En el día de ayer se realizó el cortejo de despedida al Espacio cultural Bataclana que también concentró los pedidos por la declaración de la Emergencia Cultural y el no cierre de espacios. La convocatoria fue lanzada desde el colectivo Bataclana junto a Circo en Escena y adhirieron diferentes organizaciones y artistas en su apoyo.
Jueves 27 de agosto de 2020 23:52
La movilización que recorrió el circuito céntrico de la ciudad hasta las puertas de la sala en desarme, fue una demostración del malestar que recorre a todos los sectores de la cultura. Remarquemos que en el marco de la pandemia y el aislamiento obligatorio, las salas, les artistes y trabajadores de la cultura, vieron perder sus ingresos provocando una caída en las posibilidades de sostenimiento. El ejemplo del cierre de Bataclana desnuda las brutales condiciones en la que se encuentran los sectores de la cultura.
Entre los pedidos y exigencias que se podían leer y escuchar, se encontraba la necesidad de la declaración de la emergencia cultural. Salarios de cuarentena de 30 mil pesos. Apoyo al sostenimiento de las salas y espacios culturales. Exenciones impositivas, tributarias y de servicios. Impuestos progresivos a las empresas OTT para conseguir los presupuestos para los planes de contingencia, entre otros. Recordemos que en el Congreso Nacional solo se ha presentado un proyecto de emergencia con el nombre de Artistas ante la Pandemia, firmado por Nicolás Del Caño y Romina Del Pla que en el mismo se condensan estos pedidos también.
De la marcha participaron alrededor de 400 artistas vestuarizades y público en general solidario con la acción. Si bien no es la primer acción de los colectivos culturales, sí fue la más significativa por su nivel de concurrencia y por el sentir en el imaginario colectivo de lo que deja como huella el espacio artístico, cultural y político Bataclana.
Casi 14 años de resistencia como sala artística auto-gestiva, con un perfil claro e identificable ante muchas causas sociales, obreras y populares. Como cada 24 de marzo, cada marcha de la gorra y contra el gatillo fácil; por la defensa de los puestos de trabajos en luchas obreras emblemáticas (de IVECO a Minetti), contra los desmontes y el Fuera Monsanto; por la lucha por el derecho el aborto y contra la violencia hacia mujeres y disidencias. Acompañando activamente procesos como las luchas docentes y estudiantiles; entre tantas otras causas que marcaron su perfil de sala con compromiso político y social.
Al cierre de la jornada se leyeron palabras de apoyo y adhesión a Bataclana como las de la Agrupación de Personas Trabajadoras del Circo de Córdoba:
“¡Cierra Bataclana! Nos duele, nos interpela. Nos habla de la soledad de los espacios independientes y de los Estados ausentes.
Bataclana para nosotros representa un lugar de encuentro, de construcción colectiva, pensamiento en acción, luces, risas, aprendizajes, presencia en la comunidad, enlace con el barrio, les vecinos y les guaches. Bataclana es espacio de resistencia y compromiso con las causas populares. Como contra el gatillo fácil y la gorra. Que hizo de la unión del arte a la vida un faro”.