Los gremios nacionales le exigieron a Bullrich un salario inicial entre 8.500 y 9.060 pesos. El ministro de Educación, Esteban Bullrich no hizo una propuesta concreta aunque el ministro ya declaró que buscará un tope del 25 % de aumento en la paritaria docente. Nueva reunión el martes próximo.

María Díaz Reck Docente y congresal de Suteba La Plata
Jueves 28 de enero de 2016 10:47
La reunión sólo se usó para estirar los plazos. El ministro no tenía una oferta concreta y nos entretuvo…” analizó Romero, secretario general de la UDA. El encuentro se cerró con un cuarto intermedio hasta el martes próximo.
De la reunión participaron la Ctera (Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina), Sadop (Sindicato Argentino de Docentes Privados), UDA (Unión de Docentes Argentinos), AMET (Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica) y CEA (Confederación de Educadores Argentinos).
La paritaria nacional docente es clave porque suele ser una referencia1 para otras negociaciones, ya que es el Estado nacional el que juega el rol de empleador, en este caso de alrededor de 1.000.000 de trabajadores docentes. El desenlace de esta paritaria, además es un asunto de interés para los gobernadores, ya que cada punto de aumento implica mayores gastos para sus distritos.
La CTERA planteó un aumento del salario inicial del 40 %, la duplicación del incentivo docente, una revisión en junio para evaluar las variables económicas que afecten el salario docente y ratificó la necesidad de la continuidad de los Programas Socio Educativos.
Como decíamos en La Izquierda Diario, de salario no se habla o se le pone techo a la discusión, mientras los efectos de la devaluación y la inflación se sienten en la vida de cientos de miles de docentes cuyos salarios están muy lejos del valor de la canasta familiar. En provincias como Santiago del Estero, Misiones, Corrientes, Jujuy, Formosa, La Rioja y San Juan recién en enero de este año alcanzaron los $ 6060 y en la provincia de Buenos Aires desde septiembre del 2015 está en $ 7000.
En poco más de 40 días de gobierno, está muy claro el rumbo. Despidos, represión y propuestas salariales muy por debajo de la inflación. Para los trabajadores de la educación “la propuesta” de Macri y Vidal se complementa con mecanismos de control sobre el presentismo y evaluación a los docentes.
Por un plan de lucha discutido en todas las escuelas: organizar la resistencia de los trabajadores para preparar la contraofensiva contra el ajuste
Los docentes de los SUTEBA combativos y los gremios y seccionales recuperadas por la oposición a Yasky-Alesso y Baradel tienen que abrir e impulsar la deliberación en las escuelas, en el mes de febrero, con asambleas, alertando a los trabajadores que nada se conseguirá sin lucha.
Los sectores sindicales alineados con el kirchnerismo, como el conjunto de la burocracia sindical, no han hecho nada serio para enfrentar los despidos en curso. En el estado, UPCN desmoraliza y aterroriza a todo el que quiere resistir. La conducción kirchnerista de ATE Capital (identificada con la CTA Yasky) recién planifica un paro para marzo, mientras los despidos vienen desde fines de diciembre.
Por todo esto hay que discutir un pliego de reclamos que parta de exigir a los dirigentes de CTERA-SUTEBA y todas las confederaciones y sindicatos docentes un paro general y un plan de lucha para enfrentar los despidos, en defensa de la escuela publica, 30 % de presupuesto educativo para salarios, infraestructura y comedores, basta de subsidios a la escuela privada, salario igual a la canasta familiar con jornadas de 6 horas, no a los institutos de evaluación docente, contra los despidos en el estado nacional, las provincias y los municipios, la libertad a Milagro Sala, y contra todo tipo de criminalización de la protesta social.
Este programa y plan de lucha tiene que ser impulsado por los sectores combativos de la docencia y la izquierda como parte de organizar la resistencia contra el ajuste de Macri y Vidal, ya que aún con la reunión fijada para el 3 de febrero en Buenos Aires y también a nivel nacional, donde se empezará a discutir salario,Baradel y la CTERA no han convocado a ninguna asamblea y ya han definido el pliego de reclamos y el porcentaje de aumento, sin discutirlo con un solo trabajador/a de la educación.
Rechazan que estén yendo a reunirse sin mandato y que a la salida de cada reunión saludan el diálogo con el gobierno que despide, reprime y criminaliza la protesta y no han llamado a una sola medida de lucha, como un paro nacional frente a un gobierno que ya demostró su dureza contra los trabajadores.
Exigen a los dirigentes de SUTEBA-CTERA que convoquen a asambleas para discutir y votar un plan de lucha para imponer nuestras demandas y un congreso nacional de delegados de base con mandato para poner la fuerza de los trabajadores de la educación en la escena nacional contra el ajuste, los despidos y en defensa del salario.