La grafica de Pilar es líder en impresión de embalajes de cartulina y etiquetas, es uno de los talleres más importantes de la industria grafica con estándares de producción que superan los millones de pliegos al año. Con maquinarias de última generación y la construcción en curso de una nueva planta junto a la existente, llevan adelante su política de constante expansión.
Jueves 1ro de octubre de 2015 12:08
Una parte del enorme crecimiento de Impresores se explica por sus negocios con los políticos patronales, como Scioli que este año visito la planta en construcción y obtuvo una "donación" de cientos de miles de afiches para la campaña electoral.
Pero el verdadero negocio de esta empresa se encuentra en la súper explotación de sus obreros y obreras. Históricamente, entre los trabajadores de Pilar, se reconoció a Impresores como una fabrica "cárcel", donde los derechos laborales no existían, años de falta de representación sindical, jornadas con ritmos de producción extenuantes, eran la constante.
Luego de años los trabajadores se organizaron y al sindicato grafico, dirigido por la lista verde, no le quedo otra opción que ponerse a la cabeza de los reclamos, pero no para apoyar a los trabajadores, sino para contener y evitar que la situación se vaya de control.
Luego de un tiempo los trabajadores desplazaron a la comisión interna ligada a la Verde y la recuperaron obreros independientes influenciados por la lista Naranja (PO). Fue constantemente atacada por la patronal que contaba con la complicidad del sindicato, luego de un duro conflicto por el despido de uno de los principales activistas de la gráfica, donde llegaron a usar a la Bonaerense de Scioli para romper las asambleas de los obreros dentro de la planta, la patronal impone una derrota a los obreros con una consecuente desmoralización del activismo, y contribuyó la Naranja con su política hacia el conflicto y su balance posterior donde responsabilizaba a la joven comisión interna por no poder revertir la situación.
Esto abrió la puerta a los arreglos individuales de muchos de los más valiosos activistas y la posterior victoria de la lista Verde en las siguientes elecciones. Esta semana un nuevo despido se suma a esta constante de persecuciones, un ex delegado de la interna que dirigió el conflicto que describimos antes, fue despedido con la complicidad silenciosa de la oficialista comisión interna.
Solo la organización independiente de los trabajadores podrá enfrentar a estas patronales que no dudan en perseguir a los luchadores, como la patronal de AGM en La Matanza. Los gráficos de la ex Donnelley y de WorldColor, son ejemplos de lucha contra los atropellos de la patronales graficas. La defensa de las gestiones obreras que llevan adelante son una tarea de primer orden para fortalecer la perspectiva de recuperar las organizaciones obreras (en este caso el sindicato gráfico), de las manos de los Moyano y Abraham, para transformarlos en poderosas herramientas de lucha de la clase obrera.