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Red Internacional
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LA HERMANA DE LUCIANO ARRUGA. Vanesa Orieta sobre la criminalización de la juventud y la libertad a Milagro Sala

Entrevista a días de cumplirse 7 años de la desaparición de Luciano Arruga. Continuidades en el aparato represivo de Scioli, Vidal y Macri, la lucha por Justicia por Luciano hoy, y el pedido de libertad inmediata a la dirigente de la Tupac Amaru.

Martes 26 de enero de 2016

El caso de Luciano se ha convertido en un símbolo de la criminalización y la estigmatización con las que el Estado y las fuerzas represivas tratan a miles y miles de jóvenes de las barriadas populares de nuestro país. Un caso que toca de lleno al entramado de impunidad policial, política y judicial. Ante un nuevo aniversario de su desaparición y a un poco más de un año de haberlo encontrado, luego de una incasable lucha, que continua, contanos sobre esa historia de lucha de sus amigos y familiares

  •  Esta lucha comenzó inmediatamente después que Luciano desapareciera. La realidad es que a medida que íbamos avanzando nos encontramos con bastantes trabas, para lograr que se desarrolle la investigación según lo que exigiamos: investigar a la Policía Bonaerense. Al comienzo, presentamos denuncias concretas en relación al acoso que venía sufriendo Luciano después de haberse negado a robar para un grupo de policías y las detenciones que había sufrido y nuestro temor a que su desaparición tuviera que ver con el accionar de efectivos policiales, y aun así, la justicia determino darle la investigación a la misma Policía que denunciábamos.

    Estas metiendo a quienes estamos denunciando en la investigación, inmediatamente lo que van a hacer es tratar de borrar cualquier pista que conduzca a ellos. Y también tratar de desviar el verdadero camino de investigación y de acceso a la verdad, que se vio bastante obstruido en este aspecto.

    El trabajo de familiares y amigos fue muy paciente, y una vez que pudimos visibilizar el caso, pudimos empezar a tomarlo como el ejemplo de una problemática y al mismo tiempo familiarizarnos con otras causas que seguían la misma lógica: el entorpecimiento por parte de la justicia, la burocracia del sistema político y las complicidades. También logramos legitimar nuestra denuncia y encontrar apoyo en diferentes organizaciones sociales y políticas, organismos de derechos humanos, que si bien no fueron todos fueron muy importantes. Y la sociedad fue evolucionando también a medida que nosotros íbamos creciendo con nuestra denuncia, un sector empezó a entender y a correrse de esa mirada que discrimina y criminaliza a los jóvenes humildes, de este capitalismo perverso, que desde los medios de comunicación y desde algún sector del poder judicial y político fomentan esa visión.

    Nosotros con nuestra lucha tan solo estamos mostrando un camino, humildemente, no nos creemos vanguardia ni los únicos, sino que hemos tomado la lucha de muchos padres, madres que con anterioridad se levantaron. Como el caso Bulacio, con su abuela que tanto ha militado la causa de su nieto, hablando de la razias y de cómo la Policía torturo a Walter en una comisaria. Hay un montón de casos anteriores que nos hicieron entender que esto no se trataba de algo que nos tocó sólo a nosotros, sino que se trata de una lógica que nos toca de lleno a los sectores más humildes. Creemos -también por la experiencia de madres y de abuelas que se han organizado en otros momentos denunciando el genocidio- que la única vía es la de organización y de lucha.

    Luego de la condena de 10 años de prisión al policía Torales por la figura de torturas, sobre los hechos de septiembre de 2008, que fue muy importante. ¿Que avances hubo en la causa por la desaparición de Luciano?

  •  Eso en sí mismo es un avance. Porque nosotros denunciamos que Luciano primero sufre el ofrecimiento de parte de efectivos policiales de salir a robar para ellos y esto es lo que ocasiona muchas detenciones, incluída la del 22 de septiembre de 2008, por eso es que no la analizamos por separado.La condena es una condena justa y para nosotros es un antecedente clave que debería marcar el rumbo que siga la investigación que tiene que ver con la desaparición forzada, y queremos que la justicia investigue que paso realmente ese 31 de enero de 2009. Nosotros seguimos sosteniendo que hay que investigar a la Policía Bonaerense, pero también a la Policía Federal por todos los hechos posteriores. sabemos que la única forma de que se pueda lograr es con nuestra constancia y con nuestra capacidad de organización y de lucha y que muchos otros pidan junto a nosotros verdad y justicia.

    En una entrevista durante la campaña del ballotage en La Izquierda Diario planteaste que “Gane quien gane, el control en los barrios y a los jóvenes pobres está garantizado" ¿Cuál es la herencia en cuanto a lo represivo que ves hoy a un mes de un nuevo gobierno?

  •  Por su puesto que el nuevo gobierno es lo peor de la derecha, pero nosotros y muchos otros vienen planteando con anterioridad como emergencia hablar de lo que ocurre en los barrios, de la criminalización de la figura de los jóvenes. Hace mucho tiempo que se ha instalado esto de que el barrio es peligroso, de que las villas están cargadas de violencia, de que nuestros jóvenes son peligrosos y esto dio la posibilidad de que se avanzara mucho en materia de control por parte de fuerzas de seguridad portando armas de grueso calibre, mientras hay muchos niños y niñas que crecen en situaciones de exclusión y vulnerabilidad y controlados por las fuerzas de seguridad que nosotros denunciamos como parte del “problema de la inseguridad”, la trampa está perfectamente armada y esta sociedad no ha terminado de despertar. Tiene que ver con todo lo que ha generado el genocidio, se tortura, se desaparece se mata con total naturalidad y ante la mirada pasiva de gran parte de nosotros.

    Entonces en ese sentido entiendo que no hay un cambio, y que si no empieza a surgir una reacción las medidas de control se van a ir implementando cada vez con más dureza.

    Si vos me preguntas a mi como surge en los barrios la problemática de violencia institucional te diré que desde la apertura de la democracia hasta hoy eso no ha cambiado sino todo lo contrario, se va agudizando. Pero nosotros hemos denunciado al Gobierno de Daniel Scioli y lo seguimos denunciando porque es un actor intelectualmente responsable de lo que ocurrió en la provincia de Buenos Aires.

    Denunciamos a lo que fue en ese momento el kirchnerismo por un montón de cuestiones que tiene que ver con el trato a los familiares. No solamente a nosotros, a muchos otros, que denunciaron esta problemática y que no encontramos en ese gobierno - que creíamos un poquito más hermano con esta problemática de violación a los derechos humanos - ese amparo que quizás hoy nos permitiría posicionarnos de una forma diferente frente a un gobierno como el de Macri. Se nos impidió poder avanzar, no se nos escuchó y creemos también se ocultó y en este sentido se sigue avanzando, pero como se viene avanzando hace muchos años con relación a esto.

    Poco más de un mes de gobierno macrista, donde estuvo la represión a los trabajadores de Cresta Roja, los municipales de la plata que reclamaban frente a los despidos en el estado, y la detención de Milagro Sala. Y donde también se declaró de emergencia en seguridad y la nueva Ley de Derribo. ¿Cuál es tu opinión sobre estos temas?

  •  Es una avanzada, es fortalecer más lo ya que se venía implementando. Años antes se votó una Ley Antiterrorista, o en la provincia el ex gobernador Daniel Scioli había declarado la Emergencia en Seguridad y se estaba invirtiendo un montón de dinero en seguir controlando la vida de sobre todo de las personas que necesitan que se invierta ese dinero en educación, en salud, en trabajo. En ese aspecto nos encontramos con medidas que tiene que ver con más de lo mismo. Poco a poco la Policía y la Justicia van adquiriendo más herramientas para que tarde o temprano a vos te puedan parar en la calle por la mínima sospecha y esto es lo peligroso.

    En ese sentido estuvo el fallo de la justicia Porteña que habilita a los policías a pedir DNI..

  •  Claro, y cargado de una enorme hipocresía porque los funcionarios dicen que no van a perseguir por portación de cara pero nosotros los que vivimos y pateamos la calle sabemos que eso no se va a dar así sino que está instalada la criminalización y la discriminación y que van a ir precisamente por las personas que tienen determinadas características que las hacen “sospechosas”, y no solamente a los pibes de nuestros barrios sino que van a caer los bolivianos, los peruanos, los paraguayos, se está generando todo un clima para salir casi a la pesca de personas. Pero cuando hablo del control y la represión a los pibes del barrio, estoy hablando también de que eso va a caer sobre los trabajadores, o sobre los militantes. Todo es parte de una gran lógica perversa de este sistema. Cuando hablamos de represión no hablamos de algo sectorizado, es la misma represión y tarde o temprano la gente del barrio va a tener que ir a agarrar el abrazo del trabajador y del militante y entender que sino el enemigo va a avanzar y va a ir por todos. Este momento es bastante particular también, y no estoy diciendo que dejemos nuestras ideologías de lado, sino que hoy el enemigo está avanzando fuertemente y ante eso uno tiene que tener una estrategia para que no sigan avanzando en criminalizar la figura de diferentes sectores sociales para poder avanzar con la judicialización de ellos. En particular quiero decir que queremos la libertad inmediata para Milagro, incluso con todo lo que tengamos que discutir con Milagro o con la Túpac que no se comparten desde formas de organización hasta maneras de lucha, pero nosotros siempre vamos a estar defendiendo lo que tenemos que defender. Evidentemente hay poderes muchísimos más groseros que quieren empezar a adoctrinar, y esto significa la posibilidad para esos poderosos de iniciar un camino en ese sentido.

    Desde tu experiencia de incasable lucha, cómo pensas que hay que enfrentar la política de ajuste y represión que planea seguir profundizando el Gobierno de Macri

  •  Uno está viendo que los que están sufriendo son los pobres que nos les alcanza el mango para un carajo y que no le pueden dar de comer a sus hijos y eso a uno le hace perder la cabeza y pensar que hay que reaccionar. El macrismo está empezando a tocar el bolsillo de la clase media también, y que agudizada la crisis van a empezar a aparecer algunas situaciones nuevas. Y nosotros somos apenas un grupo de familiares que habla de las cuestiones que tiene que ver con los jóvenes, pero voy empapándome de lo que va pasando, enterándome de que hay tantos trabajadores que pierden su empleo. Es necesario salir a la calle como medida primera para empezar a discutir algunas cuestiones y tendríamos que buscar espacios en donde discutir el como que se hace fundamental también y entender que este enemigo es un enemigo que va por todo y que no está muy interesado en negociar con el hambre de la gente y tiene que encontrar frente a ellos un poder social que exija y que pida el respeto de los derechos.

    Este 30 de enero volverán a realizar un festival con el apoyo de las organizaciones que vienen acompañando a lucha en Lomas del Mirados. Cuyo título es “A Luciano lo mato la Policía, lo desapareció el Estado y lo encontramos luchando"

  •  Si, Invitamos a todos el próximo 30 de enero en la plaza de Lomas del Mirador “Luciano arruga” al festival a partir de las 10 y hasta las 20 hs, donde va a haber distintas actividades culturales, paneles de debate y la presencia de muchísimos familiares de distintos casos del interior y participación de distintas organizaciones sociales y políticas.