Más de tres días de permanencia en la fábrica dieron como resultado el pase a planta permanente. La lucha contra los planes de ajuste y la solidaridad obrera son la fórmula para vencer a las patronales.
Lunes 3 de abril de 2017
Desde el viernes 31 de marzo, 50 trabajadores de Sidernet, contratista de Ternium-Siderar, tomaron un galpón para mantener una vigilia por sus puestos de trabajo, acompañado de una huelga de brazos caídos. Sidernet, del Grupo Techint, realiza tareas del sector Embalaje, Ternium intentó cortar el contrato de la empresa dejando a 50 operarios con sus familias en la calle.
Este lunes la fábrica amaneció con un paro de actividades del resto de las contratistas que realizan trabajo de mantenimiento, limpieza y otras tareas en solidaridad con los de Sidernet. Lo cual, el paro de la producción fue total. Al mediodía hubo una reunión entre directivos de la empresa y representantes de UOM, donde se llegó a un acuerdo que dejaría a 33 compañeros en planta permanente, 11 por contratos realizando tareas de planta, y finalmente 5 quedarían a discusión en el Ministerio de Trabajo por problemas particulares.
Los compañeros de Sidernet dieron un paso enorme en la lucha contra el plan empresarial de Techint, que busca reducir el personal en un 20% en todo el Grupo Ternium. A su vez, los trabajadores en lucha destacaron a La Izquierda Diario “el gran apoyo de familiares y amigos, pero además de nuestros propios compañeros que están en planta permanente que se acercaron a traer comida y mostrando disposición a lo que necesitemos”. La solidaridad entre efectivos y contratados fue fundamental para dar la pelea por el pase a planta permanente.
Frenemos los planes de Cambiemos y Techint
Lejos está Techint de estar en crisis, siendo que invirtió en Brasil y Vaca Muerta 4 mil millones de dólares. El gobierno empresarial de Cambiemos, integrado por ex directivos de Techint como Miguel Punte, está intentando generar nuevas condiciones para competir en el mercado mundial. Por esto, el objetivo es degradar las condiciones de los trabajadores, aumentar los ritmos de producción, la jornada laboral, y sostener los agotadores turnos rotativos, que en Ternium Siderar de Ensenada se se cobraron la vida de Juan Ruiz Díaz al caer del techo de la fábrica.
Así vemos los intentos de modificar los convenios colectivos de trabajo, como el de Chevron en Vaca Muerta, o las modificaciones de las leyes de ART. Este tremendo plan integral está siendo negociado por la burocracia sindical de la CGT, que presionada por sus bases está reubicándose. Por eso llama este 6 de abril a paro nacional “dominguero” intentando " administrar la bronca hasta Octubre". Es necesario organizar el paro nacional activo en asambleas en nuestros lugares de trabajo contra el ajuste junto al sindicalismo combativo.
La lucha es el camino a seguir
En este sentido, la lucha de los trabajadores de Sidernet, se enmarca en un contexto de crisis política y económica nacional, pero también en una serie de luchas regionales contra los despidos, en defensa de los puestos de trabajo. Por ejemplo; la de los choferes de la línea Este que mantuvieron tomas de cabeceras y diversas acciones en defensa de sus puestos de trabajo contra la patronal de Corvelli. Los despidos en Copetro, donde la patronal tuvo que contratar a Julián De Diego, abogado de multinacionales como Kraft para doblegar un acampe de 15 días. La lucha de los trabajadores del Puerto Tecplata por sus puestos que dejó 150 trabajadores en incertidumbre total durante más de dos años. También podemos mencionar las luchas de Emapi, Gleba y el despido discriminatorio de un trabajador migrante en NINI en 2016. Estas peleas que dejaron como saldo algunas derrotas o triunfos parciales, mostraron que la organización, la solidaridad y la lucha son la vía para resistir los ataques.
Por esto, desde el PTS en el Frente de Izquierda y La Marrón de La Plata junto a independientes (Astillero Río Santiago, docentes de la 9 de Abril en SUTEBA, estatales), venimos llevando adelante una campaña para defender los puestos de trabajo. Tenemos que luchar porque la jornada sea 6 horas de lunes a viernes. Los fines de semana son para estar en casa. En vez de 3 personas trabajando las 24 horas, que sean 4. Trabajemos todos, trabajemos menos, manteniendo el salario y con un mínimo garantizado igual a la canasta familiar. La vía para lograrlo es la lucha.
Los trabajadores de Sidernet en Ternium-Siderar, marcaron un camino a seguir que puede impulsar las próximas luchas obreras de la región. Nuestras vidas valen más que sus ganancias
