La Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza (Fatlyf) decretó el estado de alerta ante «la ausencia de respuestas positivas de las empresas de la actividad a los reclamos paritarios». Mientras tanto las empresas siguen negociando con el Gobierno aumentos de tarifas.
Viernes 16 de abril de 2021 11:47
La inflación sigue en ascenso y los reclamos por aumentos de salarios se multiplican. En este caso, la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza, informó en un comunicado que determinaron del estado de alerta como consecuencia de un nuevo fracaso de las negociaciones paritarias en el Ministerio de Trabajo, entre la representación gremial y los empresarios del sector.
Mientras el costo de vida aumenta fuertemente y las empresas de servicios públicos negocian con el Gobierno nuevos aumentos, niegan a los trabajadores del sector abrir la negociación paritaria.
El conflicto abarca a las empresas de generación eléctrica Grupos Pampa Energía, Albanesi Energía y AES Generación, a las Centrales Vuelta de Obligado y Puerto, a las Termoeléctricas Manuel Belgrano y José de San Martín y a ENEL Generación El Chocón. Además, el estado de alerta rige para las compañías de transporte de energía Transener, Transba, Yacile y Litsa y para las distribuidoras EDEN, EDES Y EDEA.
Mientras los dirigentes sindicales burocráticos mantienen una alianza con el Gobierno y los empresarios, los distintos sectores en lucha se proponen superar los límites que intentan imponerles. Entre ellos están los tercerizados eléctricos de distintas empresas, que están precarizados y cobran la mitad que sus compañeros bajo convenio eléctrico. Este sábado en Madygraf y por zoom se realizará un encuentro de coordinación de trabajadores ocupados, desocupados, precarizados, de la salud, tercerizados de Edesur, aeronáuticos, docentes y de distintos lugares de trabajo.
Como dicen en su convocatoria: "No alcanza con nuestra fuerza separada, es imprescindible la más amplia unidad de todos los sectores en lucha, pelear juntos y al mismo tiempo luchar por imponer el fin de la subordinación de las direcciones sindicales al gobierno y los empresarios, para lograr una respuesta del conjunto de la clase trabajadora, en blanco, informales, desocupados y precarios y superar en la lucha a la burocracia o frente a su negativa avanzar en sacarla de la conducción de los sindicatos".
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