El Juez de Control Rodolfo Fernández, ordenó hoy el cese de prisión preventiva de Milagro Sala en el marco de la llamada "Megacausa". Sin embargo, continuará detenida en su domicilio por la causa "Pibes Villeros", en la que fue condenada a 13 años de prisión y que está para resolver en la Corte Suprema de la Nación.
Viernes 16 de octubre de 2020 16:29
La resolución emitida hoy por el juez Rodolfo Fernández, Juez de Control en lo Penal Económico y Delitos Contra la Administración, implica que finalice la prisión preventiva que la dirigente social cumplía desde el año 2016 en el marco de la “Megacausa”.
Así también el fallo beneficia a otras dos imputadas militantes de la organización social Tupac Amaru, Gladis Díaz y Mirta Aizama. Estas últimas están en condiciones de recuperar la libertad luego de haber cumplido los dos tercios de la condena en la misma causa.
La denomida "Megacausa" o "Causa-Fellner" investiga hechos de corrupción vinculados a la construcción de viviendas y en ella se encuentra involucrados entre otros, el ex-gobernador Eduardo Fellner y un sinnúmero de funcionarios que ejercen funciones en la actualidad como es el intendente de la capital jujeña, el hombre de la UCR, Raúl “Chuli” Jorge.
La resolución del Juez simplemente aplica lo establecido por la legislación penal que determina que una persona no puede estar privada de su libertad con prisión preventiva por más de dos años, es decir sin tener una condena que la declare culpable. Esta resolución llega dos años después y con un trato diferencial para los funcionarios, ya que ninguno estuvo detenido hasta la actualidad como las dirigentes sociales.
Milagro Sala se encuentra privada de su libertad desde hace casi 5 años, durante muchos años estuvo presa sin una condena y ninguna de ellas se encuentra firme, es decir que aún deben ser revisadas por instancias superiores fuera de la Provincia de Jujuy.
Este es el caso de la causa "Pibes Villeros" en la que fue condena a 13 años por los tribunales de Jujuy y que ahora está en la Corte Suprema de la Nación para ser revisada.
Recordemos que la dirigente de la Tupac Amaru fue detenida en enero de 2016, apenas había asumido Gerardo Morales como gobernador de Jujuy. La causa contravencional con que se inició su detención fue por un acampe en la Plaza Belgrano y desde esa fecha fueron armando nuevas causas con una justicia a la medida del Gobernador, estableciendo un régimen policíaco para perseguir a trabajadores, sindicatos organizaciones sociales y la izquierda.
En el día de ayer organismos de DDHH se reunieron con el presidente, Alberto Fernández, y le recordaron que Milagro Sala sigue detenida, al igual que otras y otros integrantes de su organización.
La exigencia por su libertad que realizamos desde el PTS-Frente de Izquierda, sigue en pie, porque más allá de las diferencias políticas con su organización, su detención ilegal ha sido utilizada para avanzar sobre el derecho a la protesta contra la clase trabajadora, la juventud y los pueblos originarios. Cuestión que con la crisis agravada por la pandemia se cobra en la represión cada vez más sistemática de la Policía que sigue las órdenes de Morales contra familias sin techo e incluso en localidades donde dirige la intendencia el propio PJ, como ha sido en Palpalá donde reprimieron a miles que se movilizaron por “ni una menos” o sobre familias que se asentaron ante la falta de vivienda.