Precarización laboral docente en provincia de Buenos Aires. “En el plan Piedas tenemos que estar disponibles para cualquier tarea por $16.000 mensuales”

El miércoles 3 recibí una llamada desde la Jefatura de Inspección Distrital de Matanza. Me informaban que al día siguiente iba a recibir noticias para presentarme en una escuela en donde, semanas atrás, hubo un caso confirmado de COVID-19.

Pregunté si sabían cómo se había respondido ante esa situación porque las docentes estaban con aislamiento. Su respuesta fue que desde Jefatura no sabían nada y que ella sólo se encargaba de “comunicarse con las chicas del PIEDAS", el plan de trabajo precario que lanzó Kicillof durante la cuarentena. Parecía que estaba hablando con recursos humanos de una agencia de empleo tercerizado.

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Al otro día, me llamó la directora de la escuela citando para el día viernes a las 7:30, ya que el camión llegaba a las 7:00. También pregunté si estaban todas las condiciones de higiene para hacer el reparto de mercadería, y me respondió que estarían garantizadas desde primera hora.

Al llegar a la escuela, me encontré con otra chica del Piedas. Acomodamos la mitad de la mercadería y armamos una especie de circuito para que las familias se sirvieran los productos. Recién a las 9 de la mañana llegó una inspectora con alcohol en un rociador, máscaras muy precarias que eran una especie de troquel de plástico que se nos caían, guantes y alcohol en gel.

Hasta que llego esta persona solo contabamos con los elementos que nos habiamos traido de nuestras casas, comprados con parte de esos $16.000 mensuales. Cuando los/as docentes vamos a entregar los alimentos deberían estar garantizados todos los elementos de seguridad e higiene (máscaras, alcohol en gel, guantes, jabón y agua).

A media mañana llegó la Guardia Urbana, amenazadora como siempre, amedrentando a las familias diciéndoles que si no tomaban distancia iban a suspender la entrega de alimentos. Las familias de nuestros estudiantes se encuentran sin trabajo porque la mayoría son trabajadores informales. Viven con los miserables $16.000 de la IFE, si es que lo pudieron cobrar, más el alimento que retiran de las escuelas, también insuficiente. Y encima se tienen que bancar el maltrato policial. ¡En los barrios necesitamos tests masivos, agua, y el alimento para nuestras familias, no policías que nos traten como ganado!

Cuento esto porque siento muchísima bronca. Al igual que las familias que cobran el IFE a algunos docentes nos están pagando $16.000 en el Piedas. Es decir, somos docentes precarizadas que nos dan esa plata a cambio de estar disponibles para cualquier tarea. El plan Piedas es como si fuera una de esas agencias precarizadoras: realizamos trabajos de docentes, pero fuera del estatuto y los derechos conquistados por los docentes, con un salario ultra inferior al ya bajo salario que cobran nuestros compañeros docentes.

Nos convocan para tapar baches, se piensan que somos descartables. Es el Estado mismo el que nos precariza. A muchas compañeras les asignaron tareas administrativas que les ha llevado muchísimas horas y días de trabajo.

Si se realizaran los actos públicos aunque sea de manera virtual podríamos tomar los cargos y horas. Además deberían darnos urgente un salario de cuarentena de $30.000 para todos los trabajadores/as. Pero no, eligen la precarización, introduciendo en los hechos una flexibilización laboral en la educación, contra el estatuto.

Obviamente que para realizar esto se necesita la complicidad sindical: Roberto Baradel, Secretario General del Suteba provincial, no dijo una palabra cuando Kicillof lanzó este programa. Ellos pueden estar en cuarentena tranquilamente, tranquilos y calentitos con su heladera llena, mientras nosotras exponemos nuestra salud y la de nuestros familiares.

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Yo no quiero que existan categorías de “primera” y de “segunda” dentro de la docencia ni en ningún sector. Ellos sí la quieren, y lo hacen para dividirnos. La precarización, las suspensiones, las rebajas de salario, los despidos, las venimos sufriendo todos porque están descargando la crisis sobre los y las trabajadoras. Ninguna conducción sindical nos representa, ellos sólo representan sus propios intereses y por eso negocian nuestros derechos con el gobierno y los empresarios.

Distinto es el caso del Suteba Matanza - dirigido por la Multicolor que es oposición a la burocracia - que votó en su reunión de delegados un paro virtual el 12 de junio, para visibilizar todos los reclamos de los docentes, incluyendo los de lxs precarizadxs com nosotros.

Por todo esto es que soy parte de La Red de Trabajadorxs Precarizadxs e Informales, un espacio que venimos construyendo entre distintos sectores, organizando asambleas donde debatimos democráticamente como pelear por nuestros derechos. También para pelear porque los sindicatos nos representen. Ya hicimos jornadas donde nos manifestamos por una IFE de $30.000. En este espacio no existen divisiones. Si nos tocan a uno, no tocan a todos. Este jueves vamos a realizar acciones por zonas a las que quiero invitar a todos los lectores y en especial a la docencia precaria, en el Oeste nos juntamos en la Plaza San Justo a las 11hs. Si a vos también te da bronca, sumate y peleemos juntos.