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Red Internacional
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CHUBUT // EDITORIAL. La resistencia sin aguante del sindicalismo K en Chubut

El ajuste macrista y dasnevista es acompañado por la pasividad de todas las conducciones gremiales. La lucha de la Pepsi en el centro de la agenda político electoral.

Jueves 29 de junio de 2017 11:54

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundió el pasado 14 de junio el informe sobre desocupación correspondiente al primer trimestre de este año. Allí se detalla que a nivel nacional el índice subió del 7,6% desde el último trimestre del año pasado al 9,2%. El estudio divide los casos por aglomerados urbanos.

Si se suman los casos de Comodoro Rivadavia-Rada Tilly al de Trelew-Rawson se obtienen 10 mil desocupados y 24 mil personas con problemas de empleo. El conglomerado Trelew-Rawson lidera con 8,4% el índice de desocupación en toda la Patagonia, ubicándose en el séptimo lugar a nivel nacional. Comodoro registra un 5,3%, aunque todo hace suponer que ese índice se elevará para el segundo semestre debido a los cientos de despidos en el sector petrolero.

La situación de las mujeres trabajadoras para el conglomerado Trelew-Rawson es aun más complicada. Para la franja menor a 29 años el índice trepó al 29,8%, según el Indec, publicó diario Jornada la semana pasada.

Dos semanas antes del informe del Indec el gobernador Mario das Neves impulsaba la denominada Cumbre Ambiental con el intento de marcar la agenda de cara a las próximas elecciones legislativas. El intento no pudo resultar más fallido. Ese mismo día, directivos de Cervecería y Maltería Quilmes S. A. se hacían presentes en las instalaciones de la planta Pepsi de Trelew para comunicarle a sus 48 trabajadores que quedarían en la calle. La conducción Sindicato Unido de Trabajadores de la Industria de Aguas Gaseosas y Afines (Sutiaga), en particular su secretario General Juan Levicoy y el Adjunto Carlos Martín, acompañaron la decisión de la empresa sin plantear ninguna perspectiva de lucha en defensa de los puestos de trabajo.

Los obreros despedidos comenzaron a autoorganizarse regularmente en asambleas con independencia del sindicato. Decidieron no bajar los brazos. Desde el 20 de junio se encuentran acampando en los portones de la planta exigiendo el cobro total de las indemnizaciones y la conformación de una cooperativa de envasado de agua y soda.

Tres decenas de trabajadores, sin ningún respaldo por parte de su sindicato, marcaron un aspecto de la campaña electoral frente a una realidad que parece haber venido para quedarse en la provincia: los despidos y suspensiones, que se cuentan de a miles. Ya nadie se acuerda de la Cumbre Ambiental.

El Gobierno provincial de Mario das Neves, enrolado en el Frente Renovador de Sergio Massa a nivel nacional, y el municipal de Adrián Maderna fueron los primeros en dar el volantazo de cara a la estrategia electoral. Recibieron a los trabajadores despedidos y les comunicaron que iniciarían tratativas a nivel nacional para encontrarle una solución a la situación. Todas las responsabilidades recayeron sobre las políticas de ajuste de Mauricio Macri, como si ellos fueran totalmente ajenos al respecto.

Mientras todo esto sucedía, la CGT del Valle Inferior del Río Chubut (VICH) una vez más dio muestra de estar ubicada en las antípodas de los problemas de los trabajadores. El 15 de junio se hicieron presentes en Puerto Madryn Pablo Moyano, secretario gremial de la CGT, y el integrante del consejo directivo Juan Carlos Schmid, para realizar un plenario en búsqueda de la normalización de la CGT VIRCH.

La nueva conducción se encuentra cercana al Gobierno provincial, algunos de sus miembros incluso son parte del mismo ocupando cargos. La comisión directiva quedó conformada en sus principales cargos de la siguiente manera: secretario General Luis Collio de Camioneros; secretario Adjunto Mateo Suárez de Uocra. Otros de los gremios involucrados son Luz y Fuerza, Sindicato de Empleados de Comercio (SEC), Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), Sindicato de Empleados Textiles de la Industria y Afines (Setia) y Sindicato de Trabajadores de Prensa del Noreste del Chubut (Sitprench), por citar algunos.

La conducción saliente, cuyo mandato se encontraba prorrogado, estaba a cargo de Luis Núñez, principal referente del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA). Este sector impugnó la elección de autoridades, aduciendo que en realidad es Francisco «Barba» Gutiérrez, secretario del Interior de la CGT, quien «tiene a cargo la normalización conforme a resolución del actual triunvirato que conduce los destinos de nuestra entidad madre”, según informó diario El Chubut. La Asociación Obrera Textil (AOT), propiedad privada de José Arenas y Sergio Cárdenas hace décadas, y el Sindicato de Ceramistas de Armando Moyano, también conforman este grupo, que enrolaría a cuarenta sindicatos.

El sector desplazado acusa de un “golpe de estado” a la nueva conducción y de ser parte del gobierno provincial, encargado de llevar adelante el ajuste macrista en la zona. Por su parte, Collio y compañía le endilgan a la conducción saliente dejar pasar los despidos y suspensiones en la zona. Ambos tienen razón.

Mario das Neves ya se expresó en varias oportunidades saludando a la nueva conducción de la CGT. Dato llamativo (o no tanto) es que se encuentre entre sus nuevos aliados políticos Mateo Súarez, a quien acusó años atrás de delincuente y de vínculos con la droga, a tal punto que tuvo la intención de impulsar una ley contra los fueros gremiales, usando como excusa el prontuario del sindicalista.

Las capitulaciones del sindicalismo K ante el ajuste de Macri y Das Neves

En estas páginas venimos cubriendo la ola de despidos y suspensiones en la provincia. Vendrá bien un breve repaso para tomar dimensión del rol de las conducciones sindicales.

En Comodoro Rivadavia, desde fines del 2015 se vienen registrando despidos y suspensiones de a miles. El descontento de la población se expresó en marchas multitudinarias por las calles de la ciudad a comienzo del año pasado. Sin embargo, la conducción del Sindicato del Petróleo y Gas Privado del Chubut, en manos del kirchnerista Jorge Ávila, hizo lo imposible por desviar el proceso y cualquier plan de lucha. En esto trabajaron en un frente único patronal junto al Intendente Carlos Linares (FpV), el gobernador Das Neves y el gobierno nacional.

A fines del año pasado y comienzo del presente la histórica planta Soriano, industrializadora de algas, adujo crisis por la apertura de importaciones y dejó en la calle a alrededor de cuarenta trabajadores. El Stia poco hizo para defender los puestos laborales. No es la primera vez que el sindicato se cruza de brazos frente a los despidos. Lo mismo ocurrió con los 1.500 despedidos de Alpesca durante el gobierno del kirchnerista Martín Buzzi. Recordemos, como dijimos más arriba, que Núñez era el secretario General de la CGT del Valle.

En febrero de este año cerró sus puertas Cerámica San Lorenzo en Puerto Madryn, dejando 150 familias en la calle. Armando Moyano, principal referente del sindicato, fue claro ante los trabajadores: solo resta aceptar las indemnizaciones, ya que la empresa no dará brazo a torcer en su decisión. Los obreros estuvieron acampando y mostraron predisposición a la lucha, aunque la conducción del sindicato evitó cualquier intento de hacer frente a los despidos.

El histórico parque industrial de Trelew profundizó en los últimos años el desguace que comenzó a sufrir al inicio de los años noventa. De tener alrededor de 7.000 trabajadores textiles en la década del ochenta, pasó a albergar cerca 2.000 en la última década. En los últimos años volvieron los cierres de fábricas y con ello los despidos y suspensiones. Algunos cálculos indican que hoy en día no superarían los 800 obreros el sector. Cientos de ellos se encuentran suspendidos, y la amenaza de nuevos cierres de fábricas está latente. En este caso la pasividad de la AOT y Setia involucra a dirigentes que fueron parte necesaria de la gran derrota sufrida en los años noventa. Juan París, principal referente de Setia, hoy es parte del gobierno y uno de los que está en contacto con los trabajadores de Pepsi, que luchan por la conformación de una cooperativa.

En la otra vereda, la del sindicalismo dasnevista, las cosas no se presentan mucho mejor. Jorge Taboada, diputado nacional por esa fuerza y máximo referente de Camioneros, aprobó la mayoría de las leyes de ajuste de cambiemos en el Congreso Nacional. Y, como se dijo, al ser parte del Gobierno, son responsables directos en el ajuste.

Los trabajadores de la Pepsi marcan el camino

Todos los análisis de los medios políticos provinciales coinciden en que los partidos políticos patronales se enfocaron en ubicar como cabeza de listas a candidatos de Comodoro Rivadavia, en detrimento de un supuesto equilibrio regional. Tanto el dasnevismo con Mariano Arcioni, Cambiemos con Gustavo Menna son de la ciudad petrolera. Para caso del FPV, que presentó ocho listas (Sic), pero que aun no se sabe cuántas estarán realmente en condiciones de competir, se intentó por todos los medios también buscar un candidato comodorense que represente al sector hegemónico, pero no lo encontraron, y finalmente el elegido por Carlos Linares fue el esquelense Ricardo Fueyo.

Como quedó claro a partir de lo expuesto, todos estos sectores son partícipes necesarios del ajuste sobre el pueblo trabajador de la provincia. Todos tienen responsabilidades directas ya sea al frente del ejecutivo provincial, de los municipios, Legislatura provincial, concejos deliberantes, en el Congreso de la Nación o conduciendo los sindicatos.

El Gobierno provincial se quiere mostrar con dinámica frente a la situación de crisis acompañando supuestamente a los despedidos de la Pepsi, pero aun no dio explicaciones de por qué no hizo algo similar en los casos expuestos, que se cuentan de a miles.

Los trabajadores de la Pepsi, organizándose en asambleas, con independencia de la conducción burocrática del sindicato, dan muestra que en todas las situaciones precedentes se pudo haber hecho algo más para evitar los despidos y suspensiones. Desde el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) en el Frente de Izquierda, y La Izquierda Diario, venimos acompañando y cubriendo desde un comienzo esta enorme lucha en defensa de los puestos de trabajo contra una multinacional. En función de fortalecer esta perspectiva de lucha, para que la crisis la paguen los patrones y no los trabajadores, presentamos la candidatura a diputada nacional de María Julieta Guzmán, en el primer lugar suplente de la lista encabezada por Gloria Sáez del PO, como parte de los acuerdos nacionales del Frente de Izquierda.

Un triunfo de los obreros de la Pepsi sentará un precedente de importancia histórica para la situación de ajuste en la provincia y en la región patagónica en general. Ellos son conscientes de ello, y es uno de los motores que los mueve a aguantar en el acampe a pesar de las dificilísimas condiciones climáticas. Toda la población trelewense, cuya historia de lucha trasciende las fronteras de nuestro país, acompaña el proceso.