Testimonios. Trabajadores del Garrahan se expresaron contra el ajuste y por la unidad de la izquierda

Durante el paro, arrancado bien tempranito con mate cocido, tortas fritas, fuimos charlando compañeros del Hospital y estudiantes de la Facultad de Ciencias Médicas de la UBA que vinieron a dar su apoyo, con diferentes compañeros de diferentes servicios y turnos para que nos cuenten cada uno por qué paraban en este contexto y cómo ven al gobierno nacional.

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Frente a esto, un camillero nos contaba que paraba porque “no alcanza la plata, estamos peleándola desde que empezó todo esto, con todos los gobiernos que fueron cagándola uno tras de otro…. el nivel de vida es cada vez más elevado y no alcanza. No tenemos una palmadita en la espalda, sí tenemos un bono de miseria que primer que no llega y si llega es miserable. Es como una cargada es lamentable”.

Otra compañera de Transplante hepático, con mucha bronca, nos comentaba que para porque “estamos en una crisis salarial terrible, además por la insalubridad que no nos quieren reconocer“. Por otro lado, nos compartía su opinión del gobierno y nos decía que para ella “está totalmente sordo, o escuchan y hace que no nos ven porque la salud pública está muy empobrecida a nivel salarial y personal.

Otra compañera enfermera del servicio de Oncología del Hospital compartía: “Nosotros trabajamos en oncología y nuestro sueldo está al límite de la pobreza. Somos esclavos de este hospital, trabajamos con la mitad del personal que había y llevamos adelante todo pero nos superó nos estresó, nos enfermó y estamos cansados porque deberíamos ser reconocidos”. Nos contaba que parte de su cansancio es también ser invisibilizados por el gobierno y agregaba: “estamos cansados, de que los sindicatos arreglen a puertas adentro nuestro sueldo. Cuando no llegamos a pagar los alquileres, ya no podemos pagar una prepaga”.” Esto afloró ahora (por el paro) porque nos vamos sumando y nos vamos indignando”. Pero a su vez recalcó la importancia de la unidad de las y los trabajadores que hoy se podía sentir en el Hospital, “de todo esto algo positivo que sacamos es la unión”.

En este mismo sentido una instrumentadora quirúrgica del hospital nos contaba: "El gremio que más tiene fuerza, por ser la mayoría en este hospital es UPCN, y es el que arregla acuerdos siempre por debajo, nunca discutidos, arreglado entre ellos y después aparecen carteles que dicen ’ganamos el 45%en 8 cuotas a finalizar de cobrar en febrero del año que viene’... A esa altura la inflación se comió todas esas cuotas".

Otra compañera técnica nos expresaba su disconformidad con el salario y las condiciones laborales y que por eso estaba parando. Pero además agregaba que “este es un gobierno que fabrica pobres, se olvidan de la salud, de la educación, nunca le dieron bola, pero en este momento le dan menor pelota”.

Una compañera enfermera del servicio de COVID nos agregaba con bronca y tristeza: “Siento que el gobierno nos está dejando desprotegidos como personal de salud, por todas las muertes de los compañeros, gente querida que ha dejado su vida en esta pandemia”. Otra enfermera del mismo servicio expresaba también: "El gobierno no reconoce el trabajo de quienes estamos en el sistema de salud, se llenan la boca con que somos esenciales y no tenemos un reconocimiento salarial, ni nacional, provincial ni municipal, acorde a lo que hacemos, yo tengo hijos chiquitos y en casa no alcanza la plata, y acá en el hospital aumento la carga, hacemos multitareas".

Por otro lado, frente a la deuda impagable que nos dejó el macrismo y este gobierno que nos ajusta y nos empobrece para pagar la deuda, les consultamos ¿Cómo veían que pueda surgir una alternativa fuerte de unidad de toda la izquierda que enfrente esta situación, una tercera fuerza, una alternativa política de las y los trabajadores?

Coincidían en sus planteos y nos decían “ya es hora de que haya una oposición, en estos momentos estamos en un punto de quiebre como sociedad y necesitamos una fuerza…, no pueden seguir siempre los mismos no puede haber siempre dos caras”. Varios de ellos coincidían y uno decía que “los gobiernos van pasando y siempre ajustan a los estatales, a los trabajadores de salud, a los maestros y nosotros estamos cansados de ser el soporte del resto. Porque los políticos de siempre se aumentan el sueldo y a nosotros nos dan un básico de miseria. La izquierda tienen que ser más fuerte y más unida”. Y otra compañera agregaba: “La unidad de la izquierda está muy bien, siempre nos han apoyado y está perfecto, necesitamos el apoyo de gente que tenga ganas y conciencia de lo que hacemos día a día”. Así mismo otro compañero enfermero nos decía: "Nosotros agradecemos que sea la izquierda la que está acá, y tienen que estar unidos para pelear por las bancas que permiten visibilizar lo que no se ve afuera, lo que los medios ocultan, y apoyen la lucha por nuestros derechos".