Intervención con expropiación, intervención provincial, empresa mixta, fideicomiso: son los borradores por los que pasó el destino de esta agroexportadora para que, después de una enorme estafa, sea finalmente rescatada por el gobierno.
Martes 28 de julio de 2020 17:41
Alberto Fernández había anunciado la intervención y expropiación de la empresa a principios de junio, pero a los pocos días retrocedió después de algunos titulares críticos y manifestaciones de escasa convocatoria organizadas por sectores ligados a Juntos por el Cambio, sectores del campo y la oposición de derecha. El 30 de julio es la nueva audiencia convocada por el juez Fabián Lorenzini para avanzar en la discusión del fideicomiso.
En declaraciones a Télam la titular de la Inspección General de Personas Jurídicas de Santa Fe, María Victoria Stratta, se refirió al plan que tiene dos etapas: la primera consiste en la conformación de un fondo fiduciario para la cesión de acciones de la empresa, en el que los acreedores que lo deseen puedan capitalizar sus créditos en participación en el paquete accionario. La segunda parte consiste en "con las acciones en la mano, salir a buscar recursos" para la operatoria de Vicentín.
A pesar de las críticas del director del Banco Nación Claudio Lozano, que calificó a la propuesta de Perotti de "rescate a un grupo empresarios que llevó adelante una estafa monumental", desde el gobierno nacional esperan que los dueños de Vicentín avancen en transferir sus acciones para avanzar en el plan del fideicomiso.
El control de la firma en el concurso de acreedores sigue siendo parte de la negociación. Desde el gobierno proponen que los miembros del directorio de Vicentín no sigan al frente de la empresa, mientras el magistrado que entiende en la causa mantiene la postura de que las familias Padoán, Vicentin y Buyatti sigan al frente de la administración. Esto es así a pesar de que la empresa aún no presentó siquiera los balances de 2019, y es información que el propio juez Lorenzini reclama.
La expropiación fallida de Vicentín no es el único tema en el que los empresarios salen ganando con este gobierno: el impuesto a las grandes fortunas viene brillando por su ausencia, la oferta a los bonistas cada vez es más generosa y los despidos de privados que hacen como si el decreto de la Rosada no existiera, tampoco generaron ninguna represalia.
El Frente de Izquierda, desde las bancas de Nicolás del Caño y Romina del Plá, fue la única fuerza política que oficialmente presentó un proyecto de expropiación sin pago de la empresa, bajo gestión de sus trabajadores y trabajadoras. La propuesta plantea "la apertura de libros contables y la eliminación del secreto bancario" para demostrar “la estafa y el desfalco". También propone una comisión investigadora independiente para contribuir a dejar en claro las maniobras fraudulentas de estos empresarios”.
