Durante el día de hoy se volvió a expresar la medida de lucha de los estudiantes de la escuela de Santa Clara. Fueron acompañados por docentes y familias. Se creó un acta de compromiso con el intendente para que se solucionen sus reclamos.
Viernes 10 de junio de 2022 17:45
En el marco de reclamos estudiantiles que se contagiaron por el mal estado de las escuelas, los estudiantes del Bachillerato N 10 del Municipio de Santa Clara volvieron a tomar el colegio como medida de lucha frente a la indiferencia a sus demandas que ya se vienen expresando desde el 25 de abril. Desde muy temprano, los estudiantes cansados al no ser escuchados por las autoridades educativas, deciden tomar la escuela procediendo a poner un candado en la puerta.
Desde hace meses que reclaman por el mal estado de los baños, la falta de higiene y desmalezamiento que les impide tener un campo de deportes adecuado, una precaria instalación eléctrica y desayunos y meriendas en mal estado. Además, exigen al Ministerio que se cubran los espacios curriculares que aún están vacantes por lo que no tienen profesores casi una mitad de año y el desdoblamiento de cursos ya que hay divisiones con casi 60 estudiantes. Lo que se relaciona con lo que necesita aulas y mobiliario. Están siendo apoyados y acompañados en su protesta por docentes, directivos, familias y personal de la escuela.
Dialogamos con Dana y Ariana, delegadas de quinto año, quienes señalaron que "queremos dejar una huella para que se mejore la escuela", mientras describían los múltiples problemas que atravesaron. Relataron que "empezamos con sentadas a organizarnos y fue creciendo la participación y el apoyo de los estudiantes y las familias. No tenemos miedo". La contundente acción provocando que el intendente tenga que presentarse en la escuela para dar respuestas. Las estudiantes señalaron que "solo se levanta la medida si se firma un acta compromiso para solucionar lo que reclamamos".
De esta manera, luego de una reunión entre el ejecutivo municipal, delegados/as, docentes y directivos, se seleccionaron un acta por la que el intendente se compromete a solucionar los problemas más urgentes y gestionar con el Ministerio de Educación provincial la solución del resto de las problemáticas. Frente al legítimo derecho de protesta de los estudiantes también se presentaron efectivos de la Policía provincial. Estudiantes señalaron a este medio que les parecía mal que "nos manden a la Policía cuando estamos reclamando algo justo".
Beneficios para los poderosos, indiferencia para los estudiantes.
Los estudiantes de distintos niveles vienen a la cabeza de diversos reclamos que muestran la verdadera cara de la educación pública en la provincia. Alumnos terciarios en toda la provincia se vienen movilizando por la designación de profesores. También los secundarios como los del Bachillerato 10, Escuela Técnica 1, Normal y Comercial de San Pedro salen a las calles por problemas de infraestructura, desayunos y meriendas en buen estado. Porque con hambre y frío no se puede estudiar. Estudiantes de Santa Clara comentan que "el gobierno inaugura escuelas pero no arregla las que ya existen".
Desde el Ministerio de Educación y el Gobierno provincial prima la indiferencia frente a los pedidos y reclamos que surgen desde las escuelas. La vicedirectora del Bachillerato 10 dijo que "antes que vicedirectora soy docente. Estoy orgullosa de la lucha de los estudiantes. Como directivos hemos realizado todos los pedidos siguiendo la vía jerárquica. Pero las soluciones no llegan".
Contrastando con esta indiferencia hacia la educación pública, el Gobierno provincial viene dando beneficios impositivos millonarios a importantes empresas de la provincia, como por ejemplo a los dueños del Ingenio La Esperanza. Hace solo unas semanas desde el ejecutivo provincial se lo eximió de pagar ingresos brutos y otros impuestos. Esto supone solo en ingresos brutos un regalo anual de $184 millones para los empresarios. ¿Cuántas meriendas nutritivas podrían costearse con ese dinero? ¿Cuántas becas o aulas para los que más lo necesitan?
Hoy, mientras la comunidad educativa de Santa Clara reclamaba derechos básicos, el gobernador decretó la emergencia agraria por sequía, lo que se traduce en grandes beneficios tributarios y exenciones para los que más tienen: los empresarios azucareros y tabacaleros. Las luchas que vienen mostrando los jóvenes secundarios, organizados desde sus delegados por cursos, junto a los docentes y familias que se solidarizan es un ejemplo a seguir para luchar por los derechos del pueblo trabajador.
Para tener más fuerza y que no quede cada escuela aislada, es necesaria la coordinación y unidad de estudiantes y docentes de las escuelas que vienen reclamando. Hay que rodear de apoyo y solidaridad la defensa de la educación pública. Los sindicatos como el CEDEMS apoyarán estos reclamos en vez de dividir a su Comisión Directiva en una interna a espaldas de la comunidad educativa. Tienen la responsabilidad de llevar a cabo estos reclamos ante el Ministerio de Educación para que se les dé una solución urgente.