En el paraje, que pertenece al departamento Leales, pobladores cortaron la ruta nacional exigiendo reparación de la ruta 320, de los caminos vecinales, por ayuda a vecinos afectados por las inundaciones y por la mejora del servicio de luz y agua potable.
Juan Lobo @CanisLupus1917
Viernes 8 de enero de 2016 13:18
La Izquierda Diario recorrió las calles de Villa Obrera (Ingenio Leales), Pala Pala y El Cortaderal, que parecen realmente pueblos abandonados. Numerosas viviendas humildes fueron asoladas por la creciente de los canales y acequias, que no presentan ningún tipo de limpieza o mantenimiento. Muchos vecinos sufrieron daños materiales y perdieron animales. En algunas viviendas estaban “con el agua al cuello”, pero nadie osó abandonarlas por miedo a perder lo poco que les queda.
Esta situación dramática, sumada al malestar cotidiano con las autoridades de la Comuna por el pésimo estado de la ruta 320, caminos vecinales y el deplorable servicio de luz y agua (que por otro lado no llega a todos los vecinos), llevó a los habitantes a convocarse mediante redes sociales y por el “boca en boca”, para realizar una acción de protesta en la ruta nacional 9 y exigir una ayuda inmediata para los vecinos afectados. Un punto fundamental de la protesta vecinal es el arreglo inmediato de la ruta 320 y caminos vecinales, cuyo estado es tan calamitoso –cómo lo calificó por TV un chofer de la línea que recorre la zona- que las motos y los autos de los lealeños se destrozan al tiempo. Hasta la empresa que cubre el recorrido estaría pensando con no continuar el servicio por el deterioro histórico de una arteria vital para los habitantes de la zona.
“Imaginate lo que es esperar y esperar que pase el colectivo, que debe andar a velocidad baja. Cuando tenemos una emergencia no tenemos como transportarnos y con las lluvias que anegaron todos los caminos, el ´Simoqueño´ -la línea de colectivos- interrumpió el servicio. ¿Cómo hacemos si tenemos algún familiar enfermo, más con las inundaciónes? Estamos aislados, mucha gente no recibió ningún tipo de ayuda”, comentó un vecino, visiblemente indignado.
Otro paisano, que también trabaja en el Ingenio Leales nos comentó: “la ruta está destrozada por el paso incesante de los camiones del Ingenio –propiedad de la familia Budeguer- pero jamás colaboran en su reparación. Es un peligro el estado de la ruta, muchos vecinos que no disponen de medios de transporte están realmente incomunicados y nos preocupa ante situaciones de emergencia. Acá las autoridades de la Comuna no existen: recíen ayer (por el 6 a la noche) vi gente cavando una zanja, pero acá el agua nos afectó el día 5. El delegado comunal no dio la cara en ningún momento y en el corte de ruta que sostuvimos hasta el mediodía no se acercó nadie de la Comuna o el Gobierno a acercar alguna propuesta o solución. Nadie. En casa de mi padre estaban con el agua al cuello y lamentablemente murieron muchos animales que criamos.”
Los otros puntos del reclamo son los pésimos servicios de luz y agua: durante el verano la luz después de las 20 es más débil que una vela y los pocos que poseen agua potable sólo disponen de ella hasta el mediodía. El resto tiene que hacer sus propios pozos, y como funcionan con bombas eléctricas también ven afectado el suministro de un servicio esencial.
Todos los vecinos que dieron su testimonio estuvieron de acuerdo en denunciar el abandono total que sufre de parte del gobierno provincial y de su propia comuna, donde los políticos sólo acercan algo de ayuda durante las elecciones y después les dan la espalda. Muchos recordaron al Legislador Herrera, quien “manda” realmente en Leales, que tampoco arregló la ruta que ya tiene como 30 años y jamás taparon ni siquiera un bache. Denuncian que aprietan a la población que depende de las ayudas sociales, que las condiciones de vivienda son alarmantes y que es muy difícil conseguir trabajo, por lo que muchos deben viajar hasta San Miguel de Tucumán para ganarse la vida.
Los vecinos, como otros afectados en distintos puntos de la provincia continuarán con la protesta hasta que les den una solución y no descartan la toma de la Comuna.
Ayer los medios anunciaron la llegada de Jaldo, vicegobernador, a la zona. Pero sólo llegó hasta la entrada del pueblo, “no se animó a venir a hablar con nosotros”. Será que no quiere enfrentar la bronca de los pobladores, como el año pasado le tocó a Betty Rojkes, también del PJ, quién le espetó en la cara “vago de miércoles” a un damnificado por las inundaciones en el sur tucumano.
Tras un 2015 que empezó con graves inundaciones, caída de puentes, perdida de viviendas y hasta vidas humanas, ni Alperovich ni Manzur realizaron ninguna obra de envergadura para prepararse para este verano. Ya hace un año que especialistas en clima y ríos anunciaron que este verano el fenómeno de las inundaciones sería igual o pero que el año pasado, no sólo por el volumen de precipitaciones, sino justamente por la falta de obras y de mantenimiento en canales, acequias y en el lecho de los ríos. ¿Y el flamante capitán del “Plan Belgrano”, José Cano (UCR- Acuerdo para el Bicentenario, alineado al Macrismo) no pudo siquiera garantizar una obra para evitar que esto pase? Los partidos del PJ y los nucleados en el Acuerdo para el Bicentenario no se preocuparon por prevenir esta situación. El Gobierno sólo atinanó a anunciar un Comité de Crisis que puso a disposición de los damnificados canoas para acercar ayuda y UN helicóptero del 911… para todas las zonas afectadas. Una burla superada por las declaraciones de un desorientado Manzur que ayer anunciaba que “por suerte ya no estamos en alerta meteorológica”, cuando la página del Servicio Meteorológico Nacional ubica a Tucumán entre las 12 provincias en alerta meteorológica, con pronóstico de precipitaciones hasta el sábado.
Mientras tanto los vecinos continúan esperando las obras, el agua, la luz y seguramente volverán las protestas y cortes de ruta.
Pueden verse más fotografías y testimonios de los vecinos en el grupo de Facebook “Leales Reclama”