Luego de años de organización y diversas medidas de lucha, un sector de trabajadoras y trabajadores precarizados logró su reincorporación y pase a planta en la Municipalidad de Rosario. Continúan con el reclamo de cientos de sus compañeros y compañeras que quieren volver a trabajar.
Jueves 23 de abril de 2020 20:01
Trabajadores en Lucha de la Dirección de Juventudes
Un grupo de 15 trabajadores y trabajadoras municipales de la Dirección de Juventudes y de Economía Social anuncian hoy que salió el decreto que indica su pase a planta luego de varios años de lucha y organización desde las bases reclamando el fin de los contratos basura sostenidos por el municipio rosarino.
Desde la cuenta de Trabajadorxs en Lucha de la Dirección de Juventudes publican: “(…) ante un contexto de pandemia mundial tan triste y complejo que nos azota día a día, en donde se incrementa el avasallamiento y la flexibilización de las condiciones laborales, tenemos la inmensa alegría de contarles (…) hemos conseguido - fruto de la organización y la lucha - nuestro debido pase a planta en la Municipalidad de Rosario, y ya nos encontramos cumpliendo tareas esenciales en la primera línea de la emergencia sanitaria.”
Estos trabajadores y trabajadoras, que son sólo una porción de los cientos (probablemente miles) de contratados que sostiene la municipalidad desde hace décadas, festejan su triunfo luego de años de tener una situación de contratación precaria, cobrando un salario tan sólo 9 de 12 meses al año, teniendo obra social durante 6 meses, trabajando muchísimas veces en condiciones edilicias pésimas, con pagos retrasados, la imposibilidad de tomar licencia o tener vacaciones pagas, mientras los gobiernos municipales hacían alharaca de las políticas públicas que estos laburantes garantizaban todos los días desde sus puestos de trabajo.
La repetición año tras año de estas circunstancias (para quienes tuvieron la ”suerte” de ser precarizados reiteradamente) fue lo que empujó a organizarse en asambleas por lugar de trabajo, coordinarse entre diferentes sectores de la municipalidad y, en ocasiones, junto a trabajadores y trabajadoras en lucha de la provincia.
Cuentan “un día decidimos romper el silencio, manifestarnos públicamente y expresarnos en la calle, con festivales artísticos y ollas populares, visibilizándonos en redes sociales, notificando a los medios de comunicación, viviendo como acontecimiento inolvidable e histórico la asamblea con permanencia en el Palacio de Los Leones, con el fin de ser escuchados.”
Te puede interesar: “Rosario=Cultura"… de la precarización juvenil
Te puede interesar: “Rosario=Cultura"… de la precarización juvenil
A contracorriente de las divisiones que buscan imponer los gobiernos y las direcciones de los sindicatos, buscaron la unidad de las y los trabajadores de todos los sectores con quienes pudieron contactarse para darle cuerpo y fuerza a sus justos reclamos. No bajan la bandera de la unidad de los trabajadores cuando dicen, entre las palabras de alegría: “Somos 15 los y las que hoy la podemos contar, pero faltan aún cientos más, muchos de los cuales siguen despedidos y en lucha por su reincorporación y pase a planta, tal como fue nuestro caso hasta hoy.
Particularmente queremos hacer mención a nuestros compañeros y compañeras que faltan ser regularizados: compas del Tríptico de la Infancia de la Secretaría de Cultura y Educación, de la Dirección de Cementerios y Educación ambiental de la Secretaría de Ambiente y Espacio público, del SPVyH de la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat, y de la Secretaría de Salud del municipio, junto con quienes nos nucleamos en ATE Rosario”
A fines del 2019, la saliente gestión de Fein se pasaban la pelota con la gestión del actual intendente Pablo Javkin y dejaron a cientos de municipales en la calle. Este último, ya había contratado a principio de año nuevo personal -con la misma modalidad de precarización del PS- para trabajar en el Tríptico de la Infancia, iniciando una nueva camada de trabajos precarios mientras las anteriores se quedaban sin trabajo.
En tiempos donde los despidos, suspensiones y reducciones salariales se hacen cada vez más recurrentes mostrando que los DNU que los prohíben son papel mojado, esta noticia es una bocanada de aire fresco, un aliento para los trabajadores en lucha por mejores condiciones de trabajo y de vida, mostrando que en unidad, desde las bases, se puede. A lo largo y ancho del país aparecen nuevas voces de trabajadoras y trabajadores precarizados que ven que tienen una oportunidad si se organizan. Buscan ponerles un freno a los ataques de los empresarios, y como en este caso, del Estado que también precariza, en todos sus niveles, en cada oportunidad
Desde este diario hemos acompañado el proceso de lucha de estos trabajadores y adherimos al reclamo por todos los puestos de trabajo que faltan recuperar, así como de condiciones para los trabajadores que en la situación de pandemia están sufriendo las consecuencias de la desidia estatal.
Podes contarnos tu experiencia o sumar tu denuncia al 3415321070