La devaluación fue otro baldazo de agua a la parrilla (o la cocina). Las promociones más populares, como las de patamuslo o milanesas, también subieron entre 50% y 70%. Así no hay paliativo que alcance. Massa compite con Milei y Bullrich por el cariño de “la patria ganadera”.
Viernes 25 de agosto de 2023 13:54
La cara del cliente y el carnicero no tienen consuelo. Uno no venderá y el otro volverá a los fideos.
En una semana, los precios de la carne vacuna y de pollo se fueron por las nubes (en la calle usan otra palabra). El kilo de vacío pasó de 2000 a 3500 en las carnicerías de la mayoría de los barrios, aunque como cualquiera sabe depende del poder adquisitivo de la zona. La paleta lo mismo. La falda parrillera 1900. El osobuco pasó del puchero a un producto de lujo. 2300 pesos. Los dos kilos de milanesa pasaron de un saque a 4000 pesos. Y rebalsan de pan rallado.
Son las famosas gallinas de los huevos de oro: la media docena pasó en una semana de 340 a 540.
Cada vez que entra un cliente los carniceros se emocionan. Lo miran recorrer el mostrador y preguntar, porque las pizarras ya no tienen números. ¿Para qué espantar gente, capaz adentro convencemos algunos que se lleven unos bifes?
La semana pasada una nota de TV causó impacto. "Soy jubilado. Me puedo permitir un churrasco una vez por semana" decía un hombre con el paquete en las manos. Entre los jubilados y los frigoríficos, está claro a quién eligió el Gobierno.
Los aumentos llegan al 70%. 10 veces el sorprendente IPC (inflación) de julio según el INDEC.
Lo reconocen los propios empresarios de la carne y el campo. El Mercado Agroganadero de Cañuelas informó que tuvo aumentos de hasta 70% en el precio del “kilo vivo”. Desde CICCRA, la cámara de frigoríficos, reconocieron que solo entre el viernes 11 y el jueves 17 de agosto el kilo de Novillito aumentó 34% y el de Vaquillonas 38%.
¿La explicación? Federico Santangelo, director de la consultora Agroideas, le explicó al diario Perfil que la implementación del dólar agro de $340 “impactó de lleno en el precio del alimento dentro de una ecuación que venía muy finita y hubo que trasladar esa suba del costo del maíz. La devaluación de esta semana tuvo efectos tanto en el precio de la vaca como el novillo y arrastró todo para arriba”. Confirma que el precio del kilo vivo aumentó 70% en los últimos 30 días, “más de 20% con el dólar agro y ahora repercutió 30 a 40% más con la devaluación”.
O sea que, más allá de las sequías y otras contingencias, la clave son las medidas económicas del Gobierno. Medidas que negoció con “la patria ganadera” y el FMI.
El famoso “vamos a volver al asado” que le dio “mística” a la campaña del Frente de Todos no pasó las PASO. En realidad, se podría decir que no presentó lista. Por eso, cualquier paliativo que anuncie Massa este viernes será sobre terrano arrasado: te saqué 50 en una semana, te doy 15 hasta las elecciones.
De parte de la derecha no hubo ninguna crítica. ¿Cómo la habría si sus referentes son fervientes defensores de la “libertad” de los empresarios para remarcar y ganar fortunas a costa del bolsillo popular? ¿Cómo la habría si están por más devaluación? ¿Cómo la habría si Bullrich es una terrateniente más?
Solo el Frente de Izquierda denuncia las consecuencias del ajuste que vivimos y el que quieren profundizar, exige un aumento urgente de salarios, jubilaciones y programas sociales, y medidas de fondo contra los grandes terratenientes y alimenticias que amasan fortunas en un mar de pobres.
