Un trabajador aeronáutico y una invitación muy especial para su madre.
Viernes 4 de noviembre de 2016 16:14
Foto: Enfoque Rojo
“Ma, yo pienso que tenés que venir a Atlanta. No por mí sino por el momento histórico que estamos viviendo, que es difícil para vos, tus hijos y nietos. Mi despertar de conciencia en la vida me llevó a pensar en política gracias al partido en que milito, el PTS, que me dio conciencia de clase trabajadora, que de este lugar tengo la oportunidad de construir un gran partido político que luche contra la opresión al pueblo oprimido. Contra el machismo, contra la violencia hacia la mujer y contra todos los prejuicios que nos meten en la cabeza. Siempre luché contra todo, y sigo; contra la Iglesia -hasta me echaban de catecismo por que no les creía-; contra la desigualdad que nos daban los nonos: a mis hermanas por ser yo el varón, porque A. era la más blanca… qué zarpados, te decían negra de mierda. Todavía me acuerdo cuando la agarraste del cuello. Contra mi papá... fue la lucha más difícil de mi vida hasta ahora. Sentimientos encontrados. Batallas de años. Nos humilló a todos, a vos más. Lo desterré de mi vida. Lloro mientras escribo esto y mis compañeros de laburo me preguntan qué me pasa. “Nada”, digo. Nada. Tanto luchamos contra todo eso, que entendí discutiendo con compañeros del partido que todo es político, y que los momentos históricos marcan la conciencia y sensibilidad de las personas. Yo creo que solo hay una fuerza que levanta los intereses de los trabajadores como yo, vos, mis hermanas… el futuro será mejor para tu nieta y todos los hijos del mundo, pero esa fuerza hay que construirla, cada uno desde su lugar. Nosotros tus hijos podríamos haber sido policías, no sé, caer en cualquier adicción... pero no, fuimos trabajadores y todo gracias a vos, que sola nos educaste con el amor más fuerte de una mujer que luchó contra un sistema que convierte a las personas en seres horribles. Y vos sola construiste. Tres hijos, tres vidas, tres oportunidades de cambiar este sistema. Por tu nieta, por todas las mujeres del mundo, por los explotados. Por una alternativa de los trabajadores. Por eso quiero que vengas a Atlanta. Te quiero ma”.
