todas las facultades desde el FIT-U sino también por la llegada de distintas propuestas en las que hacemos eje las diferentes agrupaciones que conformamos las listas unitarias de la izquierda.
Por nuestra parte, nos dimos el objetivo de impulsar la Red de Precarizadxs, Informales y Desocupadxs. Tenemos el orgullo de ser parte de construir una gran fuerza de miles de jóvenes que une la pelea de estudiantes y trabajadores. Eso lógicamente significó una menor militancia en el movimiento estudiantil, además de las dificultades para hacer política durante dos años de virtualidad, teniendo en frente a las agrupaciones radicales y peronistas que cuentan, como decíamos anteriormente, con los recursos de las gestiones (mails, canales institucionales y una batería de herramientas que generaron llegada al conjunto del estudiantado). En estas elecciones dimos una pelea común los y las estudiantes que nos organizamos en las agrupaciones universitarias y les compañeres que estudian y son parte de La Red.
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Estas primeras semanas de clases nos marcan que el camino que iniciamos hay que profundizarlo: presentaremos en los respectivos Consejos Directivos proyectos por Becas Integrales, Boleto Educativo, construcción de jardines materno-paternales, y por la ampliación de la oferta horaria, que fueron algunos de los debates que impulsamos esta primera semana de clases.
Apostamos a seguir desarrollando el intercambio en nuestros cursos por el conjunto de nuestros reclamos, poniendo en pie espacios de organización y debate en todas las facultades. Realizaremos charlas-debates junto a nuestres compañeres diputados, Myriam Bregman, Nicolás del Caño, Alejandro Vilca.
Se vienen las presentaciones de libros impulsados por Ediciones IPS-CEIP y las cátedras libres marxistas, para que no solo existan las variantes dolarizadoras de la economía sino también la que plantea la reducción de la jornada laboral a 6 horas y 5 días, con un salario que alcance como mínimo para pagar la canasta familiar, para generar 1 millón de puestos de trabajo nuevos tan solo en las grandes industrias y servicios. Queremos que la resignación de pagarle al Fondo una deuda ilegal y fraudulenta no sea lo que prime.
Impulsaremos talleres de periodismo de La Izquierda Diario, observatorios, relevamientos y proyectos en fábricas y el territorio como con las mujeres de la 31 y los obreros y obreras sin patrón de Madygraf ex Donnelley.
También propondremos actividades culturales y fiestas en las facultades, porque queremos volver a apropiarnos de nuestros lugares de estudio y que la cultura no sea para pocos. Hay que volver a convertir a las facultades en lugares de encuentro entre quienes accedemos a ellas y esa juventud precaria que abandonó o que directamente no puede acceder.
Todas las iniciativas y actividades que impulsemos, van en el sentido de pelear para que un sector de la juventud, esas y esos futuros profesionales e intelectuales, abracen una salida colectiva, poniendo los conocimientos al servicio de las mayorías trabajadoras, cuestionando la decadencia a la que nos lleva el Gobierno y que quieren profundizar la derecha macrista y liberal.
Por recuperar centros de estudiantes democráticos, participativos y críticos en la universidad, organizados desde los cursos, comisiones de base y asambleas, y que no estén atados de pies y manos a las variantes políticas que hace décadas gobiernan el país y la UBA.
Porque además de interpretar de diversos modos el mundo, se trata de transformarlo. Y para eso nos preparamos. ¡Sumate!
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