Andrés Manuel López Obrador informó que el año 2022 está dedicado al dirigente social Ricardo Flores Magón, a 100 años de su muerte, por lo que su imagen aparecerá en toda la papelería oficial de este año. ¿Qué tan de acuerdo estaría el anarquista con la 4T? Acá te contamos.
Martes 4 de enero de 2022
López Obrador, desde su conferencia mañanera, informó que la papelería oficial del 2022 de su gobierno estaría dedicada a Ricardo Flores Magón.
La relectura que hace el gobierno de AMLO del magonismo no dista mucho de las lecturas oficiales que se hicieron -y hacen- de esta importante corriente política: lo que fue un movimiento y un partido con influencia de masas por algunos años se reduce a una sola persona: Ricardo Flores Magón. Reducir una corriente política con “profundas raíces sociales en el proletariado se cataloga como una simple posición doctrinaria, los anarquistas” bajo el cobijo de la 4T, de un "anarquismo bueno".
Esta “recuperación” de la figura de Ricardo Flores Magón tiene un doble sentido. Primero, busca hacer creer a las masas y a los sectores críticos o de izquierda que las tareas y luchas defendidas por este revolucionario anarquista son reivindicadas y hechas efectivas por el gobierno que representa López Obrador. En segundo lugar, refuerza la figura presidencial, el liderazgo del presidente, la confianza de llevar las grandes tarea históricas en una sola persona. En la historia que la 4T recrea, las masas tienen un carácter pasivo, consultivo, pero que siempre se reduce a una persona o figura.
Pero, ¿qué tan cierto es que los intereses defendidos por Ricardo Flores Magón y el Partido Liberal Mexicano estén identificados con AMLO y la 4T?
Revisando la historia de México, los primeros 15 años de inicio del siglo XX, hallamos que el PLM es la única corriente que hace una formulación política, en clave no burguesa, para el ascenso revolucionario de inicios de siglo. Armando Bartra dirá: La Junta Organizadora del PLM [es] la única organización que, [está] seriamente vinculada al proletariado, esboza una plataforma política obrera y, durante algunos años, la instrumentará con relativo éxito.
Si partimos del punto de vista del instrumento político, el partido, notamos que Morena y el PLM están distanciados de la vinculación a la clase trabajadora. Por vinculación, hay que entender la influencia y capacidad de poder dirigir acciones obreras como huelgas o paros, o movilizaciones en solidaridad con otros sectores en lucha o resistencia. Posiblemente algunos militantes de Morena dirán que su partido tiene influencia en el movimiento obrero, y es cierto. No podemos omitir que Morena busca el apoyo de las bases obreras, pero no en clave magonista, sino para subordinar a su política de colaboración de clases, algo que los hermanos Magón y el PLM jamás hubieran hecho o pensado.
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Esta “recuperación” del magonismo va en sintonía con algunos elementos que Morena ha hecho propios, unos de ellos es el periódico Regeneración. El periódico del PLM desempeñó un papel importante en sus 18 años. Éste simboliza algo más que la síntesis de la experiencia liberal del siglo XIX, la prensa. Va más allá, se transforma en el órgano de la Junta Organizadora del PLM. El periódico cobra un nuevo carácter en manos de los revolucionarios anarquistas, no solo será un medio para difundir sus ideas o programas; será un educador, un agitador, un organizador colectivo. Regeneración fue al magonismo, de forma similar a como Gramsci veía la relación entre partido y periódico.
Muy distinto es el periódico que Morena edita bajo el homónimo de la prensa magonista. Una prensa que aplaude los actos del gobierno, con su capacidad crítica puesta al servicio de las políticas oficiales y que no aborda los problemas que aquejan a las amplias mayorías. Regeneración con los Magón era un periódico anticapitalista, con AMLO es un medio para agitar la política de capitalismo "democrático" y la colaboración de clases que defiende su programa.
Un elemento más a señalar es el carácter que tiene la transformación social para el magonismo. Para los magonistas, es el obrero como sujeto colectivo quien tiene que realizar cada una de las demandas de la plataforma liberal de 1906. Pese a sus limitaciones ideológicas y estratégicas (revolución en los márgenes de la democracia), tenían claro que la lucha es contra el capital y la subordinación imperialista y para ello el obrero debe de llegar “por su propio esfuerzo y su exclusiva aspiración”.
Hoy en día, su “habilitación” en el gobierno de López Obrador, una vez “exprimida” la investidura del anarquismo, no tiene otro fin más que un uso ornamental: la imagen oficial para la papelería 2022. Para los revolucionarios socialistas, recuperar la teoría y práctica del magonismo es importante, pues a decir de José Revueltas
las actividades revolucionarias de Flores Magón y de los magonistas son el punto de arranque donde hay que colocar los antecedentes contemporáneos de una conciencia socialista propia, nacional, de la clase obrera mexicana.
Se trata de sacar las lecciones políticas-estratégicas de quienes nos antecedieron en la lucha contra el capital y el imperialismo para avanzar hacia una sociedad sin clases, sin Estado, sin explotación u opresión. Esta es la recuperación que queremos hacer del magonismo.
La hipocresía de AMLO al reivindicar a un referente revolucionario bien sería combatida por los hermanos Magón, Librado Rivera y todos sus colaboradores, de la misma forma que combatirían la política de la Guardia Nacional obradorista.
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