El jueves el oficialismo de la UCR, con sus socios electorales y el Bloque Justicialista, aprobaron el presupuesto de ajuste para el pueblo trabajador de Jujuy. Un análisis de la que ellos llaman “la ley de leyes”.
Sábado 15 de diciembre de 2018 10:47
En la segunda sesión extraordinaria, la última del año, se consumó la votación del presupuesto provincial, ahora Ley Nº 6113, enviado por el Gobernador Gerardo Morales. A las claras, un instrumento alineado y muy parecido en su contenido con el presupuesto nacional, aprobado recientemente con el mismo condimento, la ayuda inestimable de la gran mayoría del peronismo.
Su tratamiento comenzó con la intervención del miembro informante, Presidente de la Comisión de finanzas y cuñado del Gobernador, CPN Osvaldo Cuellar. En un intento por mostrar el lado “bueno” del ajuste y los recortes expuso cifras que para el común de los trabajadores no representan lo que verdaderamente significará la aprobación de esta ley.
Más recorte salarial
Entre otros ataques y recortes podemos resaltar que los salarios de los trabajadores estatales, docentes, municipales y demás asalariados dependientes de los recursos del estado, volverán a perder frente a la inflación. En una muestra clara de lo que representa el sector estatal para este gobierno -y para los anteriores también- sólo pudieron decir que era el mayor “gasto” que debían enfrentar.
Según los números presentados y aprobados, la pauta de recomponer salarial que prevé el estado provincial será del 22%. ¿Esto qué significa? Que nuevamente, seremos los trabajadores los que paguemos con nuestro salario su tan ansiado equilibrio fiscal, o déficit cero como les gusta decir. Si consideramos que la muy poco probable meta inflacionaria del 35% se cumpla el año que viene, los trabajadores jujeños habremos perdido un 13% del poder adquisitivo. Sumados a los casi 20 puntos que algunas consultoras estiman perdimos este año. Perderíamos en tan sólo dos años casi un 35%. Esto si solamente tenemos en cuenta a los trabajadores registrados (en blanco) ya que los números son dramáticos si incorporamos al análisis a los sectores informales (en negro).
El estado, el gran patrón precarizador
Otro punto no menos importante por la profundidad del ataque es la disminución de casi mil puestos de empleo registrado que se perderán. Esta cifra resulta de comparar los números del presupuesto del período ‘18 y ‘19. La misma fue defendida por el Ministro de Hacienda Carlos Sadir aduciendo que “la gente se jubila” y que era lógico que se achique la planta de estatales. Este funcionario omitió decir que ésta, como otras medidas, abren la puerta a un sinnúmero de figuras de precarización laboral ya que los servicios que brinda el estado a la población tienen que prestarse y que si hay menos trabajadores se explota en mayor medida a los que quedan o se incorporan con contratos basura a nuevos empleados
En este sentido el presupuesto profundiza la gran cantidad de trabajadores informales que prestan servicios en el estado provincial y sus dependencias, manteniendo la tristemente célebre figura de ser el mayor “patrón precarizador y explotador”.
Ganan los de siempre
Además del presupuesto se aprobó otro proyecto de ley en sintonía con el Pacto Fiscal que firmaran los gobernadores con el Presidente Macri. La ahora Ley N° 6114 establece los lineamientos y parámetros de los tributos provinciales que tendrá el Estado como unos de sus ingresos. En este sentido poco o ningún cambio respecto a la política impositiva que vienen desarrollando los gobiernos nacional y provincial. La síntesis, el aumento en algunos puntos de los impuestos que pagan las mayorías populares y la merma o quita de los que pagan los grandes contribuyentes, es decir, los empresarios.
Entre los beneficiados con la maja de impuestos a los ingresos brutos se encuentran las tabacaleras, azucareras y demás actividades “del campo”. Nuevamente se beneficia a las mineras que operan en la provincia con una reducción de cerca del 40% del impuesto a los IIBB, y también se aplica una reducción a las actividades financieras, es decir, a los bancos. Otras actividades de “primera necesidad” para sectores populares, como la producción de joyas, también verán reducir sus impuestos.
En este sentido los argumentos del “perdón” a los tributos de los empresarios y sus empresas para que sean generadores de puestos de trabajo se ven rebatidos por los propios índices oficiales. Jujuy es una de las provincias con más desocupación y las que en otros tiempos eran las principales ciudades industriales forman parte del ranking nacional de conglomerados con mayor desocupación y pobreza.
Más para cárceles y la Iglesia Católica, menos para las mujeres
Como denunció la diputada del PTS-FIT Natalia Morales en la sesión, “se destinan tan solo 19 millones de pesos, un 0,03% del total del presupuesto, a políticas de género, mientras se destina tres veces más dinero para ampliar cárceles, porque el ajuste no pasa sin represión, criminalización y persecución de la protesta y la pobreza". Es que en este presupuesto se va a destinar la irrisoria suma de 1,60 pesos mensuales por mujer para programas contra la violencia, considerando los 5 millones de pesos destinados a estas políticas.
La diputada también denunció que “se destinan 10 millones de pesos para el Seminario Mayor de la Iglesia Católica, la principal responsable, gracias a sus lazos con el Estado, de que en nuestro país las mujeres sigan muriendo en abortos clandestinos, que se niega a la aplicación de la Educación Sexual Integral y a todos nuestros más elementales derechos”
¿Qué podemos hacer?
Los trabajadores del país estamos enfrentando uno de los mayores saqueos de los últimos tiempos, que están perpetrando las clases dominantes junto a sus políticos patronales como garantes de sus ganancias. En Jujuy, una de las provincias más pobres del país, tanto radicales como peronistas nos dicen qué es lo que “nos pueden dar”, y que debemos ser “pacientes y tolerantes”. Este presupuesto no se hubiera aprobado tan fácilmente si las conducciones sindicales de la los gremios, en su mayoría dirigidas por el peronismo y el kirchnerismo, hubieran llamado a parar y movilizar a la Legislatura, como parte de un plan de lucha contra el ajuste. Algunos de los que dicen oponerse a las imposiciones de Gerardo Morales cuando se encienden las cámaras, fueron los que levantaron rápidamente la mano para aprobar el ajuste en pos de “institucionalidad”, “gobernabilidad”, y de autodefinirse una “oposición responsable”. Como denunció el diputado del PTS-Frente de Izquierda Alejandro Vilca, una oposición responsable… de dejar pasar el ajuste de Macri y Morales.
El camino no es otro que el que muestran desde el viejo continente los Chalecos Amarillos, miles de jóvenes, trabajadores y jubilados le están enseñando al mundo entero que la clase trabajadora es la que tiene la fuerza, aún bajo feroces represiones, cuando defiende sus derechos y cuestiona a los ricos.
