“Cinco veces pedimos la detención y la prisión preventiva, hace bastante tiempo solicitamos su pase a disponibilidad y todavía sigue en funciones”, señaló sobre Montes de Oca el abogado de la familia del niño de 12 años.
Maximiliano Olivera @maxiolivera77
Sábado 22 de septiembre de 2018 18:00
Nicolás González Monte de Oca, uno de los dos policías involucrados en el asesinato de Facundo Ferreira, fue aprehendido por haber cometido un arrebato en el este provincial. Según la información trascendida, el agente del 911 le arrebató la cartera a una mujer en Lastenia, por lo que permanece aprehendido en la comisaría 8va de Banda del Río Salí, por orden de la fiscalía. Fuentes policiales consultadas por La Gaceta señalan que se firmaría el pase a disponibilidad de Montes de Oca.
“Frente a este nuevo hecho surge evidentemente la selectividad del sistema penal. La misma persona imputada por homicidio agravado, con marihuana y cocaína en sangre -y con numerosos hechos que entorpecieron la causa de Facundo-, no estuvo detenido ni un minuto por pertenecer a la fuerza policial y continuó en funciones. Y ahora que lo encuentran en un motoarrebato quedará detenido y seguramente en prisión preventiva porque fue aparentemente arrebato en banda”, señaló Emilio Guagnini, abogado de la familia Ferreira.
Guagnini adelantó en un comunicado que harán un nuevo pedido de prisión preventiva en la causa. “Porque, de ser este hecho un ‘motoarrebato en banda’, ya tendría dos posibles causas por delitos no exacerlables. Y eso aumenta el riesgo de fuga”, explicó. “Cinco veces pedimos la detención y la prisión preventiva, hace bastante tiempo solicitamos su pase a disponibilidad y todavía sigue en funciones”, denunció.
Tanto Montes de Oca como Mauro Díaz Cáceres, el otro agente acusado, siguieron en funciones en la fuerza luego de dos jueces negaran el pedido de prisión preventiva sobre ambos. Primero fue Víctor Rogués, juez de turno, y luego fue el turno del juez natural de la causa Facundo Maggio, reciente juez penal cuestionado por su defensa a criminales de lesa humanidad.
Entre las últimas novedades de este caso de gatillo fácil se destacó la aparición de las filmaciones de unas cámaras de seguridad donde se puede ver la persecución y luego la manipulación de la escena por parte de los dos policías.
En la madrugada del 8 de marzo, Facundo Ferreira fue asesinado por un disparo policial en la cabeza. La ejecución sumaria del niño de 12 años fue defendida, bajo el paradigma de la “doctrina Chocobar”, por funcionarios como la ministra de Seguridad Patricia Bullrich. La defensa corporativa también se trasladó a la provincia, con el ministro de Seguridad Claudio Maley defendiendo la versión policial de un enfrentamiento, con un silencio cómplice del gobernador Juan Manzur.
