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Red Internacional
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Tucumán. Unidad Ciudadana, un acople de Jaldo y el alperovichismo

Con un encuentro de la militancia, la lista que se referencia en Cristina Kirchner reafirmó su apoyo a la lista del Frente Justicialista.

Miércoles 4 de octubre de 2017

La lista de Unidad Ciudadana en Tucumán, que apoya a Cristina Kirchner a nivel nacional y tras quedar fuera de las PASO salió a dar su apoyo al oficialismo en la provincia.

El fin de semanas se realizó el “Primer Encuentro por la Militancia” de Unidad Ciudadana (UC), donde se relanzó el apoyo a la lista del Frente Justicialista encabezada por el vicegobernador Osvaldo Jaldo. En las PASO, la lista de UC pretendió aglutinar a los sectores kirchneristas y progresistas y tras quedar afuera giraron en un apoyo al oficialismo dirigido también por el gobernador Juan Manzur y el senador José Alperovich.

La lista referenciada en Cristina Fernández de Kirchner se suma a militar la lista impulsada por el Partido Justicialista bajo el argumento de “frenar el proyecto de entrega y concentración de Cambiemos”. Además de las figuras locales de UC —José Vitar, Hugo Cabral, José Cuneo Vergés— participó la diputada Mabel Carrizo (suplente en la lista de Jaldo) y Jesús Salim, en representación de La Cámpora.

Panqueques en el aire

La campaña que viene realizando el peronismo en la provincia hablando de “defender a los tucumanos” puso el acento en plantarse como la oposición al gobierno nacional. En su spot de campaña, Jaldo y Manzur anuncian que se van a oponer en el Congreso a las leyes de ajuste y tarifazos que salgan por iniciativa del macrismo. Lo increíble es que lo afirman luego de haber aplicado el mismo tarifazo en Tucumán y haberle votado al macrismo desde el senado las leyes que habilitaron el pago a los fondos buitres, la ley de blanqueo de capitales, y el ajuste presupuestario del gasto público. Aquí no hubo grieta: José Alperovich, Beatriz Mirkn (PJ-Frente para la Victoria) y Silvia Elías de Pérez (UCR-Cambiemos) votaron juntos.

¿Por qué habría que creer a los candidatos del oficialismo provincial cuando pocas horas de conocerse los resultados electorales de las PASO, Manzur afirmó: “hay que asegurar la gobernabilidad y tiene que ser de ida y vuelta (…) en octubre tenemos la elección y después el presidente Macri tiene que gobernar dos años, y nosotros también tenemos que gobernar dos años”?.

Recordemos que uno de los argumentos que uso de CFK para presentar su espacio Unidad Ciudadana por fuera del PJ fue que “algunos legisladores no estuvieron a la altura de las circunstancias”. En Tucumán, sin embargo, la lista de UC fue integrada a la boleta oficial del PJ, sacando apenas un 2% de los votos. Sin embargo, a pocas horas de la derrota posaron para la foto con los “traidores” y por estos días se los puede ver muy activos militando para la lista del gobernador. Pero no debería sorprendernos si nos atenemos al prontuario de los integrantes de este espacio. Veamos.

José Vitar, actual vocero de Unidad Ciudadana, tiene muchos años en la política. Podría decirse que es un “oficialista todo terreno”; entre 1987 a 1991 fue diputado nacional bajo el gobierno de Domato, quien tenía al Malevo Ferreyra como jefe de investigaciones dentro de la policía, implicado durante la dictadura y con varias acusaciones de muertes y torturas en comisarías; entre 1991 y 1993 fue electo legislador provincial en las listas del menemista Palito Ortega; luego diputado nacional de 1993-1997 y reelecto para el mismo cargo de 1999 a 2003 en las listas de la Alianza junto a Chacho Álvarez y Fernando de la Rúa, gobierno expulsado por el pueblo al grito de “que se vayan todos”; Posteriormente se pasó al kirchnerismo ocupando distintos cargos: entre 2006 a 2007 fue gerente coordinador en PAMI y de 2007 a 2010 Secretario de Relaciones Institucionales; entre 2010 a 2012 ocupó el cargo de Subsecretario de Integración Económica Americana y Mercosur en la Cancillería; como funcionario del alperovichismo, de 2012 a 2013, fue subsecretario de asuntos institucionales y del 2014 hasta la actualidad vocal de la comisión Cascos Blancos. Ahora acompaña la “deskirchnerización” del oficialismo provincial. Como diría Groucho Marx “estos son mis principios. Si no le gustan tengo otros”.

Otro de los referentes de UC es Hugo Cabral, el funcionario elegido por Alperovich para ocupar la Defensoría del Pueblo. Cargo al que accedió luego de ser impugnado por pertenecer al mismo partido político que el mandatario provincial.

Durante su gestión recibió múltiples denuncias de irregularidades contra la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) que hoy siguen sin resolverse. Además durante la gestión de Alperovich, Hugo Cabral, fiel a su posición política dejó pasar los tarifazos provinciales y nacionales.

En 2003 bajo el gobierno de Miranda, Hugo Cabral fue interventor del IPV (Instituto Provincial de la Vivienda) y renunció alegando problemas de salud, sin embrago salió a la luz que su renuncia se debió a irregularidades en la obra 487 viviendas-Barrio Congreso. El ex secretario de Obras Públicas, Rodolfo Neme denunció que el acuerdo benefició en $ 820.000 a las empresas constructoras Batcon (Fernando y Guillermo Batigg), Ingema (Emilio Graña), SIE (Rodolfo Alonso) y Omodeo. Según el ex funcionario, el acuerdo encarecía innecesariamente el costo de las viviendas.

Actualmente, según una columna en La Gaceta, el nombre de Hugo Cabral suena para conducir el IPV nuevamente. Quizás por eso los referentes de Unidad Ciudadana se muestran tan activos en la campaña del oficialismo provincial, que promete garantizar por dos años más la gobernabilidad y el ajuste al macrismo.

Sólo el Frente de Izquierda es alternativa para enfrentar el ajuste

La retórica opositora del Frente Justicialista y la lista de Unidad Ciudadana en tiempos electorales no coincide con lo actuado en estos casi dos años de macrismo. Quienes realmente decidan dar un mensaje político a quienes preparan un nuevo ajuste (y a los “opositores” que van a apoyarlo) tienen como verdadera opción al Frente de Izquierda y de los Trabajadores. Con sus parlamentarios y con su militancia cotidiana en los lugares de trabajo, estudio y en las calles, el FIT es garante de enfrentar las políticas de ajuste del macrismo, replicadas por los gobernadores.