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Red Internacional
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CORONAVIRUS EN LAS VILLAS. Ruidazo en la Villa 31 para visibilizar la situación ante el coronavirus

Este martes a las 19 horas se escucharon las cacerolas y los aplausos en la Villa 31 para que se haga pública la realidad que se está viviendo en el barrio, donde crecen los casos positivos con el virus Covid-19 y en el contexto de falta de agua potable y otros servicios públicos. Además piden testeos masivos, ya que solo se testearon 345 personas cuando el barrio supera los 40 mil habitantes.

Martes 12 de mayo de 2020 23:00

La situación en las villas y barrios populares va empeorando cada día, con más casos de contagiados por el Covid 19, y la desidia de los gobiernos que no ponen todos los recursos para mejorar la realidad de los sectores más empobrecidos. En la actualidad el 25 % de los infectados de la ciudad son de villas o asentamientos. Pese a esto recién la semana pasada se comenzó el operativo entre el Gobierno nacional y el Gobierno porteño denominado Detectar (Dispositivo Estratégico de Testeo para Coronavirus en Terreno de Argentina) para realizar testeos. El primer resultado dio que de las 345 personas que se testearon la mitad dieron positivo, dejando en evidencia la gravedad que se vive en el barrio

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El crecimiento en la vulnerabilidad hizo que los vecinos del barrio junto a organizaciones barriales convocaran para hoy un ruidazo, ya que expresan que la gravedad de la situación no está siendo visibilizada en los medios masivos y que los gobiernos los tienen olvidados. Por eso una de las convocatorias señalaba: “Porque tenemos más de 500 casos confirmados de Covid 19 en nuestro barrio y la situación es insostenible. Sin comida, techo, acceso a la salud y servicios básicos, no hay cuarentena posible”.

En el ruidazo de hoy se escucharon la siguientes exigencias: continuidad del Operativo Detectar de testeos masivos en el barrio; no al abandono y desidia en los hospitales; ambulancia en el barrio las 24 horas; asistencia y alimentos para familias en aislamiento preventivo por contactos estrechos; asistencia alimentaria y kits de bioseguridad y limpieza para los comedores y merenderos del barrio, aislamiento seguro (afuera del barrio) a los vecinos de contactos estrechos.

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A las condiciones habitacionales y la falta de servicios, se le suma la situación socio económica que están atravesando los vecinos del barrio que la mayoría depende de la economía informal que hoy se encuentra paralizada y por ende no están percibiendo ingresos. Por eso es fundamental que se tomen medidas que den respuesta inmediata a esta situación, así como políticas que den solución real a la vulnerabilidad habitacional que viven miles en la ciudad y en todo el país.