Cecilia Basaldúa. Verdad y justicia en una causa plagada de irregularidades

El día lunes 25 de abril se cumplieron dos años de la aparición sin vida del cuerpo de Cecilia Gisela Basaldúa, en Capilla del Monte, Córdoba. Cecilia era viajera, oriunda de la provincia de Buenos Aires y su cuerpo fue hallado con signos de violencia física y sexual. El equipo de trabajo por Justicia para Cecilia Basaldúa, conformado por abogadas, comunicadoras sociales, artistas y activistas que acompañan a la familia convocó a acciones para exigir verdad y justicia y prepararse para enfrentar el juicio oral que comenzará el próximo lunes 2 de mayo, en los tribunales de Cruz del Eje.

La nutrida concentración que finalizó en el centro de la ciudad de Córdoba, ofició a su vez, de ceremonia recordatoria para Cecilia. Al final de la marcha se leyó una declaración de la Asamblea Ni Una Menos Córdoba, documento que da cuenta del recorrido plagado de irregularidades en este caso.

“Cecilia desapareció el día 5 de Abril del año 2020. Su familia realizó la denuncia a los tres días. Entonces NO se activó el protocolo de búsqueda inmediata como establece la ley provincial. El caso fue caratulado desde el principio como averiguación de paradero, tomando como premisa que Cecilia se ausentó por voluntad propia. Creemos que ese fue el primer signo de una larga cadena de encubrimientos que veríamos en el proceso de investigación y no podemos dejar de mencionar que quien estuvo a cargo de la búsqueda territorial de Cecilia fue el denunciado por abuso sexual y hoy detenido Diego Concha”, afirman en el texto.

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En las horas previas de la tarde, frente a la Casa de Córdoba en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, diferentes organizaciones se dieron cita junto a la familia de Cecilia Basaldúa. La recepción que hicieron los funcionarios de la Casa de Córdoba fue contundente: las persianas bajas y la negativa a recibir una “Carta Abierta Al Gobierno de Córdoba, A las mujeres y disidencias sexuales, Al pueblo de Córdoba” preparado por organizaciones de mujeres y disidencias, familiares y amigos que en Buenos Aires también exigen justicia por Cecilia.

Pan y Rosas, Plenario de Trabajadoras, Juntas y a la Izquierda, Isadora, Feministas de Abya Yala, La Garganta Poderosa, fueron algunas de las organizaciones presentes. También participaron la filósofa e investigadora Diana Maffía, la periodista y escritora Mariana Carbajal, Yamila Grinsberg, delegada de ATE Ministerio de Trabajo de la agrupación Marrón del PTS – FIT, entre otras mujeres trabajadoras y referentes feministas.

En la concentración, hablaron el padre y la madre de Cecilia. Su papá denunció que todo fue “armado por la policía de Córdoba en Capilla del Monte. Cecilia misma nos había pedido que averigüemos quien era Mainardi” donde ella se había tenido que alojar, producto del aislamiento dispuesto por el COVID-19 que le encontró sin alojamiento propio en la ciudad serrana.

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Fue allí, En Capilla del Monte, donde también, como desde los primeros minutos de la desaparición de Cecilia, hubo concentración y marcha, donde las organizaciones feministas y disidentes exigieron su búsqueda. Así lo expresa el documento de la Asamblea Ni Una Menos:
“Durante veinte días y en plena cuarentena cerrada, fueron las compañeras del Movimiento Plurinacional disidente y feminista de Capilla del Monte, las que salieron a tomar las calles, sorteando la prohibición y el silencio.
Fue por esa valentía que tal vez, a los dos días un 25 de Abril, como hoy, el cuerpo de Ceci apareció sin vida y con signos de haber sufrido abuso sexual”.

Inicio del juicio oral

El próximo 2 de mayo iniciará el juicio oral en una causa plagada de irregularidades, como señala no sólo la familia, sino también las abogadas querellantes, Giselle Videla y Daniela Pavón.

“Desde el primer momento hubo irregularidades en la investigación. Durante los casi dos años que duró el proceso de investigación que llevó la fiscal Paula Kelm, el destrato que recibió la familia de Ceci, fue absoluto. Nunca se investigó en el sentido que la querella solicitaba, nunca se investigó a los policías Ramón López y Ariel Zárate, al principal sospechoso Mario Mainardi que fue el último en ver a Ceci con vida, ni a Viviana Juárez, quien conectó a Cecilia con Mainardi. Tampoco se investigó a José Meza quien estuvo presente en la supuesta fiesta la noche anterior a la desaparición de Cecilia”, señalaba reiteradamente Giselle Videla durante el trayecto de la movilización.

La fiscal Paula Kelm, decidió elevar a juicio la causa sin atender a múltiples medidas de prueba pedidas por la querella, desoyendo a familiares, amigas, a las últimas personas que vieron o hablaron con Cecilia. Las últimas personas en haber visto a Cecilia con vida ni siquiera fueron investigadas seriamente, el “trabajo de la fiscal se limitó a tomar como pruebas los trascendidos que aparecieron en el principal diario de la provincia. ”

Esto fue confirmado por el padre de Cecilia, en la concentración de CABA, donde reiteró: “Mainardi está implicado en la muerte de mi hija, pero la fiscal Paula Kelm no los tocó, y que quien se encuentra preso es un pibito”.

Un perejil al banquillo de los acusados

Luego de una escasa investigación, según denuncia la querella y sin haber tomado medidas de prueba solicitadas por las abogadas, Paula Kelm decidió sostener como imputado a Lucas Bustos, un joven albañil de 23 años a quien se acusa de ser el asesino de Cecilia.

La querella no acusará. Insisten en que es “un perejil” y que este juicio montado está planeado para encubrir el rol de la policía provincial. Tres de los principales responsables del proceso de búsqueda ante la desaparición de Cecilia en 2020 está acusados de delitos donde media la violencia de género. El principal responsable de aquel operativo está preso por abuso sexual y es Diego Concha, un funcionario estrella, Director de Defensa Civil del gobierno de Juan Schiaretti hasta hace apenas 5 meses.

El proceso de búsqueda de la fiscalía y de los funcionarios actuantes siempre se orientó hacia la hipótesis de que Cecilia se había ido de la casa de Mainardi con un “brote psicótico”, planteo sostenido por el propio Mainardi quien recién después de 3 días de desaparecida Cecilia dio aviso a la familia que radicó la denuncia. La búsqueda siempre se realizó como averiguación de paradero y no se activaron los protocolos para desaparición de personas, tal como señalan desde el Equipo Justicia por Cecilia.

La legisladora (MC) del PTS y FITU, Laura Vilches, declaró al respecto: "El accionar judicial, policial y gubernamental es responsable y garante de la impunidad de los responsables. Sobre Mainardi, el último que vio con vida a Cecilia no pesa ni siquiera una imputación y mucho menos una investigación satisfactoria. Lejos de eso, la justicia responsabilizó y revictimizó una y otra vez a Cecilia. Por eso decimos que también son responsables de construir esta impunidad."

También estuvieron presentes las actuales legisladoras y concejales del Frente de Izquierda Unidad, Cintia Frencia (PO), Luciana Echeverría (MST), Noelia Agüero (IS) así como las ex legisladoras Liliana Olivero y Soledad Díaz García.

Este próximo 2 de mayo, a las 14 horas, comienza en los Tribunales Provinciales de Cruz del Eje, el juicio oral por Cecilia Gisela Basaldúa. La querella sostiene que debe iniciarse desde cero una nueva investigación para esclarecer la verdad y hacer justicia por Cecilia.

Las organizaciones convocantes, el Equipo de Trabajo Justicia Por Cecilia, la Asamblea Ni Una Menos Córdoba, Pan y Rosas y el PTS, el Frente de Izquierda Unidad, el Movimiento Plurinacional Feminista de Capilla del Monte, Mesa Intersectorial y ASI No (Abuso Sexual Infantil NO) junto a múltiples organizaciones de mujeres y disidencias convocan a concentrarse frente a los Tribunales de Cruz del Eje para seguir exigiendo justicia por Cecilia.