Desde el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat reconocieron que ya superaron las 3500 personas que viven en la calle en este momento. En abril de 2022 eran 2600.
Lunes 5 de junio de 2023 22:30
Seguro muchos, muchas, lo sienten al caminar por la Ciudad de Buenos Aires o lo escuchan de amigos o familias. “Hay más gente viviendo en la calle”. Y no es solo una sensación. El propio gobierno porteño reconoció que hoy en CABA hay 3511 personas vivienda en la calle. En abril de 2022 eran 2611. Es un 34% más.
Este tipo de censos muchas veces no refleja la realidad de quienes no tienen techo y terminan pasando sus días en la calle. Así lo marcan siempre distintas organizaciones que asisten a familias en situación de calle.
Pero el dato oficial no deja de ser preocupante. La periodista Lucila Marin (LN) pudo hablar con autoridades del GCBA que reconocieron el aumento de las cifras y su causa: el aumento de la pobreza y la indigencia, más allá de los casos donde hay cuestiones de salud u otras cuestiones particulares. Además, un tercio de quienes viven en la calle también duermen allí. Entre los motivos están las condiciones de los centros que dispone el gobierno.
Muchos terminan durmiendo en las instalaciones de cajeros automáticos, como “denunció” con cinismo el candidato Jorge Macri. O en terminales de Ómnibus o el Aeroparque, donde todas las noches duermen allí más de 100 personas que no tienen techo.
Pero el dato es solo la punta del iceberg de la dramática situación de la vivienda. Con alquileres impagables, en la Ciudad más rica del país aumenta el hacinamiento, la gente que vive en villas y asentamientos, o en viviendas sin condiciones como la que se derrumbó en Floresta hace pocas semanas.
En una ciudad con miles de viviendas desocupadas, en gran medida por la especulación inmobiliaria, hay gente durmiendo en la calle en medio del frío o la lluvia. En un aeropuerto donde salen vuelos al mundo, hay gente que no puede pagar ni un alquiler precario. En los cajeros de los bancos que ganan millones por día, duermen personas que no tienen un centavo para comer. En la ciudad más rica, queda todavía más expuesta la irracionalidad del sistema en que vivimos.
El gobierno porteño, pero también el peronismo que apoya la misma política inmobiliaria y lleva el ajuste a nivel nacional, es responsable de toda esta situación. La llegada del invierno hace todo más doloroso. Cada año hay que lamentar la muerte de hombres, mujeres y hasta niños y niñas, en las calles de la Ciudad.
Hay que denunciar el crimen social que sigue golpeando la vida cotidiana de miles de personas y pelear por trabajo y vivienda para todos y todas, como plantea el Frente de Izquierda.