En un taller del 37º Encuentro Plurinacional de Mujeres y la Diversidad Sexual sobre “Mujer y organizaciones sindicales” se desarrolló el debate sobre el rol de los sindicatos en un contexto atravesado por la emergencia del movimiento estudiantil y los ataques a la salud pública. Reproducimos la intervención de una médica residente de Pan y Rosas.
Sábado 12 de octubre de 2024 16:12
Iara Hibernon Salerno, es médica residente y forma parte del consejo directivo de la CICOP por la oposición, fue parte del taller sobre “Mujeres y organizaciones sindicales” del 37º Encuentro Plurinacional de Mujeres y la Diversidad Sexual.
Allí se dio un debate sobre el rol de los gremios y centrales sindicales en el contexto que atraviesa el país con un ajuste que lleva adelante el gobierno que impacta en las grandes mayorías. “Los equipos de salud venimos dando luchas muy importantes” sostuvo refiriéndose a los ataques que vienen sufriendo, mencionando al Posadas donde se lograron reincorporaciones y todavía hay compañeros despedidos.
“Tanto en el Posadas como en el Hospital Bonaparte, los contratos son contratos basura, se renuevan cada tres meses” relató por la situación laboral que se vive en el ámbito de la salud. “Esto no es de ahora, pasó en el macrismo, en el peronismo y pasa ahora” sostuvo.
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Iara es parte de la agrupación Pan y Rosas y de la Posta de Salud y Cuidados, contó que vienen apoyando la lucha del Posadas, del Garrahan y que fueron parte de la pelea por impedir el cierre del Hospital Bonaparte. Sobre esto último recalcó que “Fue un primer gran triunfo gracias a que sus trabajadores lograron hacer algo que sus conducciones sindicales no querían que fueron asambleas de base intersindicales. Cuando las conducciones de ATE y UPCN se estaban negando las trabajadoras y los trabajadores se pusieron de pie y dijeron acá somos todos trabajadores no importa a qué sindicato estás afiliado”.
Otra de las conclusiones que destaca es que cuando “sus delegados sindicales cuando fueron a negociar con el Ministerio no dejaron que cierren nada ahí, tuvieron que volver a la asamblea para decir qué estaban proponiendo y ahí fue que desde la asamblea se decidió si apoyar o no”.
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Sobre el rol de los sindicatos, mencionó que solo un sector de los hospitales de la provincia pudo hacerse presente dado que en ningún caso las conducciones llamaron a un paro. “La salud pública es una conquista que nadie nos regaló, si las conducciones burocráticas de los sindicatos no se ponen a la cabeza de defender la salud pública y la educación pública, si nos quieren dividir por arriba, entonces tenemos que organizarnos y coordinar por abajo” concluyó.
En diálogo con los debates que recorrieron el taller aseguró que “nuestro enemigo es Milei”, agregando que “también lo es todo el plan de ajuste del FMI”, un plan que comenzó con la llegada del organismo bajo el macrismo y que tuvo su continuidad con el gobierno del Frente de Todos que lo avaló. Sostuvo que eso “es lo que está haciendo que caiga todo ese ajuste sobre los cuerpos y las espaldas de todos los trabajadores que somos los que peor la estamos pasando. Es Milei, es el FMI y son los gobernadores”.
Para finalizar, agregó que “se la pasaron diciendo que no había fuerza para salir a pelear, y miren que no va a haber fuerza con el enorme movimiento estudiantil que se levantó, con las trabajadoras del Bonaparte que evitaron el cierre, el problema es que las burocracias sindicales no están queriendo unificar esas luchas. Este movimiento de mujeres que se puso en pie para conquistar el aborto, tenemos que pelear por coordinarlo con las peleas por la salud y la educación, e imponerle a las burocracias sindicales que llame a un paro general, que sea un plan de lucha porque con un paro no alcanza”.