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Red Internacional
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MUNDO OBRERO. Relatos en primera persona: hablan las trabajadoras de Mendoza

Según los datos del INDEC el desempleo se ubica en un 10.4% con respecto al primer trimestre del 2019 y la tasa de empleo en las mujeres se reduce hasta un 33%. Ante esta situación la palabra de dos trabajadoras mendocinas.

Jueves 25 de junio de 2020 19:56

Esta semana se publicaron los datos de desempleo relevados por el INDEC. La cifra es impactante, la tasa de desocupación se ubicó en 10,4% respecto al primer trimestre del 2019 . En cuanto a la tasa de empleo se verifica que la mayor diferencia se encuentra en el grupo de mujeres de 14 a 29 años, entre quienes la tasa se reduce 33%

Estos datos, que fueron tomados al principio de la cuarentena, reflejan entre otras cosas, que las mujeres somos las primeras en pagar las crisis. DesdeLa Izquierda Diario creemos que a los números hay que ponerles voz y en primera persona.

A continuación el relato de dos trabajadoras mendocinas:

C Yo trabajo en el comercio desde los 20 años más o menos. Hoy tengo bastantes más de 30 y he pasado por una cantidad de locales que no sé si los podría enumerar. Ahora estoy en un local de ropa, hace bastante, en blanco, con aportes, con todo. Mi marido es empleado municipal y no cobra ni la mitad de lo que cuesta la canasta familiar. Tenemos tres chicos, dos adolescentes y uno en la primaria todavía.

La cuarentena y la pandemia nos está fundiendo. Por supuesto que lo primero que me pasó fue la reducción de mi sueldo, pero ahora me hicieron renunciar medio día al laburo porque no me lo pueden pagar ¿Qué quiere decir todo esto? que nuestros ingresos familiares se redujeron más de la mitad. A veces nos encontramos antes la situación de pagar la cuota de la casa o comer. Tampoco nos dieron la IFE, porque somos los dos trabajadores en blanco.

Yo salgo todos los días a laburar y me subo al micro o al tranvía, y me da un miedo, me da tanto miedo llevar el coronavirus a mi casa, ponernos en riesgo, pero no me queda otra. Pero no les importa, ni al gobierno, radicales o peronistas,de un lado y otro de la grieta, la verdad es que nunca les importamos. Me enoja tanto sentirme tan vulnerable. ¿Cuánto tiempo más vamos a poder resistir?

Esto que me pasa a mí le pasa a muchísima gente más, a mi hermana la despidieron sin indemnización, de patitas a la calle. Tiene un niño de casi 2 años. Y en la verdulería, en la carnicería, en todos lados te cruzas con alguna vecina que te cuenta que al marido lo echaron, en todos lados hay alguien que fue despedido. Por eso ¿cuánto tiempo más vamos a poder resistir?

M: Tengo 30 años, recién cumplidos, tengo un hermoso hijo de tres años. Soy maestra jardinera aunque trabajo en un almacén, porque las maestras jardineras somos muy mal pagas. Y con el laburo de medio día, obvio que en negro, ganó más que en un jardincito.

La pandemia me agarró muy mal parada, me estaba separando y me tocó volver a lo de mis viejos porque era imposible pagar el alquiler, los pañales, la leche, la comida, y todo eso que necesitas para criar un niño o lo que necesita cualquier ser humano para vivir.

Al papá de mi hijo no lo han despedido, esta cobrando 10.000 que de pedo alcanza para la leche del gordo y algunas cosas más. Lo que yo cobro en el almacén alcanza para la obra social y comida. No me acuerdo cuando fue la última vez que me pude tomar un cerveza sin hacer cuentas para que después no me falte nada.

Ahora conseguí un laburito limpiando la casa de una señora para poder juntar para un alquiler. Porque mis viejos son jubilados, mi vieja fue maestra toda la vida, imaginate lo que cobra y mi viejo empleado de comercio. Entre los dos juntan para comida, remedios, impuestos y no mucho más. Aparte no sólo por esto me quiero ir, sino porque al trabajar en la calle y en contacto con gente los puedo contagiar. Imaginate todos los protocolos de desinfección que hago, pero igual me de miedo.

Si me preguntas que me gustaría, me gustaría poder vivir de lo que estudié. Me gustaría poder tener una casa con patio para que el gordo pueda jugar, me gustaría poder tomarme una cerveza con amigos, me gustaría sentir que de alguna u otra forma hay futuro para nosotros.

Estos relatos son sólo ejemplos de cómo están viviendo los y las trabajadoras y se multiplican de a miles. También se multiplican los ejemplos de organización, el próximo sábado 27 de junio se convoca a unaAsamblea abierta de trabajadores y trabajadoras en Mendoza. La convocatoria es extensiva a ocupados/as, desocupados/ as, jóvenes precarios/as para debatir sobre la situación actual y cómo enfrentar, en el marco de la pandemia COVID-19, los ataques.