IMPUNIDAD. “Los qom no tenemos justicia, liberaron a los policías que nos torturaron”

Hablamos con la tía de los jóvenes que el pasado 1 de junio fueron torturados por la Policía de la comisaria 3°, quienes irrumpieron en la vivienda familiar, del Barrio Banderas Argentinas en la localidad de Fontana. Graciela Duarte cuenta que sus sobrinos fueron golpeados, y que luego los trasladaron -durante dos horas no supieron nada de ellos- y una vez en la comisaria, siguieron padeciendo tormentos. Las jóvenes sufrieron, además violencia sexual.

Después de la repercusión nacional que tuvieron estos aberrantes hechos, cuatro de los policías implicados, fueron separados de sus cargos. Luego fueron beneficiado con el arresto domiciliario, y días pasados se conoció que la jueza de Garantías Nº3, Rosalía Zózzoli, les concedió la libertad a los agentes de policía Orlando Sergio Cabrera, Cristian Omar Benítez, Cristian Eduardo Foschiatti y Cristian Ariel Flores.

No es el primer hecho de violencia estatal, y mucho menos de impunidad que sufren la comunidad qom, en la provincia de Chaco gobernada por Jorge Capitanich. Así lo expresó a La Izquierda Diario la tía de los jóvenes, cuando se refirió a la libertad que le otorgaron a los policías que agredió a su familia: “Los Qom no tenemos derecho a la justicia”.

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Además, convocó para este lunes a quienes se solidarizan con su reclamos, a que los acompañen a los Tribunales de Resistencia donde “vamos a pedir justicia, a reclamar por el cambio de carátula y rechazar la libertad de los policías que abusaron y golpearon a de mis sobrinos, que van a volver a sus puestos. Le vamos a reclamar a la fiscal y al juez que entiende en la causa, que nos explique por qué nosotros no tenemos justicia, después que abusaron de las niñas, y que torturaron al resto de la familia”.

Además, trascendió que la cúpula policial de la provincia de Chaco, reclaman que estos agentes sean reincorporados a la fuerza y vuelvan a cumplir tareas.

“Los aborígenes somos discriminados, no tenemos acceso a la justicia. Pedimos que se termine la violencia contra nuestro pueblo”, dice la tía de los jóvenes y subraya “los policías fueron absuelto, y la familia fue condenada a no tener justicia”.

Graciela Duarte denuncia que cambiaron la carátula de la causa, y que pedirán que la vuelva a tener la del principio, que era procesado por abuso. “También hubo desaparición de personas, a ellos lo pasearon en la camioneta por todos lados, y queremos saber qué pasó en ese momento con los chicos, donde fueron torturados. Aparecieron todos golpeados”.

Graciela se refiere, que además de padecer los abusos policiales, sus cuerpos sufren la impunidad: “Mi familia la está pasando muy mal, mis sobrinos y su mamá están traumados. No pueden dormir de noche, lo hacen de día porque tiene miedo que vuelvan a irrumpir en su casa”.

Continúa, “acá hay un odio racial, pedimos el apoyo de todo los argentinos. La mamá de los chicos, en su juventud fue violada. Si investigan, van a ver cómo los aborígenes acá somos maltratados”.

Además denuncian que no solo intervino los agentes de la comisaría 3°, sino también la de 1° y la 2°. De los cuales, solo fueron procesados cuatro policías, y no saben por qué el resto de los involucrados no están en el expediente.

“¿Qué pasa con los derechos humanos de acá de Resistencia, si ellos eran nuestros representantes, ellos se presentaron como querellante?” se pregunta y afirma “ellos nos traicionaron, nos sentimos traicionados. ¿Por qué dejaron que se liberara a los policías?”

Se refiere a la secretaria de de Derechos Humanos y Géneros de la provincia, que se presentó como querellante.

“Por la libertad con la que premiaron a los policías, no solo apuntó contra el jefe de la Policía, sino al Gobernador. Él no dijo nada, nunca se acercó ni asistió a mi familia. El Presidente, lo vi en los medios, condenó el hecho”.

Graciela volvió a referirse sobre lo que padece su familia “ven policías pasar por la casa, y los chicos se esconden porque están atemorizados”.

“Una de las chicas no quiere hablar, porque le da vergüenza, su cara está en todas partes, y la otra no quiere salir porque tiene miedo, se despierta llorando”.

Graciela concluyó pidiendo “a todos los argentinos, que no son aborígenes pero sufren atropellos, que este lunes nos acompañen con un cartel, que cuelguen una bandera y difundan lo que estamos reclamando”.

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