×
×
Red Internacional
lid bot

Entrevista. Irene Gamboa: “En cada lucha por la tierra en Santa Fe las mujeres están al frente”

Entrevistamos a la referente de la agrupación de mujeres Pan y Rosas y corresponsal del equipo de la Izquierda Diario, sobre la situación de las mujeres en la provincia de Santa Fe frente al reclamo de la vivienda.

Miércoles 21 de julio de 2021 12:02

Hace unos días estuviste recorriendo el norte de la provincia de Santa Fe. ¿Qué podes contarnos sobre la situación del acceso a la vivienda?

Si, hace unos días estuve recorriendo junto a otras compañeras y compañeros la ciudad de Reconquista. Hace poco más de un mes allí se vienen desarrollando tomas de terrenos de centenares de familias que producto de la pandemia y la crisis que se agrava día a día quedaron en la calle. Hacia fines del mes de junio, una de estas tomas en barrio Belén fue desalojada con un gran operativo policial. Sin embargo muchas familias aún continúan allí porque no tienen dónde ir. El acceso a la vivienda sabemos que es una crisis en todo el país, que quedó en evidencia cuando en Guernica en la provincia de Buenos Aires las topadoras de Axel Kicillof y el Frente de Todos desalojaron cientos de familias. Las imágenes eran brutales, yo creo que ese día se terminó el relato de la campaña de Alberto Fernández del 2019 cuando decía que los últimos serían los primeros. En la provincia de Santa Fe gobernada por un aliado del gobierno nacional como Omar Perotti la situación es igual, la gran mayoría de los jóvenes entre 18 y 25 años no tienen acceso a la vivienda en la provincia.

¿Cuál es la situación que viven las mujeres frente al problema de la vivienda?

En cada lucha por la tierra en Santa Fe las mujeres están al frente. Las respuestas que dan las Secretarías de Niñez de las diferentes municipalidades es escalofriante. En Reconquista, Capitán Bermúdez o Barrio La Sexta de Rosario la respuesta es la misma: o se van antes de ser desalojadas o se les quitarán las tenencias de los niños y niñas. O sea, el Estado interviene desalojando familias, no garantiza el derecho a la vivienda y sigue vulnerando aún más a esas familias, amenazando con retirarle a los chicos. Lo único que hace es garantizar la propiedad de tierras que llevan decenas de años abandonadas. En Magaldi por ejemplo, los vecinos recuperaron un basural, se organizaron con asambleas, pusieron en pie un comedor, una Comisión de Mujeres, se enfrentaron al Estado y exigieron las tierras y las viviendas. Hoy, luego de casi un año de lucha, se encuentran en una mesa de negociación con los gobiernos municipal y provincial. En Capitán Bermúdez donde se trata de un ex vivero municipal abandonado hace más de veinte años. En Reconquista, se trata de tierras que también llevan abandonadas “toda la vida” como te cuentan las y los vecinos. En la toma de Barrio Copello en Capitán Bermúdez y en Barrio Belén en Reconquista las familias fueron desalojadas en dos oportunidades por los gobiernos municipales del peronismo. Pero las tomas de tierras no es lo único que atraviesa de norte a sur la provincia, las ganancias millonarias también lo hacen. Desde Reconquista, tierra de los Vicentin, Padoan y Buyatti, hasta el cordón norte de San Lorenzo, donde están los principales puertos aceiteros de -¿vale la redundancia?- los Vicentin, los Buyatti y los Padoan. Son dueños de la provincia, amasan millones, fugan millones por lo puertos y el Gobierno de Alberto y Perotti les perdona deudas millonarias levantadas en la “fiesta macrista”. Por ejemplo, el ex presidente de la Bolsa de Comercio y directivo de Vicentin Alberto Padoan tiene 29.968 hectáreas en la provincia. Esa es la radiografía de la provincia de Santa Fe: una desigualdad brutal donde las mujeres se llevan la peor parte.

Mirá, a diferencia o que decía Amalia Granata hace unos días, que las empleadas domésticas no quieren trabajar, cuando llegas a estas tomas y te ponés a hablar con las mujeres te das cuenta lo que es la realidad que viven. Los datos oficiales dicen que el 72% de las empleadas domésticas trabajan de manera informal y quienes están registradas en blanco cobran un salario que no llega a los 26.000 pesos, muy por debajo del ya miserable salario mínimo vital y móvil pactado por el gobierno y las burocracias sindicales. Una piba de barrio “Las Ranas” en Reconquista me decía que en el centro de la ciudad las mujeres las desprecian, pero después se olvidan que las tienen laburando en sus casas en negro y sin derechos.

¿Por qué crees que se repite esta situación de lucha por la tierra en diferentes lugares de la provincia?

Como te decía antes, hay una concentración de riquezas muy grande en manos de muy poca gente. Por ponerte un ejemplo, según los datos del IPEC del 2018 unas 19 familias poseen más de 380.000 hectáreas en la provincia, y sabemos que estamos hablando de los campos más fértiles del país. A eso le sumamos es la segunda provincia exportadora del país con el 22% de las exportaciones totales. La cara contraria es que durante la pandemia, se agudizó la desigualdad, en el gran Rosario la desocupación por ejemplo llegó casi al 14% y el 25% de los nuevos empleos son contratos precarios. Por esto mismo, en el marco de la pérdida de trabajo, la inflación, el aumento de los alquileres, miles de personas –sobre todo jóvenes- se vieron obligadas a construir sus casas en asentamientos. Nosotras de Pan y Rosas y el PTS venimos acompañando y apoyando estas luchas por la tierra y la vivienda. Creemos que puede haber una salida a esta situación desesperante que atraviesan miles de familias. Por eso planteamos que no se debería pagar más la deuda externa y que esa playa vaya para un IFE DE 50.000 pesos. También se podría cobrar un verdadero impuesto a las grandes fortunas del campo y las exportadoras. Con el fin de generar un plan de obras públicas, para construir viviendas, escuelas y hospitales pero también para generar trabajo con derechos.