Como sabemos estamos a pocas horas del comienzo de las elecciones 2017 las cuales se han llevado gran parte del escenario político nacional. Como región no estamos exentos de este proceso y notamos la falta de una alternativa que cuestione los grandes problemas que genera el sistema económico mercantil en la ciudad frontera.
Domingo 19 de noviembre de 2017

La región de Arica y Parinacota es una de las más golpeadas a nivel nacional por el excesivo monopolio que existe en las zona central del país en torno a los recursos económicos, ubicada en los últimos puestos de las encuestas sobre nivel de pobreza y desempleo, donde la cifra de desocupados se ha mantenido constante así como la dificultad para encontrar puestos de trabajo, los cuales en su mayoría son precarizados, con subcontratación o directamente sin contrato efectivo.
Las viejas coaliciones como la Nueva mayoría y Chile Vamos han sido artífices directos de desmantelar la calidad de vida de las personas, así como el viejo historial de corrupción en la región dentro de los municipios y cargos públicos, que van desde el conocido caso de Sankán (ex PPD), hasta Orpis (UDI), siguiendo la lógica a nivel nacional donde son los políticos tradicionales, los que representan a los grandes empresarios nacionales y extranjeros quienes juegan con las condiciones de vida del pueblo trabajador de la región. Frente a esto, las llamadas “nuevas caras” como lo son el actual alcalde G. Espindola y Vlado Mirosevic, ambos militantes del Partido Liberal, parte del Frente Amplio, no han sido una alternativa concreta para superar las precariedades de la región, es más, se han puesto a la cabeza de traer inversiones como la construcción del Mall, la inversión de los Casinos y otros servicios que atraen consigo trabajos precarios ¿Qué son si no el sostén de todo lo que dejó la obra de los gobiernos y alcaldías anteriores?
*El mar y los valles: Nacionalización de los recursos naturales a manos de los trabajadores
El puerto de Arica, al igual que la gran parte de los puertos de las costas del país, es de carácter privado, perteneciente en gran porcentaje al empresario Von Appen. Siguiendo esta lógica de funcionamiento privada se proyecta para el 2018 una rebaja en todos los cargos dentro de empresas como Ultraport. Actualmente en nuestra ciudad contamos con dos grandes recursos naturales, como son los valles próximos a la ciudad y la productividad del mar. Sin embargo estos recursos se encuentran en su mayoría acaparados por grandes empresas nacionales y transnacionales.
Estos valles productivos podría ser un gran foco de desarrollo económico y agrícola para la región si se los potenciara. Para esto no se necesita la inversión empresarial que sigue la lógica del libre mercado que solo vela por sus intereses postergando la seguridad y bienestar de sus trabajadores ni tampoco el cuidado con el medio ambiente. Esto lo podemos ver en la región con un gran porcentaje de trabajo ilegal y precario en el valle de Azapa y una falta de regulación con el uso de pesticidas aplicados en las cosechas que alimentan a la población, siendo importante señalar que Arica lidera el uso de transgénicos a nivel nacional.
Un problema similar es el que se vive con los recursos naturales del mar, específicamente con las cuotas de pesca. Actualmente estas cuotas son muy dispares y favorecen únicamente a los empresarios. Así como en todo Chile son 7 familias que se llevan todas estas ganancias a costa de la precarización de miles de pescadores artesanales. Para una real salida a estas problemáticas creemos que es necesario nacionalizar estos recursos pasando a gestión de los trabajadores y la comunidad, generando un plan potenciador que aumente la eficiencia productiva y que también respete el medio ambiente.
Nadie es ilegal: Legalidad laboral a todo migrante y fin a la subcontratación
Como lo hacen los candidatos de Antofagasta, un anticapitalista en la región frontera debe tener como prioridad el ámbito de la migración, ya que somos la puerta de entrada de esas nuevas familias y personas que buscan oportunidades para su vida. Por lo tanto plantearíamos el derecho al reconocimiento legal sin deportaciones arbitrarias al lugar de procedencia, teniendo una política clara de migración, que busque penalizar a quienes se llenan los bolsillos a costa del trabajo ilegal, es decir, sin contrato de mano de obra migrante. Para esto, exigir el contrato efectivo con derecho a cotizar para la vejez y seguridad y salud pública. Esto lo tomamos no sólo como un eje en migración, si no de carácter transversal en la lucha contra el subcontrato y el trabajo en negro (ilegal).
Que estas elecciones reflejen el descontento:
Claro está que las principales fuerzas políticas presentes en la región, como lo son Chile vamos y la Nueva mayoría, quienes no han hecho otra cosa que perjudicar en el ámbito medio ambiental y social a la población, así como del papel de vestir de progresista el sistema económico por parte del Partido Liberal (FA) que sigue encubriendo una realidad de precariedad y de constantes ilusiones discursivas que no son más que eso, simples discursos, el descontento debe verse plasmado dentro de las urnas en torno a no depositar la confianza en estas coaliciones que poco y nada nuevo tienen que entregar al pueblo trabajador de la región, pero a tomar una posición activa dentro de estas elecciones demostrando con la anulación del voto que necesitamos una alternativa anticapitalista que se pare de frente contra los empresarios y sus políticos corruptos para ser los tribunos de los trabajadores, las mujeres y la juventud que día a día sufre los embates del capitalismo en una de las regiones más pobres de Chile.