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Red Internacional
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Tucumán. Conflicto azucarero: A ver, a ver! quién maneja la batuta, si los obreros o el gobernador mileísta!

A horas de la noche de este martes, el gobernador Osvaldo Jaldo salió a pedir la suspensión del paro azucarero en exigencia de aumento salarial y que paralizaría el conjunto de los ingenios tucumanos en el momento pico de la zafra. Con una conciliación obligatoria largada para evitar el paro, el gobernador busca ganar tiempo y evitar que explote.

Miércoles 5 de junio de 2024 12:05

La suspensión del paro azucarero previsto para el día de hoy, luego de la intervención del gobernador Osvaldo Jaldo, puso al rojo vivo el tema salarial en una provincia que ya venía caldeada por el tema de los alimentos almacenados en los galpones de Tafí Viejo. Las patronales ofrecen menos de lo que viene exigiendo la FOTIA y el clima por abajo en los ingenios activó el paro. El salario viene perdiendo por goleada mientras el precio del azúcar y el bioetanol está por las nubes.

La FOTIA exige un 165% de aumento y patronales como Emilio Luque salieron a ofrecer un aumento del 90% en mayo y un 24% recién en septiembre. El acuerdo que cerró por separado el Ingenio La Trinidad dejaría un salario mínimo de 821.000, apenas el equivalente a la canasta básica de pobreza y muy lejos de los 1.100.000 pesos que marcan la Canasta familiar de Consumos Mínimos.

Por abajo en los Ingenios circula una frase: “no se bajen”, con desconfianza y la mirada puesta en la ubicación de las burocracias de la FOTIA y de la FEIA, que vienen retrasando la definición del paro y especulando con arreglos que siempre dejan el salario azucarero dentro de los índices de pobreza y con cada vez menos derechos. La precarización es lo único que esta creciendo en los Ingenios estos años, “accidentes" laborales recurrentes y muertes obreras, se han vuelto más y más comunes, y la burocracia nada dice ni nada hace.

¿Jaldo en apoyo al reclamo obrero?

El gobernador más mileista de la Argentina cree que puede quedar bien con dios y con el diablo y que nadie va a darse cuenta. En las redes y medios de comunicación, el gobernador sale a decir que apoya el reclamo obrero y que está actuando a contrarreloj para mejorar la oferta salarial de las patronales azucareras. Baste decir que la conciliación obligatoria anunciada por la directora nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo, dentro del Ministerio de Capital Humano de Sandra Petovello, y a pedido de Osvaldo Jaldo, fue a minutos después de anunciado el paro. Ahora salió a decir que “les permite a los trabajadores parar el sábado sino hay acuerdo”.

En su búsqueda de votos para la aprobación de la Ley Bases el gobernador gusta decir que favorecerá a Tucumán, olvida decir que favorecerá sólo a los Luque, Rocchia Ferro y Lucci de la provincia. La reforma laboral inscripta en la Ley que quiere aprobar el gobierno busca deteriorar aún más las condiciones laborales, aumentando la precarización y dando carta blanca para que avance aún más la persecución antisindical. Por ejemplo, en el marco del paro del año pasado los portones de los Ingenios fueron bloqueados, si se aprueba la Ley Bases eso pasa a ser razón de despido directo. Nos quieren esclavos, y nos quieren callados.

La FOTIA y la FEIA actúan como correa de transmisión de lo que dice Jaldo y dicen pelear por mejor salario mientras hacen la plancha frente a la Ley Bases y la reforma laboral. Nada debería sorprendernos, siendo que la FOTIA ocupa la secretaría de Trabajo de Tucumán hace años avalando el avance de la precarización laboral en todas sus formas. En el último paro de la CGT, la FOTIA y la UATRE, dos sindicatos que nuclean las actividades industriales más importantes, no participaron del paro y no dieron explicaciones tampoco. Negocian por monedas hoy a sabiendas de que la inflación y los ataques laborales nos lo robará mañana.

Organizarse por un plan de lucha resuelto desde abajo

Desde el Movimiento de Agrupaciones Clasistas (MAC), presentes en el azúcar, planteamos otra salida. Hacer asambleas en todos los ingenios para discutir los pasos a seguir ante la tremenda provocación de los empresarios y el gobierno. La organización desde abajo, el paro y un plan de lucha contundente son el camino para lograr nuestros reclamos. Por el aumento de salarios, pero también el pase a planta del personal de Lemase y condiciones de trabajo. Es muy importante parar y salir a las calles con toda la clase trabajadora el día que se trate la Ley Bases en el Senado. Quieren imponernos una reforma laboral que empeorará aún más la situación de precarización y riesgos laborales. Ambas son una misma lucha.