Encuentro Regional de Pilar. ¡Vení con Pan y Rosas! Luchemos por poner de pie al movimiento feminista contra la resignación, la complicidad y el ajuste de la derecha

El sábado 14 de septiembre se realizará el 26° Encuentro Regional de Mujeres, Lesbianas, Bisexuales, Travestis, Trans, Intersex y no binaries del Oeste y Noroeste. Comenzará con un acto de apertura a las 9 am en Villa Astolfi, luego se dará lugar a los talleres que se harán en la tarde, para concluir con un trenazo ya que a las 18 hs se hará la marcha en Pilar centro.

Se trata del primer encuentro regional bajo el gobierno de Javier Milei. Es un evento anual que reúne a cientos de personas para reflexionar sobre la situación de las mujeres y la diversidad sexual, compartir experiencias, fortalecer las luchas y construir estrategias para enfrentar la violencia de género y la discriminación. Pilar fue elegida como sede y a pesar de las maniobras del gobierno local del intendente peronista Achaval por impedirlo se llevará adelante en el municipio y cerrará con una marcha en el centro de la ciudad con la participación de la mayoría de las organizaciones.

Mujeres y diversidades bajo el gobierno de Milei ¿cómo llegamos?

Milei gobierna siendo parte de las derechas conservadoras que en todo el mundo, desde Trump, Bolsonaro y el Vaticano con el papá Francisco y las diversas Iglesias como la evangélica, llevan una cruzada contra lo que llaman “ideología de género”, y lo hacen a la vez que están llevando adelante un fuerte ataque al pueblo trabajador para cumplir con los planes del FMI y el capital financiero; cuenta para esto con una oposición política cómplice y con la colaboración de las centrales sindicales.

Cotidianamente vemos cómo el gobierno plantea abiertamente que “la violencia no tiene género” y promueve discursos de odio patriarcal, entre muchos de ellos, están los recientes dichos de Cuneo Libarona donde rechazó "la diversidad de identidades sexuales que no se alineen con la biología" en un ataque a las diversidades sexuales. Pero esta ideología tiene consecuencias directas en cómo se da el ajuste: el cierre de Ministerios (como de la Mujer), recortes presupuestarios (un 33% este año para las políticas de género), bajas de programas de asistencia a víctimas de violencia (como la discontinuidad del Acompañar, el 50% de recorte en la línea nacional 144 y en el Plan ENIA de prevención de embarazo no intencional en adolescencia), entre otras medidas. Y también fomentando discursos de odio frente a hechos aberrantes como el lesbicidio de Barracas.

Si esto lo pensamos en el contexto de Pilar es crítica la situación. El distrito se ha convertido en un foco de violencia de género, con una alarmante frecuencia de femicidios y hace dos años el brutal travesticidio de Sofía Fernández, asesinada en la Comisaría 5ta de Derqui. La lucha por justicia para Sofía y la condena a los 10 policías involucrados, de los cuales 9 siguen libres prestando servicios, se ha convertido en una bandera del movimiento feminista local.

La salida no puede estar sin embargo en la oposición que nos trajo hasta acá, no solo por la denuncia de Fabiola Yañez contra Alberto Fernandez, sino también por la política llevada adelante bajo su gobierno: mientras decía que “acabó con el patriarcado” también se dio lugar a un gran desfinanciamiento de los programas y políticas públicas que mencionamos antes, en el marco de un brutal ajuste que dejó al 41% de la población en la pobreza. En la provincia de Buenos Aires, donde gobierna Kicillof, la situación es aguda: hay 1 refugio cada 257 mil habitantes, cuando organismos especializados recomiendan 1 cada 10 mil. Las que no acceden a estos lugares no tienen ninguna ayuda, ya que el pago de la deuda que dejó Vidal fue ratificada por parte del Gobierno Provincial, en detrimento entre otras cosas de la ayuda a estas mujeres. El doble discurso también se expresó, cuando desalojó con una represión brutal a mujeres con sus hijos en la toma de Guernica, muchas de las cuales escapaban de la violencia de género.

En la actualidad como parte de la “oposición” el rol de los peronistas es lamentable, ausentandose de las luchas en las calles más importantes como la Ley Bases e incluso con sectores de UxP que votaron a favor; y con una complicidad que continua por parte de las centrales sindicales que no llaman a ningún paro, ni plan de lucha. De este arco político incluso una variante más “progresista” como Juan Grabois dijo que la violencia de género no es una “realidad palpable de mayorías populares” a propósito de los dichos de Cuneo Libarona. También planteó "no estar muy en desacuerdo” con el proyecto de Milei de declarar la educación como servicio esencial, que cercena el derecho a huelga en la educación, un gremio altamente feminizado. Lo mismo paso con Guillermo Moreno que hace poco se tiro contra el matrimonio igualitario y el derecho al aborto. Ambos referentes no por casualidad, están ligados al Vaticano-

Ese doble discurso que toman los peronistas nos quiere hacer creer que hay que confiar en el gobierno en su momento, o en las elecciones de 2025 ahora; y en todos los casos abandonar las calles. Incluso en este encuentro un sector del peronismo de Pilar decidió no participar de la movilización por no estar de acuerdo con que la marcha fuera en el centro de la ciudad, y no en la periferia. ¡Qué contraste con la valentía de las jubiladas y jubilados que salen a las calles a enfrentar el protocolo de Patricia Bullrich y hacerse escuchar!

Ni un paso atrás: con la fuerza de las mujeres luchemos por una salida de la clase trabajadora

Desde Pan y Rosas nuestro llamado es a organizarnos de manera independiente del estado y de todos los gobiernos como demostramos con Myriam Bregman a la cabeza participando de la resistencia contra todos los ataques. Bajo este gobierno salimos a las calles masivamente en el 8M, y en el 24M y la marcha del 23A, en la Ley Bases. También bancamos las luchas docentes como la de Misiones, y ahora la de Neuquén que ya lleva más de 8 semanas. Estuvimos con los trabajadores del Sutna y en la lucha del Hospital Posadas. Ahora estamos en la pelea del hospital Garrahan, donde gran parte de las trabajadoras son mujeres.

Mientras hacemos esto, también apostamos a la construcción de un cambio verdaderamente radical, porque sabemos que nuestras conquistas peligran si separamos la pelea por ellas de la pelea contra el sometimiento al FMI y los capitalistas. El peronismo no cumplió sus promesas de recomposición social ni puede hacerlo, porque entre sus objetivos incluye pagar esa deuda fraudulenta, y no cuestionar y mucho menos enfrentar este sistema. Nuestro feminismo socialista combate los avances reaccionarios pero no se conforma con estas conquistas en una sociedad regida por la explotación, la miseria y las opresiones. Luchamos por transformar esta sociedad y transformar la vida, luchamos por una sociedad que planifique la producción, tome las decisiones democráticamente según sus necesidades, y piense las herramientas que necesita para combatir la opresión de las mujeres.

Por esto desde Pan y Rosas hacemos un llamado contra la resignación y la estrategia del mal menor con una perspectiva por la que creemos realmente vale la pena luchar: construir una fuerza política de la clase trabajadora, independiente del estado capitalista y los partidos que representan los intereses de quienes nos explotan.

El rol que podemos jugar desde el movimiento de mujeres y disidencias en esta etapa es evidente: fuimos millones en las calles y conquistamos el derecho al aborto legal a pesar de todos los dinosaurios que se oponian. Recuperemos esa fuerza para luchar contra este gobierno reaccionario y por una salida de la clase trabajadora.

¡Que nuestra voz se escuche en el Regional de Pilar!

En este encuentro de Pilar participaremos junto con compañeras de asambleas populares de Escobar, con las trabajadoras de la gestión obrera de Madygraf, docentes de José C Paz, Moreno, y Malvinas Argentinas, junto con las concejalas de izquierda Anabella Colli y Erica Seitler, con estudiantes secundarias y terciarias de Pilar del 51, y de las universidades de Ungs, Unlu y Unpaz: también trabajadoras manteras de Malvinas y jóvenes de la Red de la zona.

Sumate a dar esta pelea con Pan y Rosas:

Por un Encuentro realmente democrático plurinacional de mujeres y disidencias para luchar por poner en pie a nuestro potente movimiento de mujeres