Nacional. Referencias internacionales del Partido Republicano de José Antonio Kast

Se suele hablar de la excepcionalidad de Chile en términos políticos, en especial desde la derecha, y en general para cubrirse de las espaldas por las políticas que llevan adelante sus referentes alrededor del mundo.

El caso de Jair Bolsonaro

El caso más cercano de una derecha del tipo que hoy levanta Kast, en Latinoamérica, es la referenciada en Brasil con Jair Bolsonaro; un tipo de características muy similares a JaK, que de un momento a otro, de ser un diputado menor entre la política brasileña, se convirtió en presidente de un país con más de 200 millones de habitantes, y que cuenta con el 8° PIB del planeta.

Un personaje que quebró con su sector, al igual que JAK, y giró a la extrema derecha, que reivindica la dictadura militar de su país, que busca recortar las libertades democráticas, en especial a mujeres, trabajadores, inmigrantes, negros, pobres, pueblos indígenas, etc., Pero que al contrario, por ejemplo, de la extrema derecha de países potencias como Alemania o Francia, va con su discurso económico neoliberal a ultranza, distintos a los otros que vienen con políticas más proteccionistas. Esto será clave para caracterizar a Bolsonaro, y en general a la extrema derecha en países que no son potencias.

Las analogías son cercanas, de hecho, no es raro que la confianza de Kast para sus proyectos venga de la experiencia de Bolsonaro. Y aunque la región está llena de incluso cabezas de gobierno de derecha, como Chile, Argentina, Perú y Colombia, el caso de Bolsonaro es distinto a los demás, y Kast sabe que acá tiene una oportunidad.

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El caso europeo

Pero pasemos a Europa, donde el escenario está mucho más enrarecido. Actualmente casi todos los países de Europa occidental tienen un referente constituido de extrema derecha, que le disputa votos e influencia a la derecha más clásica, en algunos incluso son cabezas de gobierno, como en Polonia y Hungría o forman parte de él, como es el caso de Austria, Dinamarca y Letonia.

En el caso de sus respectivos congresos, la línea es parecida, la extrema derecha tiene presencia parlamentaria en 17 países de la Unión Europea.

Y la línea es la misma, anti-inmigracion, anti derechos de las mujeres, como por ejemplo en el caso del aborto legal, euroescépticos, como lo llama la nomenclatura, en especial de los países más grandes como Alemania y Francia, que ven en la Unión Europea una carga nacional que otra cosa, nacionalistas, conservadores, etc.

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Pero el escenario es móvil, por ejemplo, en las últimas elecciones del Estado Español, el referente de extrema derecha español Vox tuvo una importante baja de votos, pero que aun así mantiene cerca de 11 diputados, que sigue siendo no menor.

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EEUU

Y bueno, el vecino del norte, Donald Trump, un afuerino de la política que no se alcanzó a medir hasta que fue presidente de la potencia hegemónica del planeta. Un tipo ligado a los negocios y a la farándula estadounidense, que de la mano del Partido Republicano llegó a la Casa Blanca.

Con un discurso populista clásico de derecha, también anti-inmigrante, de seguridad nacional, algo en el que todos comulgan, tanto en América como en Europa, de proteccionismo económico, llevando a una guerra comercial con otra gran potencia, que hoy tiene en vilo al economía en el mundo, con búsqueda de recorte de derechos sociales, baja de impuestos a los más ricos, y así.

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Y que aunque no podríamos reafirmarlo dentro de la extrema derecha tan rápidamente, el referente es importante, y su importancia en el concierto de países es clave, ya lo vemos en su injerencia en Venezuela, y su salida golpista.

A modo de término

Y aunque esto es solo un esbozo del actual escenario de la extrema derecha de los principales países, y que desde ya deja fuera a muchos otros, la oportunidad que ve el sector de JAK, que hoy tensiona a toda la política nacional, y en especial a la "centro derecha", de donde espera sacar a sus próximos referentes, es algo que recién comienza, pero que ya podemos trazar sus líneas con sus referentes a nivel internacional, para guiarnos y no perdernos en el combate con la expresión más rancia de la derecha.