MUNDO OBRERO, EXTREMA DERECHA. Bombero agredido por ultraderechistas en una concentración en Madrid

En galego

La concentración en la que participaba fue convocada por la Coordinadora Unitaria de Bomberos Profesionales, de carácter estatal, para reclamar una ley estatal que regule todo el cuerpo de bomberos en el Estado, pero sin invadir competencias autonómicas ni limitar la autonomía local.

Un grupo de bomberos gallegos participaron de la concentración donde hicieron visibles los reclamos del cuerpo de bomberos de Vigo que llevan meses en huelga (con unos altos servicios mínimos), con la que piden entre otras cosas cobertura de bajas, aumento del personal y mayores tiempos de descanso entre otras medidas.

Cuando terminó esta acción de protesta, alrededor de las 7 de la tarde, Miguel se dirigía a su furgoneta para dejar una pancarta y la bandera gallega “estreleira” (con la estrella roja, usada por el nacionalismo gallego de izquierda y sindicatos como la CIG), una persona rodeada de otras cuatro se rió y le propinó un puñetazo en el cuello sin mediar palabra.

Se le cayeron las gafas y se agachó al suelo para recogerlas, donde recibió más puñetazos y patadas, y gritos de “Independentista de mierda”, "Fuera de aquí” e “Hijo de puta”. Él supo defenderse e intentó explicar que no era independentista catalán, pero le respondieron que daba igual, que se fuese de allí.

Finalmente se marcharon y Miguel intentó buscar a algún agente de policía para denunciar los hechos, pero estos estaban pendientes de la manifestación y no pudo formalizar una denuncia. Desde entonces ha recibido apoyos de numerosos compañeros de profesión y multitud de personas en las redes sociales.

En una entrevista en Avantar, el portal digital de la CIG, al ser preguntado sobre la agresión y si tiene que ver con el escenario en Catalunya, Miguel Uclés respondió afirmativamente: “Los medios de comunicación siembran odio contra una parte, y luego pasan estas cosas…Vivimos en un Estado que está compuesto de distintas naciones, así que únicamente podremos convivir si se respeta el derecho a decidir. Pero vivimos en una democracia impuesta, en una transición infinita”.

Repudiamos firmemente esta agresión a este trabajador que estaba luchando por sus derechos y le mostramos nuestro más firme apoyo. Hechos como estos demuestran que bajo el pretexto de la unidad de España, la reacción del Estado y la extrema derecha se preparan para atacar la lucha social, en un contexto de probable recesión económica para el siguiente período.

La sentencia contra los presos independentistas abrió el camino a una mayor represión estatal, así como a la criminalización de la protesta social. Por eso es necesario impulsar la movilización para defender nuestros derechos democráticos y sociales, contra la represión del Estado y contra los grupos de extrema derecha, envalentonados y blanqueados por los medios de comunicación.