Durante los últimos años, en la provincia de Santa Fe, los índices de violencia contra las mujeres alcanzaron valores muy altos, con expresiones de violencias extremas que requieren respuesta inmediata, herramientas de intervención con perspectiva de género y recursos materiales que garanticen los derechos Humanos de las mujeres.
Miércoles 5 de julio de 2023 12:27
PH: Radio Gol
A dos meses de la desaparición de Mónica Aquino, en la ciudad de Santa Fe, seguimos manteniendo el reclamo por el esclarecimiento del caso y su aparición con vida.
El gobierno de la provincia dispuso, con bastante retraso, la suma de un millón de pesos como recompensa a distribuir entre quienes aporten datos útiles, relevantes y decisivos sobre el paradero de la joven de 30 años, madre de cuatro hijos, ausente de su domicilio del barrio Varadero Sarsotti desde el cinco de mayo. Además, desde el Ministerio de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos se garantiza mantener en secreto la identidad de quienes sean adjudicatarios de la recompensa. El lugar donde deben aportarse los datos es en la sede de cualquiera de las Fiscalías Regionales del Ministerio Público de la Acusación.
El miércoles 28 de junio, el juez de la Cámara de Apelación en lo Penal de Santa Fe, Fabio Mudry confirmó que los tres imputados en la causa iniciada por la desaparición de Mónica Aquino permanecerán en prisión. Los mismos fueron imputados por los delitos de explotación sexual y amenazas contra la víctima, en un contexto de violencia de género.
En distintas declaraciones, la fiscal Del Río Ayala señaló el grado de sometimiento y violencia que sufría Mónica. “Hugo Pérez vigilaba todos los movimientos de su pareja, la amenazaba con matarla a ella y a sus seres queridos y la sometía a golpizas constantes”. La Agencia de Investigación Criminal (AIC) incluso secuestró una cuchilla con sangre de Aquino. Al respecto, la fiscal explicó que el arma fue utilizada diez días antes de la desaparición y confirmó que la mujer recibió asistencia médica. [1]
La búsqueda de Mónica Estefanía Aquino se mantiene sobre dos hipótesis principales. La primera es que fue vendida o captada por una red de trata de personas. La alternativa, es que la asesinaron y ocultaron el cadáver. Al no tener información suficiente para determinar cuál es la circunstancia, deben investigar las dos líneas y seguir todos los datos de ambas, con la misma eficiencia. Lo que sí descartan es que se haya ido por su propia cuenta.
Este hecho provocó gran conmoción en el barrio de la víctima, y puso de manifiesto las condiciones de abandono y necesidad que padecen los habitantes de la barriada ubicada a la vera del río Salado. Allí, muchas familias viven del cartoneo y cirujeo debiendo, en muchos casos, recurrir a merenderos y comedores para poder alimentar a los niños.
La realidad de este barrio se asemeja a tantos otros de la ciudad capital y de la zona llamada Gran Santa Fe. Según datos oficiales, la tasa de desocupación aquí, al término del primer trimestre del 2023 se ubicó en el 7,3 por ciento. Creció un 0,4 por ciento con relación al último trimestre del año pasado, cuando el Instituto Provincial de Estadísticas y Censos había informado una desocupación del 6,9 por ciento. El aglomerado urbano Gran Santa Fe, conformado por las localidades de Santa Fe, Santo Tomé, Recreo, Sauce Viejo, San José del Rincón y Arroyo Leyes cuenta con 18 mil desocupados, mil más que los registrados en la última parte del 2022. [2]
Por otra parte, en la provincia de Santa Fe, durante los últimos años, los índices de violencia contra las mujeres alcanzaron valores muy altos. Argumentando la necesidad de investigar y resolver casos relacionados con violencia de género y femicidios se creó, en el año 2021, la Brigada de Femicidio, de la Agencia de Investigación sobre Trata De Personas y Violencia de Género, dependiente del Ministerio de Seguridad. Esta dependencia trabaja en conjunto con la fiscal de delitos contra la integridad sexual, Alejandra Del Río Ayala. A dos años de su implementación, la falta de resolución de este caso, de no poder disponer de mayores recursos en operativos para la búsqueda de Mónica, ni de mediar para conseguir de manera inmediata la recompensa por información, relativiza el balance positivo de su funcionamiento declarado en su página oficial.
Al momento, los resultados obtenidos en la investigación no satisfacen las demandas de los familiares que siguen realizando cortes de calles, marchas, vigilias y recorridos por distintos despachos, donde quieren tranquilizarlos de que se está haciendo todo lo posible. Familiares, amigos y vecinos no cesan en la búsqueda y reclaman que se pongan a disposición de la causa todos los recursos necesarios para encontrarla. Los hermanos de Mónica han declarado que saben que se está trabajando, pero en forma muy lenta.
La violencia contra las mujeres es una problemática social cada vez más compleja y demandante, requiere de mayor disposición de recursos materiales y humanos capacitados, así también como de voluntad política. No sólo de quienes desde el gobierno, en época electoral, no hacen referencia al caso ni a lo que se está haciendo para encontrarla. También es importante que desde el movimiento de mujeres se continúe visibilizando el caso, solidarizándonos con los familiares y amigos de Mónica, para evitar que los casos de violencia de género y femicidios sean jerarquizados de acuerdo a las relaciones e implicancias políticas.
Debemos insistir en denunciar que el Estado, gobiernos, ministerios y la justicia, son responsables cuando hechos como éste ocurren luego de señales previas de violencia de género, de extrema vulnerabilidad y explotación; cuando las necesidades urgentes de refugio, trabajo, independencia económica y hogar propio de muchas víctimas de violencia para escapar a este destino, no son resueltas.
Mónica Estefanía Aquino vive en Santa Fe, tiene tez trigueña, ojos de color marrón oscuro, cabello castaño y mide 1,54 metros. Como seña particular de su descripción física se destacan dos lunares en el cuello. Cualquier información sobre el paradero de la joven sea presentada en sus oficinas de Mendoza 3443 (ciudad capital) o Balcarce 1145 (Rosario). También se puede colaborar con datos enviados a [email protected] o mediante las líneas telefónicas 3425357756 y 0800-5553348.