La multinacional mexicana, tras el incendio de la planta ocurrido en mayo del 2021 ubicada en San Fernando, había despedido a todo su personal. Un trabajador reclamó ante la justicia laboral que sostuvo que el despido fue nulo y ahora debe reincorporarlo.
Jueves 27 de enero de 2022
Buenas noticias para los trabajadores y malas noticias para la empresa Bimbo. La Sala de Feria Judicial de la Cámara Nacional de Apelaciones del trabajo de Capital Federal confirmó una resolución de primera instancia que había declarado nulo el despido de un trabajador y ordenó reinstalarlo en su puesto de trabajo, debiendo pagar una multa de $ 3.000 diarios si no cumpliera con la resolución judicial.
La fábrica de Bimbo en San Fernando,sufrió un incendio el 9 de mayo de 2020, que destruyó parte de la planta. Aprovechando esta situación, un mes después, la empresa despidió a todos los trabajadores. A pesar de la resistencia de los trabajadores despedidos, que denunciaron la ilegalidad de los despidos, se realizaron actos y movilizaciones y denunciaron que parte de la empresa se encontraba operativa y podía seguir funcionando, tanto el Sindicato de Trabajadores Pasteleros como el Sindicato de Trabajadores de la Alimentación, que representaban a los trabajadores, avalaron los despidos negociando únicamente una mayor indemnización.
La multinacional Bimbo es una de las principales panificadoras a nivel mundial y posee prácticamente el monopolio de la producción de panificados en la Argentina, siendo dueña de cuatro fábricas en Argentina, tres en zona norte del Gran Buenos Aires y una en la provincia de Córdoba, comercializando las marcas como Fargo, Lactal o Generall Mills.
No contento con el despido, el trabajador de Bimbo José Julio, denunció ante la justicia laboral que el despido era ilegal por que no había respetado la prohibición de despido y solicitó su reincorporación y que le paguen todos los salarios hasta que lo reinstalen.
En una primera instancia, el Juzgado del Trabajo 76 había ordenado la reinstalación. Ante la apelación de la empresa, ahora fueron los Jueces Luis Catardo y Andrea García Vior de la Cámara de Apelaciones, quienes declararon ilegal el despido y ordenaron la reinstalación de Julio.
Los jueces sostuvieron que Bimbo había infringido la normativa de prohibición de despidos: “Dicha circunstancia, examinada en el contexto temporal que ha sido decidida y, ante la vigencia de las pautas del Decreto de Necesidad y Urgencia N° 329/2020 y sus respectivas y sucesivas prórrogas, conlleva irremediablemente a inferir que, al menos prima facie apreciado, el distracto ha sido decidido en contravención a la manda categórica de la normativa referida en cuanto, por su intermedio, se dispuso que quedan prohibidos -durante los plazos allí establecidos- los despidos fundados en falta o disminución de trabajo y/o fuerza mayor, como así también que las suspensiones o los distractos operados en violación a tales disposiciones, no podrán producir efecto alguno y deberán mantenerse vigentes las relaciones laborales existentes en sus condiciones actuales.”
Desde el mismo momento de los despidos, los trabajadores habían denunciado la ilegalidad de los despidos. A pesar de ello, los sindicatos nunca se pusieron al frente para luchar por la reincorporación de los trabajadores y se conformaron con negociar mayores indemnizaciones y desalentar la lucha de los trabajadores.
Ahora la justicia decidió que los trabajadores tenían razón: los despidos fueron ilegales.