Reproducimos la declaración política de las y los trabajadores organizados en la Corriente Nacional docente 9 de Abril.
Miércoles 7 de marzo de 2018 15:25
Las y los trabajadores de la educación estamos protagonizando jornadas históricas. Se recuperan nuestras fuerzas y se pierde el miedo.
Venimos de protagonizar un paro con un 40% promedio de acatamiento. Es cierto que hay escuelas en que sigue costando parar. Pero en otras se ha debatido muchísimo, se ha tomado coraje y el conjunto de docentes, celadores y hasta directivos se han sumado para decirle al gobierno que no vamos aceptar seguir perdiendo salario, que no vamos aceptar seguir perdiendo derechos, que no vamos aceptar que siga perdiendo la educación pública.
Somos 60 mil trabajadores y trabajadoras en la provincia. El 40% somos decenas de miles.
Además, la semana pasada protagonizamos una movilización enorme que copó la explanada de Casa de Gobierno y esta semana, en el primer día de paro otra vez fuimos miles.
Pero no fue todo. Desde hace semanas, hay un clima de deliberación permanente. Se debatió la propuesta salarial del gobierno, la contrapropuesta elaborada desde el SUTE, discutida en las bases, se debatió los pasos del plan de lucha y se debatió sobre la necesidad de tener un diálogo con la comunidad, recuperar la unidad para la defensa de la educación pública, para lo que estamos desplegando la campaña #MásParaEducación.
En las escuelas se discutió mucho el mandato hacia cada plenario. Venimos de una derrota que nos maniató para los paros porque el descuento del Ítem Aula se siente fuerte.
Pero lejos de querer dividir las escuelas entre los/as que paran y los/as que no, desde la Corriente 9 de abril acercamos una propuesta al Secretariado: adelantarnos y empezar a poner la fuerza de las decenas de miles de docentes de toda la provincia en la calle, antes de la paritaria, antes de la fecha de inicio de clases. Que podía ser una gran muestra de fuerza. Tuvimos razón y la marcha del 26F fue una verdadera demostración de fuerzas en la calle. A tal punto que el gobierno no firmó el decreto anunciado para esa fecha y se decidió a esperar un mejor momento.
Hoy estamos ante una negociación paritaria cerrada y la amenaza del decretazo inminente. Pero estamos más fuertes y hemos avanzado en organización. Tenemos fuerzas para pelear por más.
Desde la Corriente Nacional 9 de abril/Lista Bordó del SUTE, creemos que hay que profundizar los pasos dados.
Mantener el estado deliberativo que se viene viviendo en las escuelas, para poder elaborar un balance de lo actuado hasta ahora y los pasos a seguir. Además colaborar en que nuevas escuelas se organicen y seguir impulsando la elección de delegados donde no haya. Los delegados fueron un puntal fundamental para sostener el paro, debatiendo, proponiendo alternativas, organizando, etc.
Creemos que ante los miles que nuevamente salimos a la calle, tenemos que fortalecer nuestra lucha, poniendo en primer lugar la organización de fondos de lucha por escuela o zonas, para fortalecer a los que hicieron paro, apoyándonos en la solidaridad de los que no pudieron hacerlo y de la comunidad. Desde algunas escuelas ya están surgiendo ideas e iniciativas para desarrollar un verdadero fondo de lucha. De la manera que consideren las asambleas, se pueden desplegar múltiples iniciativas que mantengan organizadas a las escuelas, que sumen a los compañeros que hicieron y los que no hicieron el paro para recaudar dinero y cubrir las necesidades ante los descuentos que vendrán. El SUTE tiene que colaborar con todo los elementos materiales para que pueda ser posible.
En medio de este duro conflicto las distintas listas han mostrado las uñas, los dientes y las mañas. Tal es así que la pelea por las medidas, en particular el paro, no fue tomado con la intensidad militante a la altura de las circunstancias por la Lista Celeste y la Azul Naranja, que lejos de ir por un paro masivo, no han puesto sus agrupaciones al servicio de este objetivo. Esto se vio reflejado en que escuelas enteras, con delegados/as de estas listas, han tenido un muy bajo acatamiento. Dato extraño en medio de semejante estado de recomposición de las fuerzas de los trabajadores de Mendoza.
Han argumentando que “hay delegados/as enojados/as” porque no se ha rechazado las propuestas del gobierno en la mesa paritaria. Este argumento no tiene sentido: las propuestas del gobierno se rechazaron en las escuelas, debatiendo, votando, sacando mandatos, que no sólo unificaron las escuelas si no le dieron fuerza a las medidas que surgieron en consecuencia: ¡muchas escuelas y compañeras pararon!
Sigamos el camino de la organización y la lucha unificando las escuelas. Preparémonos para repudiar el decretazo y actuar ante la posible resolución de la Corte sobre el ítem Aula. Pero también tenemos que plantarnos: No al decreto, reapertura de la paritaria y cláusula gatillo.
No dejemos de exigir igualdad de trato con la paritaria de AMPROS, lo que implica reajuste según la inflación, que está disparada, como lo reconoce el propio gobierno, bono de fin de año y recomposición de ítems.