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Red Internacional
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PARIS REPRESIÓN. Testimonio en directo: represión y detenciones a cielo abierto en París

Esta tarde varios miles de personas estuvimos en la Plaza de la República, a pesar de la prohibición, para denunciar la mascarada de la COP21 y el estado policial. Después de la cadena humana, todos nos reunimos en la plaza.

Domingo 29 de noviembre de 2015

Foto: Twitter @SRodrigoruiz

Con centenares de camaradas del NPA y Ensemble, llegamos por Oberkampf detrás de nuestra bandera “Su guerra, nuestros muertos. Abajo el estado de emergencia” y por el clima.

Al inicio, los policías trataron de impedir que pasáramos, pero finalmente hemos podido colarnos por la acera. Una vez en la plaza, decidimos continuar la protesta por todas partes, y la gente se iba sumando detrás de nosotros, sólo para mostrar que no nos rendimos ante las intimidaciones.

En un determinado momento, la policía antidisturbios comenzó a cargar contra nosotros y a gasearnos, pero no retrocedimos. Nos rodearon poco a poco, eran extremadamente numerosos, con camiones, helicópteros y gases lacrimógenos en granadas y en aerosol. Pero no nos dejaron ir.

Todas las calles adyacentes estaban bloqueadas, y poco a poco nos rodearon a la entrada de la rue du Faubourg du Temple, con cordones de escudos y camiones. Todavía estamos aquí, después de casi 3 horas.

Inicialmente éramos 150, incluidos los portavoces de la NPA Olivier Besancenot y Christine Poupin, y camaradas de Ensemble y Alternative Libertaire. Se trata claramente de una detención a cielo abierto.

Después de treinta minutos, comenzaron a empujarnos y arrancar uno a uno a nuestros camaradas. Vi a una mujer a la que tiraron brutalmente de su bufanda estrangulándola hasta que ella cayó al suelo. A un compañero de sesenta años le rompieron sus gafas. Otro fue arrastrado por el suelo.

Después de esto se detuvieron y quedamos unos 80 de nosotros, y las últimas dos horas hemos estado aquí frente a frente, atrapados en su trampa.

Seguramente nos querrán llevar a todos, pero primero nos quieren intimidar un poco. Por lo tanto estamos a la espera que sea nuestro turno. Ellos acaban de traer dos caminones adicionales.