Con la participación de numerosos docentes y estudiantes, se llevó a cabo un encuentro cuya temática fue el lugar de la ciencia y la técnica en la Argentina de hoy, de ayer y la perspectiva de la misma dentro de un escenario política y económicamente convulsionado.
Viernes 9 de noviembre de 2018 14:50
Alrededor de las 19 horas, en la sede de Medrano y luego de la apertura a cargo de los docentes de SIDUT comenzó la exposición por parte del panel compuesto por: la Dra. Paula Varela (Lic. en Ciencias Políticas e investigadora del Conicet, especialista en estudios del trabajo y conflicto social), la Ing. Bárbara Bisignano (ingeniera textil, egresada de la UTN FRBA, premiada por la Academia Nacional de Ingeniería y ex trabajadora del INTI), el Ing. Leonardo Ferrante (ingeniero naval, docente de la UTN y UBA, y jefe de estructuras del Astillero Río Santiago), el Dr. Diego Hurtado (Dr. en física de la UBA y director del Centro de Estudios de Historia de la Ciencia y la Técnica de la UNSAM) y el Ing. Enrique Martínez (Coordinador del Instituto para la Producción Popular, ex decano de la Facultad de Ingeniería de la UBA y ex director del INTI).
Las exposiciones giraron en torno a la situación crítica que atraviesa el sector dedicado a la investigación y al desarrollo científico. Son conocidos los ataques que sufrieron el INTI a principios de este año con 258 despidos, la militarización del instituto y la represión, en varias ocasiones, a los trabajadores. Otra de las instituciones afectadas fue el Conicet, donde también el Gobierno en 2016 dejó alrededor de 500 investigadores en la calle. La vulnerabilidad producto de la precarización laboral, piedra angular entre el gobierno kirchnerista y el actual, de centenares de trabajadores ya sea bajo el régimen de monotributo o como becarios, fue fundamental para que se lleven a cabo estos ataques.
Dentro del sector industrial estatal, el reconocido Astillero Río Santiago, que resistió en el año 1993 a las privatizaciones menemistas, hoy en día se encuentra amenazado por un plan de vaciamiento y paralización de la producción de María Eugenia Vidal y Cambiemos donde existen documentos que sacan a la luz como la gobernación de la provincia desestimó pedidos de trabajo por U$s 330 millones en los últimos meses.
Paula Varela destacó la necesidad de unir al sector científico-tecnológico, como tarea fundamental, con el resto de los sectores estatales en pugna como por ejemplo las trabajadoras y trabajadores del Hospital Posadas, del Ministerio de Economía, del Ministerio de Agroindustria o con los docentes universitarios que fueron protagonistas junto a los estudiantes de una gran marcha universitaria durante el mes de septiembre.
Como es imposible pensar el presente y proyectar el futuro sin pensar el pasado, una cuestión central, durante el intercambio, fue la crítica a los beneficiarios de los desarrollos en ciencia y tecnología en los últimos 15 años. Se puede ver en repetidas ocasiones cómo la innovación tecnológica ofició de sustento al sector privado de la industria, como asi también a los tan nocivos y cuestionados fracking y la producción de agrotóxicos, entre otros.
En contraposición, hay ejemplos, en los que gracias la unidad de obreros y universidades, como por ejemplo los trabajadores de Zanón con la Universidad del Comahue o los trabajadores de Madygraf y los estudiantes de la misma UTN, mostraron como el conocimiento que brinda la academia puede poner a producir y solucionar las problemáticas que afectan a las fábricas que son cerradas de manera arbitraria por las patronales, logrando preservar los puestos de trabajo para centenares de familias.
En vísperas del presupuesto de ajuste que implicará una severa degradación de las condiciones de vida de los trabajadores y profundizará el saqueo de Cambiemos y el FMI (con el aval del peronismo), estudiantes de la agrupación En Clave Roja convocan a movilizarse a las inmediaciones del Congreso para expresar el rechazo y la resistencia a los recortes. En Educación por ejemplo el presupuesto implicará un 77% menos para infraestructura escolar, 39% menos para formación docente, 35% menos para becas estudiantiles.
En Salud caen un 17% los fondos para los 5 hospitales nacionales que tratan enfermedades complejas, se reducen un 90% los fondos del Programa de Atención a la Madre y el Niño y un 75% para la prevención de enfermedades endémicas.
Al mismo tiempo que congelará el ingreso de los trabajadores estatales, sector donde el salario ya cayó un 18% real desde el 2015. Es imperiosa la necesidad de que sindicatos y centros de estudiantes, retomen sus mejores tradiciones y desplieguen todas sus fuerzas para que el ajuste lo paguen los capitalistas.