El sábado 10 de enero la comunidad artística se manifestó de nuevo en la Cineteca Nacional en solidaridad con Ayotzinapa. Encabezada por estudiantes de cine, la primera jornada político cultural del año -denominada “Toma 2”-, fue todo un éxito.
Miércoles 14 de enero de 2015
México D.F. - 12 de enero. Música, teatro, intervención y proyecciones fueron algunas de las disciplinas con que la comunidad artística saludó combativamente a los padres y compañeros de los 43 normalistas desaparecidos por el Estado mexicano. A su vez, se colocaron mesas de acopio donde se recibió ropa, alimentos y dinero para los padres que siguen buscando a sus hijos desaparecidos.
Cabe resaltar que esta es la segunda toma simbólica que se realiza en la Cineteca Nacional. La primera comenzó en noviembre pasado y durante 43 días, se hicieron proyecciones alusivas al caso de los normalistas.
Para el Frente Único de Músicos Anticapitalistas y Revolucionarios, grupo musical que amenizó parte de la jornada, “es el Estado el responsable directo de los feminicidios, el asesinato a periodistas y luchadores sociales y por supuesto de la desaparición de los estudiantes normalistas”.
Fue durante la participación de esta agrupación que Clemente Rodríguez, padre de uno de los 43 desaparecidos, dirigió unas palabras a los asistentes. “Sin ustedes este movimiento se viene abajo”, dijo. Asimismo saludó y agradeció la asistencia y los donativos realizados, e informó que junto a los otros padres iniciarán la búsqueda de sus hijos por el Estado de Guerrero. Dicha búsqueda contará con la participación de la policía comunitaria y la ciudadanía.
Por su parte, José Solano, estudiante de la normal de Ayotzinapa, señaló que, a más de tres meses de los hechos de Iguala, “al Gobierno le importa más frenar las movilizaciones”, que se suceden una tras otra, “que encontrar a sus compañeros desaparecidos”. Para finalizar comentó “tal vez les está hablando un estudiante muerto, pero la revolución será en las calles, no por la redes sociales. No nos da miedo que nos desaparezcan”.
Con esta nueva jornada la comunidad artística da un mensaje claro: “Ayotzinapa somos todos”, pero también hace notar que más que ir en reflujo el movimiento se mantiene. Avanza.
