Precarización como alternativa a las conductas antisociales. La Guardia Nacional contra migrantes no es subordinación, sino "cooperación".
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Miércoles 23 de octubre de 2019
Entre los temas abordados en la conferencia matutina de hoy estuvo la inseguridad. Al respecto, López Obrador mostró una gráfica del INEGI en la que, según la institución, se ha logrado frenar la tendencia al incremento de la violencia. Lo anterior, a pesar de que, como señaló una reportera, el 2019 se califica ya como “el año más violento en la historia de México”, o como se maneja en medios, desde la Revolución.
AMLO volvió sobre el argumento de que el problema de la violencia no se puede resolver de la noche a la mañana, y habló de la política de los gobiernos anteriores de no darle opciones a los jóvenes, de llamarlos “ninis” y que cuando tomaban el camino de las conductas antisociales se les masacraba.
Según el Presidente, el 80% de las acciones del gobierno contra la violencia tiene que ver con programas de “bienestar”.
Con el programa Jóvenes Construyendo el Futuro, el gobierno de la 4T pretende solucionar el problema de la falta de acceso a la educación y el desempleo en la juventud. Sin embargo, se niega a aumentar el presupuesto a las universidades públicas y cerca del 90% de aspirantes a la educación superior siguen sin poder acceder. Por otro lado, en los empleos otorgados mediante este programa, no sólo se regala el trabajo de los jóvenes a los empresarios (quienes además, en muchos casos, sacan tajada de los sueldos que paga el gobierno con el erario público), sino que los contratos son como aprendices, sin derechos.
En lugar del camino de las “conductas antisociales”, lo que el gobierno ofrece entonces a la juventud es resignarse al trabajo precario. Este es el “bienestar” que se busca con programas como Jóvenes Construyendo el Futuro.
Otro de los temas que destacó en la conferencia fue Culiacán. Sobre esto, López Obrador dijo que todos los gobernadores han apoyado al gobierno federal, y que en Sinaloa han trabajado de manera coordinada.
Respecto a las intenciones del gobierno de volver capturar a Ovidio Guzmán, el mandatario afirmó que existen diversas solicitudes de extradición por parte de Estados Unidos. Sin embargo, dijo, “nosotros somos un gobierno soberano, no nos guiamos por la políticas que nos imponen otros gobiernos, nosotros actuamos con libertad. Sí existe cooperación, porque en este tema como en otros: la migración, el contrabando, el narcotráfico, existe cooperación, pero no somos colonia de ningún gobierno extranjero”.
Así, la utilización de la Guardia Nacional para perseguir y detener migrantes, que refleja claramente la subordinación del gobierno mexicano a una exigencia de la Casa Blanca, es presentada como “cooperación”, en una formulación que, además, pone en el mismo nivel a la migración, al contrabando y al narcotráfico.
Volviendo a Culiacán, además de continuar explicando las razones por las que se decidió suspender el operativo, como de costumbre AMLO le dio un tono religioso a su discurso, hablando de amor al prójimo, de moralizar la vida pública y de que quienes lo critican son los mismos que van a la iglesia a “darse la paz”.
De esta forma, con dimes y diretes por la suspensión del operativo para capturar a Ovidio Guzmán, y mientras se promueve la idea de la “sabia” decisión del Ejecutivo, la discusión se desvía hacia la letalidad o no de los operativos, naturalizando el problema de fondo que es la continuidad de la militarización del país y sus nefastas consecuencias, por más que en el futuro se planeen mejor los operativos.
La solución efectiva al problema del narco sólo podrá venir con medidas como la legalización de las drogas y la expropiación de narcotraficantes, políticos y empresarios coludidos, basadas en la movilización y la autodefensa del pueblo trabajador, algo que el gobierno de la 4T está lejos de impulsar.