Derechos trans. Se cumplen 11 años de la sanción de La Ley de Identidad de Género

El 9 de mayo el Congreso sancionó la Ley N° 26.743, un proyecto impulsado por decenas de organizaciones nucleadas en el Frente Nacional por la Ley de Identidad de Género.

La medida estableció el derecho a la autopercepción de género desde un enfoque despatologizante, garantizando a las personas trans y travestis el cambio de nombre en todos los documentos oficiales sin la necesidad de someterse a un proceso judicial, ni pasar por una legión de psicólogos. Esto es uno de los aspectos que la transformó en una ley de vanguardia a nivel internacional, ya que en muchos países existe una legislación donde se debe presentar un diagnóstico psiquiátrico que continúa reproduciendo prejuicios e imponiendo todo tipo de obstáculos.

Así lo dice en su 2º artículo: “Se entiende por identidad de género a la vivencia interna e individual del género tal como cada persona la siente, la cual puede corresponder o no con el sexo asignado al momento del nacimiento, incluyendo la vivencia personal del cuerpo. Esto puede involucrar la modificación de la apariencia o la función corporal a través de medios farmacológicos, quirúrgicos o de otra índole, siempre que ello sea libremente escogido. También incluye otras expresiones de género, como la vestimenta, el modo de hablar y los modales”.

Esta conquista buscó ser un puntapié elemental contra la situación que aún hoy atraviesan las personas trans y travestis, entre la persecución estatal por parte de las fuerzas represivas y la discriminación estructural que impide el acceso al trabajo, la educación, la salud y la vivienda. Algo que se evidencia con el promedio de vida que ronda los 35 años y con que la gran mayoría ejerce la prostitucion para poder subsistir.

Los derechos estipulados en la ley hoy son atacados por sectores de la derecha que van desde Javier Milei hasta Larreta y Acuña en la CABA. Lo hacen bajo una campaña contra la “ideología de género”, donde la Educación Sexual Integral está entre sus principales enemigos. Se paran sobre las ideas que difunden las iglesias católica y evangélica sobre el binarismo biológico de género hombre-mujer y la heterosexualidad como norma.

La igualdad ante la ley no es la igualdad ante la vida

Hoy a 11 años de su sanción, en medio de una profunda crisis económica y política, podemos decir que la igualdad ante la ley no es la igualdad ante la vida. La realidad de las personas LGBTIQ+ se ve afectada, sumándole a la discriminación, una realidad donde llegar a fin de mes se vuelve mas complicado, los trabajos precarios de largas horas y salarios que no alcanzan, como tambien la dificultad para acceder a la salud, no solo por falta de presupuesto cientos se quedan sin atención, sino también por situaciones en donde no se respeto el trato digno.

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Hace algunas semanas la organización Hombres Trans Argentina denunció que hay un desabastecimiento del Undecanato de Testosterona Nebido y Testoviron. Esto se debe a que el medicamento ya no es producido por el laboratorio Bayer, ya que dichas patentes fueron vendidas al Grupo Grünenthal. Es noticia de todos los años que haya faltantes de hormonas, producto de la agudización cada vez más del ajuste en curso y de cómo las empresas privadas, en este caso Bayer y Undecanoato, especulan continuamente sus ganancias a costa de nuestra salud. Esto es el resultado del lobby que hay entre los laboratorios y el Estado, donde nosotres pagamos los costos, mientras vemos como los hospitales y salitas sanitarias no dan abasto por la consecuencia del recorte en la salud pública que nos afecta directamente.

En cuanto el acceso al trabajo, según datos actualizados en base al sexto monitoreo de Cupo Laboral Travesti, transexual y/o transgenero que se realizo en diciembre de 2022, se registraron 574 puestos ocupados. En 6 meses, desde el informe anterior a este, ingresaron solo 147 personas cuando al 27/02/2023 se postularon 7.318 en el Registro Único De Aspirantes Travestis, Transexuales y/o Transgenero - Diana Sacayán - Lohana Berkins.

Tehuel de la Torre es un claro ejemplo, joven trans que desapareció cuando fue a un trabajo informal que le había conseguido su vecino, el principal sospechoso. Tehuel era uno de los que peleaba por el cupo laboral y también por la vivienda digna; dos derechos elementales. La responsabilidad del ministro de Seguridad de la Provincia Sergio Berni y el Gobernador Axel Kicillof deja al descubierto que solamente con la organización y en las calles podemos seguir exigiendo justicia, y que se implemente como corresponde los derechos que conquistamos en las calles.

Así como la pelea por el Cupo Laboral Travesti-Trans, la Ley de Identidad de Género implicó un avance fundamental para un colectivo históricamente marginado y perseguido por el propio Estado, tras 11 años se pone en evidencia que los cambio en las legislaciones no garantizan en sí mismos el acceso a derechos básicos como la vivienda, la salud o la educación, y el cese de la discriminación. Por eso mismo, en el contexto donde un país condicionado por el Fondo Monetario Internacional, que está sufriendo un ajuste durante el gobierno del Frente de Todos, mientras Juntos por el cambio pide más ajuste y variantes extremas como Milei propone privatizar la educación, urge pelear para conquistar la igualdad ante la vida.

Enfrentar esta realidad conlleva una pelea que solo puede ser colectiva, las personas LGBTIQ+ que vivimos el ajuste nos tenemos que organizar junto al resto de la clase trabajadora y los sectores más pobres y oprimidos para golpear con el mismo puño.