Casación Penal ratificó ayer el fallo condenatorio del 2018 al ex comisario Ricardo Ferreyra, al ex comisario provincial Juan Calixto Perizzotti, a la entonces agente en funciones en el D-3 de la policía de Santa Fe María Eva Aebi y al ex comisario inspector Oscar Farina, en la megacausa de Rafaela por secuestro, tortura y homicidio durante la última dictadura militar.
Lautaro Pastorini @lautarillodetormes
Miércoles 30 de diciembre de 2020 12:05
(PH: lavoz.com.ar)
A Silvia Suppo la mataron dos veces. La primera vez cuando tenía 18 años, la secuestraron el 24 de mayo de 1977 y estuvo detenida desaparecida en la seccional 4° de Rafaela, donde ya estaba detenido su hermano Hugo Suppo, ambos militantes peronistas. Allí sufrió torturas, y violaciones por parte de sus captores. Producto de ello tuvo un embarazo y fue forzada a abortar.
Por estos crímenes de lesa humanidad en octubre de 2018 el Tribunal Oral Federal de Santa Fe condenó al ex comisario Ricardo Ferreyra, a el ex comisario provincial Juan Calixto Perizzotti, a la entonces agente en funciones en el D-3 de la policía de Santa Fe María Eva Aebi y el comisario inspector Oscar Farina a penas entre 8 y 16 años de prisión. No solo en perjuicio de Silvia, sino también de Rubén Luis Carignano, Hugo Rogelio Suppo, Jorge Alberto Destéfani, Graciela María Rabellino y Ricardo Alberto Díaz, también ex detenidos que pasaron por “La Casita”.
Ayer la Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal ratificó el fallo del tribunal santafecino. "Tanto las violaciones como su posterior aborto forzado producto del delito previo que sufrió Silvia Suppo en cautiverio fueron crímenes de derecho penal internacional de lesa humanidad dentro del accionar generalizado y sistemático contra la población civil y por lo tanto imprescriptibles” destacó la resolución del juzgado.
La segunda vez que la mataron a Silvia fue el 29 de marzo de 2010. Luego de que su testimonio fuera fundamental para la condena al ex juez Victor Brussa en 2009, pero previo a que pudiera declarar en la mega causa de Rafaela, fue encontrada asesinada en su pequeño comercio. Desde el primer momento, sus familiares y los organismos de derechos humanos denunciaron que se trataba de un crimen político. Pero la gestión del entonces gobernador Binner, y el entonces intendente Omar Perotti se apresuraron para definir que se trataba de un robo, en un comercio donde no faltaba ningún objeto de valor.
Solo hubo dos condenas: Rodolfo Valentino Cáceres y Rodrigo Ismael Sosa, acusados de haber llevado adelante el crimen. La policía, que se encargó de eliminar pruebas y entorpecer la investigación, y los instigadores del crimen político, nunca fueron indagados.
Ocho años después, el Tribunal Oral Federal de Santa Fe dio a conocer la sentencia a los militares acusados en la mega causa de Rafaela, ya sin la presencia de Silvia, 18 años después de haberse iniciado la causa y tras el fallecimiento de cinco de los nueve imputados.