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Red Internacional
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Mendoza. Regalito del día de les estudiantes: se presentó la nómina de carreras prioritarias

Justo en el día de les estudiantes, quienes cursan o tienen interés por inscribirse en carreras de educación superior dependientes de la DGE se encontraron con la noticia de la publicación de las carreras prioritarias

Miércoles 22 de septiembre de 2021 14:41

Este 21 de septiembre, desde la Coordinación General de Educación Superior, como hacen cada año, informó cuáles son las propuestas formativas que tienen relevancia en la provincia.

Ante la noticia nos preguntamos:

¿Por qué los profesorados prioritarios se deciden, entre otros, en función del GEM (Gestión Educativa Mendoza)? Este sistema virtual de manejo de la información sabemos que tiene claras fallas en la carga de datos y una perspectiva puramente cuantitativa de la realidad. Estamos ante una nueva ofensiva de cierre de cursos que limita también la inserción laboral docente.

¿Por qué las tecnicaturas prioritarias dependen de reuniones con las cámaras de empresarios? De esta manera se define que “Construcciones, Petróleo y Gas, Minería, Computación y Redes, Desarrollo de Software, Metalmecánica, Recursos Renovables y aquellas que acompañen los planes estratégicos de desarrollo regional” es la prioridad a la hora de poder cursar una tecnicatura, según la Resolución 2021-3140-5-GDEMZA-DGE.

¿Cuáles son los intereses detrás de limitar las opciones a quienes desean estudiar en el nivel superior? El Profesorado para el Nivel Inicial, que es obligatorio, deja de ser prioritario. Cómo lo explica el gobierno: “un egresado del Profesorado de Educación Inicial demora hasta seis años en obtener un cargo con cierta estabilidad en el sistema obligatorio de enseñanza y más de ocho para ingresar como titular. De igual modo sucede con los Profesores de Educación Física. Los docentes egresados de estas carreras generalmente realizan sus primeras experiencias laborales en espacios de educación no formal o en cargos de auxiliares docentes para los que están sobre calificados”. Pero lo que no dicen es que para garantizar la escolaridad inicial obligatoria y pública, hay que construir los edificios y aulas necesarias. Es esta ejecución presupuestaria la que no es valorada prioritaria. ¿Causalidad?

Al pensar en estudiantes de nivel superior consideramos un contexto en que las juventudes ya se encuentran en una situación muy crítica. Trabajo informal, salarios en negro y que no llegan a la canasta básica. Grandes esfuerzos cotidianos para trabajar, estudiar y mantener una familia.

Pero la juventud tiene derecho a la educación. Por eso ante esta nueva ofensiva recordemos que en 2018, el Decreto 530 propuso una nueva política de educación superior ordenada por objetivos de orden, eficacia y eficiencia y la Resolución 2010 instrumentó este decreto imponiendo requisitos de cantidad de estudiantes e infraestructura y localización de las instituciones. En ese momento fueron estudiantes de toda la provincia quienes se organizaron, definieron posiciones y pensaron estrategias confluyendo en un enorme carpetazo en Casa de Gobierno.

En paralelo, trabajadores de la educación que ya habíamos realizado un festival en defensa de la educación superior, nos comprometimos a pensar colectivamente y en el marco de un congreso gestionado por el sindicato qué educación queríamos. Estas elaboraciones no fueron tomadas en cuenta para ninguna decisión de la Coordinación General de Educación Superior.

No resulta menor que, ante esta muestra de organización y lucha, la Coordinación General de Educación Superior haya salido a restringir los espacios democráticos de participación. Hoy se proponen cercenar las opciones de futuro para estudiantes y precarizar condiciones laborales de docentes. No podemos permitirlo.

Un punto que también merece análisis tiene que ver con las formaciones de profesionalización docente. Estamos ante una retórica clave para introducir reformas educativas, como la que quisieron imponer en medio de una pandemia y que fue masiva y contundentemente resistida. El famoso proyecto de educación provincial fue rechazado por toda la comunidad educativa.

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Ahora vuelven con estas opciones priorizadas para el desarrollo profesional docente que tienen que ver con las didácticas específicas, el acompañamiento a trayectorias y las tan pomposamente presentadas “educación emocional” y neurociencias. En esta misma lógica se pretenden las actualizaciones de los diseños curriculares para la formación docente.

Las críticas a estas miradas de una educación de las emociones y de la neurociencia del mercado las hemos desarrollado en este diario en varios artículos(acá y acá).

Los ataques a la educación superior no son nuevos. Pero está la fuerza de estudiantes, trabajadoras y trabajadores de la educación y las comunidades. Desde los institutos y desde el SUTE se viene enfrentando los ataques: festivales, movilizaciones, clases públicas y un Congreso Provincial de Educación Superior en 2018. Hay que retomar este camino y fortalecer la unidad para defender la educación pública.

Abramos el debate en cada Instituto y articulemos para que no impongan la lógica del ajuste que demandan el FMI y los organismos de crédito internacional, ni de adecuar la educación a los requerimientos de los empresarios. Defendamos la educación pública y debatamos qué educación queremos y necesitamos.

#MasParaEducación