Luego de más de un año en su reclamo, los trabajadores obtuvieron la matrícula que los reconoce como cooperativa, producto de la coordinación y la lucha. Una cooperativa en el parque industrial de Burzaco, el segundo más grande de Buenos Aires. Un importante paso en la pelea por la fuenta de trabajo.
Domingo 27 de septiembre de 2020 22:12
En septiembre de 2019 el empresario Lamberti, ex secretario nacional de parques industriales durante el gobierno de Macri, cerró la metalúrgica dejando 27 familias en la calle y sin obtener ninguna respuesta por parte del Municipio y el nuevo gobierno provincial. La dirección de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), donde estaban encuadrados los trabajadores, brilló por su ausencia. La obtención de la matrícula les llega en el marco de la pandemia donde todavía se mantiene la feria judicial y donde a nivel general los trabajadores sufren las consecuencias de la crisis con despidos, suspensiones, cierras, y la crisis habitacional donde las familias de Guernica pelean por vivienda.
En este marco, una cooperativa es un gran paso y un faro donde se pueden mirar distintos sectores de trabajadores. Que además puede cumplir un rol para la comunidad importante, como lo viene haciendo PORySO (ex Ansabo) y cómo de alguna manera ya lo venían haciendo los trabajadores de Gotan, quienes han dado pasos en la unidad a través de la Coordinadora de Trabajadores de la Zona Sur, y han hecho público su reclamo. Han buscado rodearse de solidaridad por medio de ollas populares, donde se acercaba la gente del barrio y otros sectores de trabajadores.
En la pelea de Gotan ha habido acciones importantes como la solidaridad hacia los vecinos de Villa Azul donde se entregaron elementos de higiene, alcohol en gel y un ingenioso dispenser a pedal sanitizante, que ellos mismos crearon con las máquinas, mostrando que si la producción se pone bajo gestión de los trabajadores se puede reconvertir para los intereses de los más necesitados.
Su solidaridad se extendió hasta los hospitales de la zona, como el Oñativia, el Gandulfo, y Melendez, que también recibieron de parte de los trabajadores de Gotan el dispenser a pedal.
Producto de todo esto y más, haciendo eje en la denuncia a la patronal, exigiendo respuestas al estado y denunciando la complicidad del sindicato, han buscando rodearse de solidaridad. Los trabajadores de Gotan fueron reconocidos como cooperativa y ahora se abre una pelea importante por la expropiación. Desde el PTS y el Movimiento de Agrupaciones Clasistas felicitamos a los trabajadores, y nos ponemos a disposición de está pelea como lo venimos haciendo. Tanto desde este medio, como desde las bancas en el congreso nacional, con Nicolás del Caño y la legislatura, con Claudio Dellecarbonara, que ya ingreso el proyecto de expropiación de PORySO (ex ansabo)
