Se cerró un vergonzoso acuerdo entre AMSAFE y el gobierno socialista en el marco de un tremendo ajuste. La traición de La Celeste y La crisis de AMSAFE Rosario como alternativa abren la necesidad de pensar estrategias para la docencia y el conjunto del movimiento obrero.
Viernes 11 de marzo de 2016
La paritaria docente de este año en la provincia de Santa Fe ha mostrado a los actores con los cuales el conjunto de trabajadores y trabajadoras nos encontramos a la hora de salir a pelear. Por un lado los gobiernos tanto nacional como provincial que cierran filas para ofrecer un aumento nominal que no es más que un terrible ajuste real, por otro lado tenemos el rol de la dirigencia kirchnerista de Amsafe Provincial –Movimiento Evita, PC, etc- y sus aliados en Rosario, como GIROS, que cerró la paritaria ni bien pudo. Finalmente, queda el rol de la Comisión Directiva de Rosario, que con retórica más combativa no lleva las peleas hasta el final, generando acciones rituales distantes de la discusión de bases que conducen a desmovilizar. La idea de esta nota es observar a cada uno de ellos en el marco de la negociación paritaria para sacar conclusiones para futuras luchas.
Los gobiernos y sus acuerdos
Cuando empezó la paritaria en nuestra provincia, el gobierno provincial del Partido Socialista solo tenía un objetivo, dilatar la negociación a la espera de lo que resulte a nivel nacional. Ante el primer anuncio de acuerdo entre Bullrich y CTERA, el gobierno provincial hizo una oferta de aumento de 30,1%, que incluía sumas en negro que se acordarían en el acta de la paritaria nacional. Hay que aclarar, que ni bien el gobierno provincial realizó la oferta, empezaron las idas y vueltas en la paritaria nacional, lo que hizo que la oferta del PS perdiera total seriedad, ya que una parte significativa del aumento estaba atada a la paritaria nacional. En ese marco de confusión, esa oferta llegó a la docencia y el rechazo no se hizo esperar.
A medida que la paritaria nacional que se anunciaba en 40% fue mostrando su verdadera cara: un 32%, el gobierno del PS se encontró en mejores condiciones para hacer una oferta, ofreciendo, paro de por medio, el 35% de la última oferta, del cual solo el 27% son fondos provinciales, el resto son fondos nacionales y en negro. Una vez realizada dicha oferta empezó la continuidad de cuartos intermedios que demostró claramente que la negociación paritaria se hacía en cuatro paredes muy alejada de la realidad de las bases.
Hasta aquí solo hemos hablado de las idas y vueltas de las reuniones, pero para comprender el estado de la cuestión, hace falta poner a estos hechos en el marco del plan económico que los gobiernos vienen impulsando. Tanto en provincia como en nación el conjunto del pueblo trabajador esta sufriendo terribles ataques, con despidos a la cabeza, que en nuestro sector hemos visto en el caso del fin de las tutorías académicas y CAJ entre otros; pero que también incluyen despidos de estatales y en el sector privado, siendo Arzinc y Bambi los casos más significativos de nuestra región, pero que son la punta de un iceberg de otros tantos casos. A la par de ello, se ha dado una devaluación del peso de cerca del 70% que ha acelerado la inflación que ya era alta, a lo que se ha sumado un tarifazo en impuestos, electricidad, gas y agua. Todo un conjunto de medidas que tienen impacto negativo para el salario, donde el aumento conseguido no permite cubrir ni la mitad de la perdida del salario real en el último año. A lo que se sumo el protocolo antipiquetes que es la herramienta política de estos gobiernos para reprimir cualquier intento de lucha.
La burocracia K: entre una resistencia de mentira y la traición
Al acuerdo del PS y el PRO se le sumo un tercer actor necesario: el kirchnerismo. A pesar de la retórica de la resistencia que pregonan en los medios de comunicación y en sus plazas, la dirigencia kirchnerista ha dado sobradas muestras de garantizar “gobernabilidad”, que no es más que una forma elegante de garantizar el ajuste. En las provincias donde gobiernan han dado muestras de obediencia para la aplicación de la represión a la protesta: estatales internados por golpes en Santa Cruz y terrible represión y persecución a la docencia en Santiago del Estero. En el congreso algunas de sus alas se suman a cerrar el acuerdo con los buitres, como antes el gobierno K había cerrado con el Club de París y Repsol.
En lo que hace al movimiento obrero, el rol de la dirigencia ha sido vergonzoso, la SMATA aceptó un aumento del ¡19%!, la conducción Celeste en CTERA cerró la paritaria nacional con un 32% promedio, con la firma de Baradel aceptó una oferta de hambre en provincia de Buenos Aires a pesar de la oposición de la mayoría de la docencia que se expresa en las acciones de lucha que se vienen llevando a cabo en las seccionales más grandes donde dirige la oposición, y en nuestra provincia Sonia Alesso, junto a todo su arco de aliados, levanto un paro votado por el 90% de la docencia, para aceptar una oferta donde un cuarto del aumento es en negro y que no hace más que alejar a la docencia de la posibilidad de acceder a un salario igual a la canasta familiar, mientras sus militantes decían en asambleas “que aceptar era una forma inteligente de resistir”.
Pero no solo de la paritaria vive la traición, en AMSAFE hemos visto sobradas muestras de lo que es “la resistencia con aguante”. En el marco del paro nacional de ATE del 24 de febrero, al cual la CTERA nunca llamó, el cuerpo de delegados y delegadas de AMSAFE Rosario resolvió desobligar a la docencia a partir de las 10 de la mañana para acompañar la marcha, ante esa acción, mientras la dirigencia Celeste presente el plenario reivindicaba la pelea, por abajo sembraba confusión y miedo hablando de la posibilidad de descuentos. Pero la traición no quedo allí, sino que en el marco de la marcha del 24, dividió la marcha confundiendo a la docencia y estatales dividiendo la lucha… un acto vil que evidenciaba no solo la ausencia de voluntad de pelear, sino que también era la antesala de la entrega que ocurriría dos semanas después.
AMSAFE Rosario y su crisis como alternativa
Mientras la burocracia iba aceitando los mecanismos para la entrega, mientas los gobiernos daban sobradas muestras de cómo iba a ser el ataque a la docencia, la Comisión Directiva de Rosario dejo pasar una nueva oportunidad de convertirse en una referencia combativa para el conjunto de los trabajadores y trabajadoras. En el primer plenario convocado por AMSAFE Rosario muchos compañeros y compañeras docentes expresaban su voluntad de enfrentar el ataque de los gobiernos, por eso desde nuestra agrupación planteamos la necesidad de sumarnos al paro del 24 de estatales, a lo que con maniobras burocráticas la Comisión Directiva se negó a votar y termino solo realizando una desobligación para ese día. Esta pasividad para el combate tuvo su mayor expresión en la marcha del 22 de febrero, donde en el marco del ataque al derecho de protesta que implicaba el protocolo antipiquetes, la convocatoria término con un acto en plaza San Martín, ¡sin cortar la calle!
El camino que condujo a la aceptación de la propuesta del gobierno provincial no termino allí, en el marco del paro votado para las dos primeras semanas, la única acción que se impulso desde AMSAFE Rosario fue una marcha departamental… nada de piquetes para frenar el protocolo, nada de asambleas por escuelas para que la mayor cantidad de docentes puedan tomar en sus manos la lucha, nada de impulsar la coordinación con otros sectores en lucha, nada de nada. La conclusión fue que en el segundo día del paro solo hubo ¡una asamblea informativa! Que debía haberse realizado el viernes previo, o sea, se invitó al activismo a discutir que hacer en el último día de la acción, cuando ya la burocracia Celeste había dado muestras de la traición que venía al no poner fecha al paro resuelto para la segunda semana.
Apuntes para resistir
Los ataques de los gobiernos, las traiciones de la conducción de la AMSAFE Provincial y la incapacidad de ser alternativa de la conducción de AMSAFE Rosario, son las razones por las cuales el enorme descontento docente no logro expresarse hasta el final, produciendo una derrota. Pero el escenario no es apocalíptico, lo que hace falta es repensar el modo a partir del cual organizamos las futuras luchas, para ello necesitamos que AMSAFE Rosario rompa el inmovilismo y convoque a asambleas por escuela y zonales, donde la docencia pueda tomar en sus manos la política, tenemos que llevar la discusión a las bases para multiplicar la fuerza en la calle e imponer a la burocracia la necesidad de un plan de lucha que haga que el ajuste no lo paguen los trabajadores y trabajadoras.
A ello debe sumarse la necesidad de impulsar coordinación con otros sectores de trabajadores y trabajadoras: unir la fuerza del conjunto para coordinar las luchas. Tenemos que aprovechar la posibilidad que tenemos en la docencia de hacer política sin sufrir las terribles represiones que se sufren en otros sectores, por ello AMSAFE Rosario debe impulsar un encuentro obrero de los sectores en lucha para fortalecernos entre todos y todas, convocando también a docentes de otros departamentos para extender la lucha más allá de los límites de Rosario.
Estas acciones, que fortalecerían al conjunto de los reclamos no pueden pensarse por fuera del terrible ataque del gobierno, por ello, tenemos que pensar en poner en pie una verdadera resistencia al macrismo, resistencia que no se predica, sino que se construye en la calle, como hicimos desde el PTS durante el paro del 24 de febrero cuando con cortes de calle enfrentamos al protocolo represivo de Macri. Es necesario que el conjunto de trabajadores y trabajadoras demos un salto político y comprendamos que la lucha por el salario es una lucha política, y que mientras los gobiernos y la burocracia se unen, de nuestra parte debemos impulsar agrupamientos democráticos, clasistas y que expresen una verdadera resistencia