La Izquierda Diario conversó con Patricia Pintos, quién junto a Patricio Narodowski es la coordinadora del libro “La privatopía Sacrílega. Efectos del urbanismo privado en humedales de la cuenca baja del río Luján", sobre el boom inmobiliario de barrios cerrados y sus consecuencias en los municipios de Pilar, Campana, Escobar y Tigre.
Jueves 28 de mayo de 2015
¿Qué es un humedal y cuál es su función?
Las acciones antrópicas que pudieran causar cambios en el régimen hidrológico de los humedales implican una transformación de sus características ecosistémicas, muchas de las cuales son útiles y necesarias para las poblaciones que habitan en su entorno.
Cumplen un papel muy importante en la amortiguación de inundaciones y sequías, con frecuencia se dice que se comportan como grandes “esponjas”; contribuyen a la recarga de acuíferos subterráneos, aportan al control de la erosión, son reguladores del clima, ámbitos de una gran riqueza de biodiversidad (flora y fauna), son portadores de atributos patrimoniales y paisajísticos de inestimable valor, entre muchos otros beneficios que es importante que sean resguardados para el bienestar de la sociedad en su conjunto.
¿Qué impacto produce la transformación que realizan las constructoras en los humedales? ¿Cuál es su alcance?
Sin embargo, las empresas que desarrollan y comercializan estas urbanizaciones utilizan discursos e imágenes publicitarias que enfatizan en la sostenibilidad ambiental de las mismas; pero nada más lejos de esto. Las prácticas utilizadas en la construcción de los barrios, son a todas luces destructivas de los ambientes naturales, ya que implican remoción mecánica de suelos, refulados hidráulicos, alteo de cotas en vastísimas superficies y modificación de pendientes, producción de lagunas artificiales, desvíos de cursos, construcción de terraplenes perimetrales, entre otros perjuicios.
En varias charlas, has contado que: En los últimos 20 años las urbanizaciones cerradas han crecido hasta alcanzar 400km2 de superficie, lo que es equivalente a dos veces la superficie de la Capital Federal. ¿Qué rol cumple el Estado ante este avance inmobiliario de barrios cerrados y countries?
Coincidiendo con los años del neoliberalismo más intenso, en los 90 el Estado comenzó a mostrarse abiertamente predispuesto a favorecer el despliegue de las fuerzas del mercado en el territorio. La pregonada –e incumplida- “teoría del derrame” fue utilizada para justificar el desembarco de inversiones en los municipios, particularmente las del sector inmobiliario, que encontraron el terreno fértil para expandirse y consolidar un mercado de tipo especulativo rentista orientado a sectores sociales medios y medio altos.
En la mayoría de los casos esto vino acompañado de una cierta deslegitimación de la acción planificadora del Estado: era imperioso favorecer la llegada de inversiones, aunque ello supusiera flexibilizar el cumplimiento de las ordenanzas municipales o los procedimientos de aprobación.
Algunas de las empresas más importantes (como Consultatio o Eidico) buscaron consolidarse desarrollando nuevos nichos de producto: las urbanizaciones acuáticas o cerradas polderizadas. Relacionadas con paisajes y visuales asociados al agua.
Esto dio lugar al avancesobre áreas de valor patrimonial y paisajístico, pero también de gran fragilidad ambiental como los humedales.
Podemos afirmar entonces que no son los temporales los causantes de las inundaciones de los últimos años
Sin embargo, más allá de reconocer el efecto multicausal que interviene en la construcción de una catástrofe socio-ambiental como la mencionada, no puede soslayarse el papel desencadenante o agravante que ejercen ciertas transformaciones de matriz antrópica, como sucede con los cambios ocasionados por el urbanismo privado en la cuenca baja, luego de arrasar literalmente con miles de hectáreas de humedales, transformando su morfología y dinámica de manera extensiva y permanente, o la difusión de canales clandestinos en la cuenca alta aportando mayores caudales al escurrimiento superficial.
* Patricia Pintos es Geógrafa e Investigadora del Centro de Investigaciones Geográficas (CIG). Instituto de Investigaciones en Humanidades y Ciencias Sociales (sede CONICET) de la Universidad Nacional de la Plata. Junto a Patricio Narodowski, es la coordinadora del libro “La privatopía Sacrílega. Efectos del urbanismo privado en humedales de la cuenca baja del rio Luján", en el cual abordan la problemática sobre las construcciones de barrios privados en zonas de humedales.