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Red Internacional
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Tucumán. Hacinamiento en comisarías y nuevo pedido de justicia en causa Brigada Norte

Autoridades gubernamentales y judiciales inauguraron un módulo nuevo para trasladar a los detenidos de las colapsadas comisarías tucumanas. Familiares de jóvenes calcinados en Brigada Norte exigieron nuevamente justicia.

Juan Lobo @CanisLupus1917

Miércoles 2 de diciembre de 2015

A cinco meses de la muerte de Ariano Biza y Emanuel Gallardo los familiares exigieron con una movilización la imputación al personal de la Brigada Norte, donde los jóvenes perdieron la vida por responsabilidad policial. Desde las 10 de la mañana se inició un corte de calle frente a Tribunales, ubicado en Sarmiento y Laprida, familiares y amigos de Emanuel y Ariano se hicieron presentes al cumplirse el quinto mes sobre una causa que todavía no avanza. El Fiscal que conduce la investigación, Washington Navarro Davila, no quiso recibirlos.

En la Brigada Norte se produjo un incendio por causas que aún no han sido determinadas y la versión que mayormente está circulando por los medios es la brindada por las autoridades policiales, versión que se aleja totalmente de los hechos según lo indicado por el testimonio de las víctimas y los bomberos. Los familiares y testimonios de los detenidos afirman que los policías dejaron a los jóvenes encerrados durante largo tiempo, lo que causo el fallecimiento de los dos muchachos, ambos de 22 años de edad. No es la primera masacre de estas características. Ya hubo antecedentes de estas características en el Instituto Roca (donde se alojan menores) y hace apenas semanas, hubo un incidente similar en la Comisaría 1ra, incendio incluido, en pleno centro capitalino, donde las autoridades no brindaron ninguna información.

La muerte de dos jóvenes en la brigada de investigación provenientes de los barrios de bajos recursos, los pobres, es una muestra de la escandalosa situación en la que se encuentran las personas privadas de su libertad, dejando a la luz un sistema penitenciario perverso y corrupto, con infinidad de hechos aberrantes como torturas, vejaciones, venta de fármacos a internos, armado de causas y hasta presos que son enviados a robar “para la Gorra”.

Inauguraron un módulo en el Penal de Villa Urquiza

Luego de la conmoción por la muerte de Ariano y Emanuel, alojados en un calabozo de 4 x 2 metros donde estaban apiñados 18 jóvenes, la Corte Suprema de Justicia ordeno al Poder Ejecutivo que no haya más presos con prisión preventiva en las comisarías. El fallo de la corte respondió a un habeas corpus presentado por los fiscales Diego López Avila y Adriana Giannoni, que denuncia en parte la aberrante de la situación de los detenidos en las comisarías: “Se encuentran alojados de 15 a 25 personas en una habitación que posiblemente está preparada para una cantidad significativamente menor. Este hecho no es metafórico. Hay celdas en las que tienen que turnarse para dormir porque no entran todos acostados”. El escrito da cuenta de una situación de larga data y que se repite en todas las comisarías y destacamentos policiales, atestados de jóvenes que esperan su juicio mezclados con cientos de detenidos producto de la nefasta Ley de Contravenciones, que data de la dictadura, instrumento con el que la fuerza policial realiza razias, detenciones por “portación de rostro” con el objetivo central de recaudar dinero para la caja negra de la fuerza.

Regino Amado, ex legislador y flamante ministro de Gobierno, Justicia y Seguridad, declaró que hay comisarías que ya no reciben detenidos por problemas de infraestructuras. "Las comisarías 5ª, 11ª, la de Yerba Buena y la de Marti Coll están muy deterioradas. Están haciendo refacciones", esta situación se hace extensiva en realidad a todas las comisarías, donde incluso la Comisaría 1ra donde tuvo lugar un hecho similar se encuentra también colapsada, a pesar de haber sido inaugurada hace meses como una comisaría “modelo”. Abonando nuestra denuncia sobre el abuso de las detenciones arbitrarias, Amado se sincera: “va a ser algo difícil no tener presos en las comisarías ya que todos los días hay detenciones", que permiten –como remarcamos anteriormente- recaudar y hacer números para las estadísticas oficiales.

Lejos de pensar cómo abordar una situación lacerante, donde la mayoría de los detenidos son jóvenes pobres lo que demuestra un cuadro agudo de descomposición social que es responsabilidad del Estado, Regino Amado suspira anhelando la solución final: "No se descomprime la situación. Una nueva cárcel sería lo mejor.”